Kara había dado vueltas por toda la casa prácticamente durante todo el día, sin encontrar en que ocupar su tiempo.
Lena se había ido esa mañana y según le había dicho el propio Mike durante el desayuno, no iba a regresar hasta el lunes.
Sospechaba que lo que quería era alejarse de ella y, una parte de ella misma se decía que estaba bien. Que era mejor que se largara y la dejara en paz. Pero, la otra parte no podía dejar de pensar en cuanto extrañaba su compañía.
Por ahora no había nada que pudiera hacer. Así que iba a tener que aguantarse las ganas de pelear con Lena por los próximos dos días.
Completamente aburrida, termino su tarde encerrada en el estudio de Mike leyendo un libro, mientras él revisaba en silencio unas fotografías que le había enviado la empresa donde trabajaba. El libro no logro atraparla y en menos de diez minutos ya lo había dejado de lado. Se recostó en el sofá que Mike tenía en su estudio, y siguió con la mirada, los tendederos de fotos que aún conservaba colocados de un lado a otro de la habitación.
La gran mayoría eran fotografías de ella. Algunas otras de lugares que Kara nunca había visto. Luego miro todo el equipo que Mike usaba. No sabía para que eran la mayoría, pero logro reconocer algunas de las cámaras que él la había mostrado semanas atrás.
Su recorrido termino en la terraza. Justo en el telescopio que permanecía cubierto con una lona. Miro a Mike, que seguía demasiado concentrado en su trabajo como para prestarle atención y pensó que no habría ningún problema si lo utilizaba un poco. Lena le había explicado lo más básico para poder usarlo y, no le había parecido tan complicado.
Solo había estado cinco minutos tratando de acomodar las cosas para usarlo; justo iba a asomarse por la mirilla cuando la mano de Mike sujeto con fuerza su brazo y la giro con brusquedad aparatándola del telescopio.
— ¡¿Qué crees que estás haciendo?!—grito con evidente molestia.
— Yo...
— ¡¿Quién te dijo que podías tocarlo?! — volvió a gritar empujándola a un lado para colocar la lona de nuevo sobre el telescopio de manera desesperada.
Kara no entendía lo que estaba pasando, ni porque Mike estaba tan furioso.
— ¡No vuelvas a tocarlo! — grito la amenaza girándose hacia ella, apuntándola con el dedo y apretando la mandíbula.
— Perdona — dijo Kara aun sin comprender — Pero...
— ¡Está prohibido! ¡Nadie puede tocarlo! ¡Nadie!
— Pero, Lena...
— ¿Lena...? ¡¿Uso el telescopio?! — grito Mike sujetándola fuertemente, con los ojos muy abiertos y volviendo a sujetarla con brusquedad por los brazos — ¡¿Lo uso?! — exigió saber mientras sus ojos ardían con furia.
Kara se quedó petrificada. Asustada por la violenta reacción de quien, hasta hacía poco se mostraba dulce y tierno con ella.
— ¡¿Lo uso?!
— No — se apresuró a responder — Solo me dijo lo que era — lo último que quería era meter a Lena en problemas, así que tenía que mentir — Solo... me dio curiosidad. No sabía que estaba prohibido tocarlo.
Mike bufo molesto, la soltó y la hizo a un lado para entrar de nuevo a su estudio.
— Lo siento.
Al escuchar la sincera disculpa de Kara, se giró mirándola con algo de arrepentimiento. Luego suspiro, se acercó a ella y la abrazo.
— No quise gritarte. Pero... no debes volver a tocarlo ¿está bien? — Kara solo asintió en silencio, aun atrapada entre sus brazos — ¿Ahora qué hago para compensarte?
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Don't say Goodbye
FanfictionEn este universo, Lena y Mike son hermanos. Y se encuentran con Kara en las más turbias y raras de las situaciones. Mike, queda fascinado con la joven rubia desde el primer segundo, pero Lena... Lena sabe que involucrarse con ella no les traerá más...