Mi Posesivo Profesor

Capítulo 33

Byron, el abogado de los Koch, desvió la mirada cuando Penny lo miró a los ojos. No puede olvidar que él preparó un contrato para ella y ese contrato no era de los mejores.

El desconcierto de Penny aumentó en cuanto vio a su padre sentado a un lado del director. Su gesto lo dice absolutamente todo, jamás se imaginó una escena así para cuando todo saliera a luz, pensó en miles de escenarios y en ni uno solo se vio frente a su padre, a Byron, al principal y a sus profesores.

-Señores, es mejor seguir esto con los involucrados. Por favor, vayan a atender a sus estudiantes- los profesores se fueron levantando uno a uno, Karla quien no se había sentado, miró a Ebrain y saber que no está arrepentido por lo que está pasando le supo demasiado mal. ¿Cómo puede estar tan tranquilo cuando su vida está a nada de acabar? ¿Acaso no sabe él que ese hombre puede destruirlo con solo un chasquido de dedos? -señorita Koch, tome asiento por favor- Penny rodeó la mesa y se sentó al lado de Ebrain, no piensa actuar con miedo, no piensa dejar al amor de su vida solo, eso nunca.

-No puede ser posible- Williams gruñó al ver a su hija al lado de ese hombre -¿Cómo es posible que un profesor está saliendo con mi hija?- miró al director -¿Desde cuándo no prestan la suficiente atención para evitar situaciones tan desagradables como esta?- el principal tragó con dificultad y se arregló en su puesto con incomodidad.

-No dieron indicios, señor Koch. Los profesores y mi persona siempre estamos al pendiente de todos.

-¡No lo suficiente! ¿Cómo me explica esto? ¿Cómo explica que un hombre casi veinte años mayor que mi hija esté con ella?- el principal se tensó más de lo que ya estaba -ese hombre estuvo a cargo de mi hija en más de una ocasión y creo está de más recordar que para las estatales fue él el único responsable. ¿Qué cree usted que este hombre pudo hacer con mi hija u otra estudiante?- sus acusaciones no le gustó a Ebrain.

-Con todo respeto, señor Koch- Ebrain lo miró a los ojos con seriedad -jamás, en toda mi carrera le he faltado el respeto a una estudiante. Si bien me enamoré de su hija jamás la forcé a hacer algo- Williams se sintió más impotente.

-¿Enamorado? Usted no está enamorado de mi hija, usted solo ve en ella la posibilidad de salir del poso en el que está- Penny miró a su padre incrédula.

-Papá, ¿Cómo puedes decir algo así?- Williams furioso la miró con severidad.

-Es mejor que te calles Penélope, no empeores las cosas para este hombre que sin duda acabará en la cárcel.

-No puedes hacer eso, no soy menor de edad, papá. Lo único que aquí puede enojarte es que te lo haya ocultado todo, nada más. Soy lo suficientemente grande e inteligente para saber lo que quiero en la vida, ¡No has criado a una tonta!

-¡Al parecer sí!- el tono de voz que empleó dejó helada a Penny -al parecer he criado a una mujer de mundo, ¡Se supone que estás saliendo con Alexandre! Yo te vi en tu cama, con él a tu lado, ¿Cómo explicas eso? ¿Cómo me explicarás que mi hija, esa chica inocente que eras hace apenas unos meses hoy día se esté revolcando con dos hombres a la vez?- los ojos de Penny se cristalizaron y la furia en Ebrain creció.

-No puede hablar así de su propia hija.

-¿Y quién me lo va a impedir?- lo cortó Koch -un profesor mediocre que tiene como segundo trabajo ser un sucio bailarín? Usted ha vuelto a mi hija una zorra.

-¡A ella no le habla así!- Ebrain golpeó la mesa -a mí me puede tratar como quiera, pero a su hija no- el principal aflojó el nudo de su corbata, siente que no respira.

-Profesor Torres- intervino -no está usted en posición de reclamar nada- Ebrain lo miró con ojos rojos de la furia.

-Estoy en posición de hacer todo lo que se me dé la maldita gana. Jamás me voy a retractar por lo que siento, sí, quizás sea un pobre desgraciado, pero amo a Penélope y su dinero me importa una mierda. Yo puedo hacerla feliz con lo poco que tengo.