No soy un manga cortada

La Última Flecha

Al día siguiente muy temprano las dianas estaban colocadas en los lugares específicos, los Wen se aseguraron de que hubiera la mayor cantidad de dianas fáciles de alcanzar cerca de su estación y las más difíciles cerca del resto de las sectas, además de esto, pusieron menos flechas en las estaciones ajenas, tarde o temprano se les acabarían mientras que su suministro de flechas era casi inagotable. Las flechas eran irremplazables, cada flecha guardaba un hechizo correspondiente a cada secta, de manera que al dar justo en el blanco la flecha emitiria un rayo de luz al cielo con el emblema de la  secta del cultivador que la disparó, de esta manera todos podrían llevar la cuenta de cuántas flechas acertadas obtenía cada clan.

Había dianas sobre la copa de altos abetos, en escarpadas rocas enormes, dentro de lúgubres cuevas, incluso dianas en movimiento en lomos de animales salvajes y alas de aves. Las reglas eran fáciles, la secta que en conjunto tirara más flechas en el centro ganaría y  recibiría 5 puntos, el segundo lugar 3 puntos, el tercero dos puntos y de ahí hacia abajo un solo punto si más de una secta lograba la misma cantidad de puntos habría una ronda final entre los últimos cultivadores de dichas sectas, así se declararía al ganador.

La competencia empezaría con el sonido del gong con el primer rayo de luz y terminaría de la misma manera cuando el sol se ocultara tras las montañas.

Cada secta se encontraba en su respectiva estación, con carpas del color de su clan. Los Jin con sus carpas doradas al lado de los Jiang de púrpura, sectas menos prominentes a los alrededores, los Nie con sus carpas plateadas y muy alejado de ellos los Lan con su carpa azul. Por su puesto en la parte más cómoda y fresca los Wen de rojo. Para que la competencia fuera "justa" solo un cultivador por secta debía ir al mismo tiempo, los relevos estaban permitidos pero si un cultivador de la misma secta ponía un pie fuera de la carpa antes que su abanderado volviera sería descalificada la secta entera. Esta competencia estaba sutilmente amañada. Todos lo sabían pero nadie podía probar nada.

Por respeto, el senior más competente de cada clan debía salir primero. Una vez que sonó el retumbante gong, Nie Mingjue, QingHenJun, Yu ZiYuan, Jin GuangShan, Wen Rouhan y otros seniors de sectas más pequeñas comenzaron la competencia.

A pesar de que Yu ZiYuan no era tan diestra en el arco y la flecha, tomó una rápida delantera. Su espíritu competitivo y el gran deseo de poner a su clan en alto le dieron la motivación para ir más rápido que el resto. Seguida por QingHenJun cuya habilidad en el arco era su especialidad, en tercer lugar Wen Rouhan que por supuesto tenía la sopa servida y la clara e injusta ventaja del terreno adecuado para él, en cuarto lugar Nie Mingjue, su especialidad siempre fue el sable, en quinto lugar Jin GuangShan que le estaba causando vergüenza a su mujer, su falta de práctica era evidente, cada que salía a practicar regresaba oliendo a perfumes baratos y con rastros de maquillaje de mala calidad en su túnica. El resto de las sectas pequeñas se disputaban del sexto lugar en adelante.

Pasadas unas horas Yu ZiYuan volvió por el relevo, con ventaja cerrada de dos dianas a su favor y QingHenJun siguiéndola muy de cerca. Pasó el turno  a Jiang Cheng que de todas las disciplinas el arco y la flecha eran sus favoritos. Así mismo Nie Mingjue pasó el relevo a Meng Yao, Wen Rouhan a Wen Xu, Jin GuangShan a su sobrino Jin ZiXun y QingHenJun a Lan Xichen.

En esta nueva ronda los Lan tomaron ventaja, a pesar de que Jiang Cheng disfrutaba de la disciplina más que Lan Xichen el de Gusu tuvo la suerte de encontrar dianas más fáciles y cercanas una de la otra. Los Jin seguían en último, la arrogancia de Jin ZiXun lo puso a pelear con cultivadores de sectas pequeñas por tonterías que le hicieron perder el tiempo. Meng Yao se posicionó en tercero relegando a Wen Xu al cuarto, la astucia del chico era muy superior a la de cualquiera en el lugar.

Pocos minutos antes de que Wei Wuxian saliera a tomar su turno Jiang FengMian se acercó a él

—A-Xian ¿estás seguro que quieres ir? Mi señora vió a Lan Xichen saliendo en relevo de QingHenJun, es obvio que competirás contra el jade menor, si quieres puedo ir yo—