Capítulo 17

739 79 2
                                    

Penny sin entender razones, se soltó de su nana y corrió tras los hombres que se llevan a su padre sin dar explicaciones. Alexandre no tardó en ir tras de ella para detenerla.

—¡No me toques!— chilló Penny cuando la abrazó —no tienes derecho de tocarme, déjame— Alex no hizo lo que ella le pidió.

—Tu padre me ha dicho que cuide de ti y es justo lo que haré— le dijo al oído sosteniéndola con un poco más de fuerza para que no logre soltarse —Penélope, por favor, ya basta— gruñó cuando ella se volvió el doble de inquieta.

Los nervios y el miedo al imaginarse a su padre en la cárcel es el que está actuando por ella. No se imagina sola con su nana, no se imagina tener que quedar en manos de alguien más mientras su padre no está.

—Tranquila, niña— Roxana se la quito de entre los brazos a Alex y fue ella quien la abrazó —lo has escuchado, él estará bien— Penny inició a llorar aterrada, sabe que muchos desean ver a su padre fuera del juego para tomar posesión de la empresa y de ella misma por ser la heredera.

—Llamaré a mi padre para que venga— Penny al escuchar la voz tan relajada de Alex, se despegó de su nana y sin medirse alzó la mano y la dejó caer con todo a la mejilla de Alex quien retrocedió por el fuerte golpe.

—¿Crees que te dejaré hacer esto? ¿Crees que harás posible esa maldita boda? ¡Tú y yo no nos vamos a casar! ¿Y sabes por qué?— lo miró a los ojos furibunda —porque ahora sé que esa maldita boda se trata de tener todo lo que mi padre me dejará y como seré la única heredera ustedes deben tenerme de su lado.

—¿Qué dices?— Alex la miró atónito, pero Penny no creyó en esa mirada —sabes que me enamoré de ti, sabes lo que siento por ti. Yo tampoco quería esa boda— Penny carcajeó.

—Que buenos actores son, tu familia y tú dan asco. Quizás si te hubieras preocupado un poco porque se han llevado a mi padre y no hubieras tenido la necesidad de llamar a tu maldito padre para que viniera aquí, yo no hubiera sospechado nada. ¡No por nada soy una superdotada!— Roxana tomó de la mano a Penny y la hizo retroceder, jamás la había visto así antes y la verdad es que confía en lo que ella dice, siempre ha tenido la destreza de descubrir lo que las personas quieren con solo un acto.

—Penélope, te estás excediendo. Tu padre y los míos han sido amigos toda la vida, no entiendo por qué dices esas cosas, jamás me casaría contigo para tomar posesión de tus acciones. Mírame, mira mis ojos y créeme por favor— Penny llena de rabia y con los nervios controlándola lo miró y esta vez le dio una patada en los bajos, tal y como le dijo Ebrain que hiciera.

—Te hiciste pasar por mi amigo cuando lo único que querías era tenerme como tu novia. Me das asco— soltándose de Roxana subió los escalones.

—Déjela sola, joven, por favor— le pidió amablemente a Alex, pero este mirándola con desprecio negó.

—Tú no te metas criada, eso es entre Penélope y yo. No sé cómo no te han puesto en tu lugar, no deberías creerte parte de esta familia, negra asquerosa— Roxana frunció el cejo y lo vio correr escaleras arriba. Tras respirar profundamente, decidió ir a poner orden entre los trabajadores. Si ese chico le hace cualquier tipo de daño a su niña ella personalmente le dará una lección. Si bien su magia solo la usa para proteger, muy bien la puede utilizar para castigar.

Penny intentó marcar los números de sus amigas, pero ambos suenan fuera de servicio. La desesperación y las ganas de ir por su padre se hacen cada vez más grande. Por último decidió llamar a Ebrain, fue su última opción porque sabe que se formará la tercera guerra mundial por la presencia de Alex y su relación es secreta, pero no tiene opción.

Mi Posesivo ProfesorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora