Deseos Prohibidos (Gusu Lan)

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La secta Lan de Gusu es una de las más prominentes del mundo del cultivo, sus discípulos son educados en la exelencia en todas las artes. En el pasado se acostumbraba dejar que los miembros de la familia principal escogieran a su pareja, a su compañera o compañero de cultivo, pero, en las últimas generaciones esto había sido un fracaso, el líder de la secta se casó con una enemiga del clan y su hermano menor permaneció soltero, toda la responsabilidad recayó en los hombros de los dos Lan más jóvenes Xichen y Wangji. A ninguno se le veía prisa por contraer nupcias, así que los ancianos intervinieron para procurar prometidas para ellos.

Sentados en posición de loto, los jades Lan meditaban en silencio. Lan Xichen suspiró profundo.

—Hermano ¿Que sucede?— dijo Lan Wangji

—Lamento interrumpirte Wangji, por favor sigue, yo me retirare— Lan Huan esbozó su encantadora sonrisa

—Tu nunca interrumpes ¿Dime qué te sucede?— cuestionó el segundo jade

—Hmmm... Wangji ¿Estás de acuerdo con la decisión de los ancianos? ¿Escoger a nuestras esposas?—

—Mnh—

—Ahh, no estoy seguro, no quiero casarme aún, y tú, tu eres muy joven, apenas cumplirás 21 años— dijo el mayor pensativo —ademas ¿no tienes inconveniente con no elegir a quien en verdad te gusta?—

—Nadie me gusta— respondió el más jóven

—¿En verdad? Yo habría jurado que te enamoraste hace algunos años, aquel verano, cuando los discípulos de Yunmeng estuvieron aqui—

Lan Wangji abrió los ojos muy grandes y después aparto la mirada, cerró los ojos muy apretados y sin poder evitarlo recordó aquella risa estruendosa que lo cautivó hace unos pocos años.

*Flashback*
—¡Lan Zhan! Ven a divertirte conmigo y mi hermano, iremos al rio— dijo Wei Wuxian con su sonrisa sincera y su mirada llena de vida

—Aburrido— resopló el jade

—Oh, no seas así, vamos, será divertido, te dejare echar un vistazo mientras me sumerjo— dijo el loto pícaramente

—Sin vergüenza— dijo mientras se daba la vuelta y se alejaba, sintió su corazón encenderse cuando alcanzó a escuchar

—Date por vencido, no le interesas, nunca te verá como tú lo ves a él— dijo Jiang Cheng

—Es tan Hermoso cuando es tan frío, ya verás que un día me verá de esa forma, lo prometo—

*Fin del Flashback*

—Te equivocas hermano, no me gusta nadie— dijo mientras sus orejas enrojecian

—Oh, fue mi error, lo siento— dijo Lan Xichen con una sonrisa

Cinco veranos atrás varios miembros de otras sectas fueron enviados a estudiar en Gusu. En ese tiempo Lan Wangji tenía una vida planeada, cultivaria en solitario por el resto de su vida, si algún día una mujer de finos modales y alto cultivo tocaba su cinta entonces la desposaria para darle herederos al clan, había trabajado por toda su vida en ese propósito, nada podría salir mal, era lo que se esperaba de él, era lo que él mismo esperaba de él.
Pero un joven de Yunmeng había cambiado sus deseos. El desaliñado y rebelde Wei Wuxian de la secta Jiang no era nada de lo que Lan Wangji hubiera gustado antes, pero no podía dejar de pensar en él por más que lo intentaba. Soñaba despierto y dormido con abrazarlo y besarlo, con peinar con sus dedos ese rebelde cabello, sentir su respiración cerca y por supuesto con follarlo durante toda la noche. Pero siempre se limitaba a si mismo, escribia y practicaba música o artes marciales para evitar pensar en otro chico de esa forma, sobretodo, en ese chico en particular. Nunca se permitió siquiera tocarse a si mismo para aliviar su urgencia, solo iba al estanque frío a olvidar sus deseos, pero nunca duraba mucho tiempo. Cinco años pasaron pero sus sentimientos no cambiaban. Este matrimonio arreglado era su solución, no pretendía nada más, solo desposarse como tenía planeado desde pequeño, darle herederos a la secta y vivir una vida tranquila y rutinaria ¿con quién? no era importante, quien sea sería buena opción para llevar acabó su plan.

Nunca podría aceptar que alguien rompió su barrera y cambió sus planes, mucho menos un chico, mucho menos uno como Wei Wuxian. "Jamás funcionaria de cualquier manera" se decía a si mismo para tratar de convencerse, "solo es curiosidad, son solo sentimientos banos que desaparecerán con el tiempo" pero el tiempo pasaba y aunque no había vuelto a ver al loto, su risa, su aroma y su imagen no salían de su cabeza.

Un terrible arrepiento cruzó por su memoria. Aquel día, después de hacer que castigarán a ambos por pasar la noche fuera de Profundidad de la Nube, cuando lucharon en los tejados por la sonrisa del emperador, nada tuvo que ver realmente con lo que Wei Wuxian hizo, solo trataba de demostrarse a sí mismo que el chico no le importaba, los golpes que le dieron a él mismo le dolieron menos de lo que dolió la paliza que Wei Wuxian recibió. Y peor aún, yendo esa tarde al estanque frío a calmar su mente, dejó salir una lágrima, lágrimas no habían cruzado su rostro desde que su madre murió, que signo de debilidad tan más humillante, la culpa carcomía su corazón. Y por si fuera poco, la aparición de Wei Wuxian en el estanque esa vez, desnudo, frente a él, con el cabello mojado y sonriendo como si ningún rencor le guardara por haberlo hecho apalear. Tampoco se perdonaba la debilidad de haber sido vencido por la tentación y echado un vistazo al cuerpo desnudo de Wei Wuxian, si no fuera por la temperatura del agua, la reacción de aquella vista tan exitante se hubiera dejado ver en su entrepierna, que evento tan más humillante, a pesar de haber salido de ahí sin ser expuesto. Desde ese día todo se volvió aún peor, ahora que había visto a Wei Wuxian sin sus tunicas quería ver más, quería tocar, besar, morder...

Esto no era digno de un cultivador de su estirpe, cada día se sentía como un fraude que solo guardaba las apariencias. Tal vez un matrimonio sería la solución.

Ese mismo día, más tarde, los ancianos de la secta Lan discutían el asunto.

—Enviemos una invitación a cada soltera en edad casadera de las sectas más prominentes—

—Eso sería una desfachatez, escojamos a dos chicas en específico y pidamos sus manos en matrimonio a los líderes de sus sectas—

—¡Que crueldad! ¿Ni siquiera las dejaremos decidir?—

—El matrimonio es solo un contrato, nada mas—

—No hay muchas chicas disponibles en las sectas más prominentes, si solo es un contrato ¿Es necesario que sea una chica?—

—¿A qué se refiere? ¿Esta hablando de chicos? ¿Varones? Que escandaloso—

—Los antiguos libros no prohíben la homosexualidad ¿por que lo haríamos nosotros? además, dijo que solo es un contrato ¿No?—

—¿Y usted piensa que nuestros jades aceptarían acostarse con otro hombre? ¿Hacer prácticas de mangas Cortadas?—

—Pero si ni siquiera les estamos pidiendo su opinión para desposarlos con mujeres ¿Por que lo haríamos si se trata de varones?—

—¡Silencio!— levantó la voz el más anciano se todos —Es verdad, ninguno de nuestros códices prohíbe las prácticas de mangas Cortadas, no hay gran variedad de chicas disponibles, debemos forjar alianzas fuertes unidas por el matrimonio, cualquier soltero o soltera es aceptable, siempre y cuando venga de una secta se alto cultivo—

—Bien, entonces, propongo a los jóvenes Jiang y al heredero Jin, además al segundo maestro Nie—

—Olvide a los herederos, necesitamos alianzas no fusiones, Jin ZiXuan y Jiang Cheng descartados—

—La señorita Jiang está comprometida en matrimonio con el heredero Jin—

—¿Entonces solo nos queda, el segundo maestro Nie disponible?—

—Me rehusó ha hacer alianzas con la secta Wen, seguro hay gente buena entre sus filas, pero no estaré bajo la colaboración de Wen Rouhan—

—No podemos ser tan exigentes entonces, la secta Jiang tiene otro hijo—

—Tan solo es un discípulo, no es un Jiang de sangre—

—Como dije... no podemos ser tan exigentes, discípulos principales, miembros de otras sectas menos prominentes, debemos ampliar nuestra vision—

—La chica MianMian, Luo QinYang es aceptable, discípula en Lanling, hija de una secta menos prominente, también el primer discípulo Nie ¿Cómo es que se llama?—

—¿Se refiere a Meng Yao? El es un Jin bastardo—

—Tu origen no define tu destino, es un cultivador de alta estirpe—

—Bien entonces, enviemos invitación a cada una de esas sectas—

No soy un manga cortadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora