Capítulo 15- Moscow Mule

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                                        GAVI
Llevaba media hora de reloj buscando a Laia por toda la zona VIP, había varios guardias ayudándome a buscarla. No podía haberse ido a ningún otro lado, la hubieran visto salir de este área. No entendía como podía preocuparme tanto por ella sin ni siquiera conocerla.

Me estaba estresando, estaba a punto de llorar, el sudor era notable en todo mi cuerpo. Desde que noté la falta de Laia había estado intentando buscarla, le había pedido que no se separase de mi pero había visto que había ignorado todo lo que le había dicho. Había tenido que entrar incluso a los baños de mujeres y llevarme una bronca de varias de ellas.

Había hablado con Carlos y me había dicho que la última vez que estuvo con ella había acabado yéndose con Pedri para que le presentara a algunos jugadores. Todos los jugadores estaban en la zona VIP, nadie había salido de este área, excepto Araújo y Ansu pero habían vuelto después de un rato.

No fue hasta que empecé a escuchar gritos provenientes de la entrada al área VIP que me percaté que la que estaba gritando era ella.
Salí corriendo y vi al guardia cogiéndola y llevándosela. Le planté cara, había llegado a mi límite, no tenía paciencia y no podía soportar que se la llevasen así. No sé por qué reaccioné así pero no lo pude evitar.

Quizás debería de haberme controlado más porque estábamos rodeados de gente de la fiesta. Todo el mundo se había enterado de que estábamos aquí y creí que había sido por eso por lo que de repente me empezaron a llegar muchas notificaciones al móvil.
Me aparté un poco de la multitud entrando a unos sofás zona VIP para relajarme. Laia se había quedado cantando en las escaleras de entrada a este área exclusiva, todo el mundo la estaba observando. Incluso desde donde yo estaba descansando se escuchaba a Laia cantar a gritos una de las nuevas canciones de Bad Bunny, "Moscow mule". Estaba dando un espectáculo a todo el mundo, desde luego si seguía así iba a llover al siguiente día. Entré a instagram y vi que todo el mundo no paraba de etiquetarme en una publicación.

No.

No podía estar ocurriendo esto.

Esto no podía estar pasando.

Habían publicado mi vídeo con Laia.

Entré a los comentarios y no pude esperar menos.

"¿Pablo Gavi acosando a chicas? Se me ha caído un ídolo"

"Que asco de tío, el barça debería de tomar medidas respecto a esto y con medidas me refiero a que le echen del equipo lo antes posible"

"🤢🤢🤢🤮🤮"

"Sobrevalorado"

"Esto es denunciable"

"Qué asco de sociedad y de hombre"

"Seguidora menos"

"Que puto asco de persona, pobre chica, se le ve angustiada🥺"

"Buen jugador, mala persona. No te mereces el perdón de nadie IMBÉCIL"

"Me entran ganas de hacerme Madridista"

"Made in La Masía😍😍"

Dejé de leer por mi propio bien, nunca había recibido tantos comentarios de hate en un solo vídeo. De repente Pedri me agarró por detrás y me zarandeó, me había quedado paralizado mirando a un punto fijo, completamente en shock.

-¿Lo has visto no?- le pregunté sin moverme y sin dejar de mirar al lugar que llevaba mirando un rato.

-Sí, tenemos que hacer algo- me respondió claramente angustiado- Pablo, estoy contigo.

-Tengo una idea- me callé un momento, Pedri estaba escuchándome atentamente- pero me voy a tener que saltar una norma del contrato.

-No sé que quieres decir con esto pero hazlo, hazlo ya. El tiempo se acaba, solo es cuestión de minutos que todo el equipo vea el vídeo, y lo que es peor, que lo vean las personas que hay en la fiesta, la gente con el alcohol es muy agresiva.

Salí corriendo en busca de Laia. Pude encontrarla rápidamente debido a que todo el mundo estaba aplaudiendo el concierto que estaba dando.

La divisé a lo lejos cantando y bailando, estaba en la zona baja de la discoteca, rodeada por un círculo de personas bailando y cantando "Moscow Mule".

Bajé corriendo las escaleras. Iba a ser difícil hacerse un hueco hasta llegar a ella con esa cantidad de personas. Me sumergí entre la gente, mientras nos dábamos de empujones. Muchos de ellos me apartaban bruscamente hasta que se daban cuenta de quién era. Otra gente incluso me llegó a ayudar para llegar al interior del círculo.

Allí estaba.

Estaba bailando y cantando el estribillo de la canción.

Empecé a ponerme nervioso. Me temblaban las manos y todo el cuerpo. No sabía lo que iba a hacer. Ella aún no me había visto, yo me acerqué con pasos firmes hacia ella hasta quedarme a pocos centímetros de su cuerpo, le cogí la cabeza con las manos y la giré hacia mí. Acerqué rápidamente mis labios a los suyos en frente de todo el mundo justo en la parte de la canción que decía "no somos na pero estamos envueltos hace rato", irónico ¿no? Empecé a mover mis labios lentamente mientras profundizaba mi beso.

Tenía los ojos cerrados y no sabía cómo estaba reaccionando Laia, pero lo que sí sabía es cómo estaba reaccionando la gente. Vítores, aplausos, risas, estaba saliendo todo según lo había pensado. Además estaba 100% seguro de que nos estaban grabando más de la mitad de las personas que estaban allí presentes.

Laia empezó a mover sus labios más rápido y bajó sus manos hacia mi cuello. Metió su lengua dentro de mi boca, al principio me extrañó pero tengo que admitir que besaba muy bien y me llegó a gustar. Había sido el mejor beso de mi vida. Bajé mis manos hacia la parte baja de su espalda y la pegué a mí con fuerza.

Poco a poco empezó a separarse de mí conforme la canción se acababa, pude notar como nuestros labios se iban separando lentamente. Ojalá hubiera durado más.

Abrí mis ojos lentamente y pude divisar a la mayoría de mi equipo en primera fila del círculo: Ferrán, Pedri, Dembélé, Memphis, Piqué, Eric...
Tenían una cara de shock increíble, habría pagado por haberles hecho una foto y hacer stickers para WhatsApp.

Me puse colorado, agradecí el que estuvieran las luces de colores y no se pudiese notar. Vi muchísimos flash encendidos, en pocos minutos estaría este vídeo en toda la red. Todo el mundo estaba riendo, aplaudiendo y vitoreando la acción que acababa de ocurrir. Todos estaban demasiado felices pero yo no me sentía así, ¿se me había puesto dura? Sí, ¿me había gustado? Sí, ¿acababa de incumplir un contrato? También. Y para colmo la había besado prácticamente sin su permiso.

Me giré para ver cómo estaba Laia y no la pude ver por ningún sitio. Se había ido.

Mi amor prohibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora