Mi Novio Un Mafioso +18 (kookmin AU)

†26†

—¡JK, JK, despierta JK…. Dormilón—la risita de Jimin hizo que el varón abriese sus ojos de una ves.—¿Te pasa algo?—no sabía que pasaba, si era un sueño, solo sentía la calidez de aquellos labios dulces besando su frente.—no quiero morderte la nariz, pero me duelen las piernas en esta posición—puchereó el menor.

Soltó una suave risa elevándose sin muchos ánimos. De pronto observó a su alrededor, y la fría briza del mar lo despertó de su ensoñación. Jimin le tomó de la mano, y el supo en ese instante que había muerto ¿No es a si?.

Estaba en la orilla del mar con el agua cristalina y el viento acariciando sus cuerpos; él olor de aquel joven sentado junto a él, y sus miradas tiernas le llenaban él vacío y dolor que sentía en su corazón.

Beso y acarició con agonía aquellas manitas suaves qué el menor había puesto en sus mejillas, disfrutó del contacto deleitándose con la sensación de tenerlo justo en ese momento.

—jk—abrió sus ojos mirando al menor. Jimin le sonrió acercándose con suavidad tomando sus labios. Era un beso tan real, qué no dudó en ese instante tomar el rostro del menor, besando con ansiedad de sentirlos por siempre; sin embargo aquél roce tibio en sus labios se iba apagando hasta el punto de congelar su piel.

La brisa del mar de pronto se sintió sombría, el ambiente había cambiado con rapidez, su rostro se apartó de aquel blondo que había cautivado su corazón. Tembló en ese instante, tembló al ver a su menor con sangre en su cuerpo, con ojeras en su rostro, moretones. Se levantó confundiendo al menor frente a él. 

—¿Sucede algo JK?—el negó una y otra ves, y cuando quiso alejarse, entonces pudo notar que estaba en él desierto, en la oscuridad, y la sonrisa que el menor había mostrado ahora era de furia, dolor y odio.—¡Me dejaste morir JK, me dejaste solo…cuando prometiste cuidarme!—reclamó el blondo con lágrimas en sus ojos.

—¡N-no, yo…!!—negaba sintiendo su pecho caliente, había un dolor que le asfixiaba el aire le faltaba.

—¡ME MEMTISTE, ME USASTE, SOLO ERES UN ASESINO!—gritó el blondo sonriendo mientras escupía sangre de su boca. JK gritó cayendo de rodillas negando mientras cubría su cabeza.—¡Eres solo una mentira!.

—Jk!—la voz de su padre le hizo elevar su rostro lleno de lágrimas, parecía un niño asustado, desesperado por sentir los brazos de su padre. Abrió de más sus ojos cuando frente a él había un niño de ocho años junto a su mayor.

Ese niño era él.

Los gritos desgarradores de un hombre siendo descuartizado en vida era lo único que aquel niño miraba con sus ojos temblorosos. —A si hijo, es como será tu vida de aquí en adelante. Tienes que ser un hombre para matar. No confíes en nadie, no seas vulnerable. En esta vida o matas o Mueres.—escuchó la voz de su padre hablándole con seriedad.

—¡no, no, NO, NO!—gritó intentando levantarse; quiso extender su mano y salvar aquel niño que temblaba, que iba perdiendo poco a poco su humanidad.

—Jungkook—la voz de Jimin frente a él extendiendo su mano en la oscuridad le hizo estremecer—Jungkook tienes que despertar, tienes que venir conmigo.—suplicaba el menor.—¡Vamos, levántate, ven conmigo por favor!

Quiso elevarse, pero en ese entonces había caído que estaba sin camisa y sus vendas estaban llenas de sangre; sus brazos temblaron y fue inútil, no pudo dar ni un movimiento.