No soy un manga cortada

Reclusión

Los días transcurrieron mientras que Lan Wangji y Wei Wuxian se veían cada noche en el mismo lugar y a la misma hora para darse muestras de amor. Nada había pasado de los besos y las caricias, aúnque ambos se quemaban por dentro por probar algo más. Wei Wuxian moría por ser tocado de nuevo como aquella vez cuando fue paralizado y Lan Wangji no podía esperar a terminar lo que esa noche había quedado inconcluso. Pero cada que la tensión subía eran interrumpidos y debían huir de la escena. Lan Wangji se excusaba diciendo que era debido a que nadie debe estar fuera de su habitación después del toque de queda, que en la profundidad de la nube el contacto íntimo solo puede ser practicado por las parejas casadas o incluso decía que no quería arruinar lo maravilloso de su naciente relación. Pero la verdad era que tenía miedo de cruzar una línea sin retorno, cómo cuando se tocó con Wei Wuxian en la mente, evento que desde la primera noche en la cascada se había repetido cada vez antes de dormir.

Una noche a la orilla de la cascada, ellos dos se besaban cómo todas las noches, los animos se calentaban, Wei Wuxian jadeaba seductor y Lan Wangji trataba de controlarse pero cada día era más difícil.

—Basta— murmuró Lan Wangji —alguien podría vernos—

—Lan Zhan, eso no te preocupó el día que invadiste mi residencia ¿Porque te preocupa ahora?— preguntó el más bajo antes de atacar a lamidas el cuello de Lan Wangji

—Ahh...e...eso fue diferente... M...me disculpo por eso, no debió pasar, detente ahora—

—¿Porque? ¿No te gusta?— preguntó burlón el de Yunmeng

—S...si, me gusta, pero no debemos, nadie sabe sobre esto—

Wei Wuxian se retiró un poco y su expresión cambio a seria

—¿Piensas decirles pronto? ¿Les dirás que me has elegido a mi? Yo muero por escribir a casa y decir que pediras mi mano— dijo muy emocionado

—Y...yo... No sé cómo decirles—

—Pues...solo di que de todos los candidatos elegiste a Wei Wuxian, que te convence más la alianza con el clan Yunmeng Jiang, que te agrado más que nadie...que te gusto...que me deseas— concluyó burlón

—Lo haré pronto, lo prometo—

—De acuerdo... Pero mientras... ¿Estás seguro de que no podemos jugar un poco?— atacó su cuello de nuevo y acarició su pecho sobre la ropa sintiendo rápidamente como los pezones ajenos se endurecían

—Ahh... Wei Ying—

—¿Sabes que adoro cuando me llamas por mi nombre de nacimiento?—

—Wei Ying... Wei Ying... ¡Espera! Alguien viene— lo tomó por la cintura y de un brinco subieron a un árbol.

Un joven hacia si ronda nocturna, pasó debajo de ellos y se acercó a la cascada a beber, mientras que los dos infractores se mantenían en silencio y abrazados en una rama, el chico se fue y ellos pudieron bajar.

—Eso fue... Exitante— dijo Wei Wuxian

—No, no lo fue, no debemos ser descubiertos así—

—Ahh, a veces eres tan inocente... Pero me gustas tanto que hasta eso me excita sobre ti —

—Vamos, es tarde ya, será mejor que nos veamos mañana— concluyó el de blanco ante un puchero de Wei Wuxian

—Mañana será lo mismo, me vas a besar, me vas a acariciar, dirás mi nombre y me mandaras a terminar solo a mi habitación— se quejó el más bajo

—¿Terminar solo? ¿Te refieres a...?— preguntó tímidamente el jade

—Oh vamos, no digas que no lo haces también, se que cuando nos separamos cada noche te vas tan exitado como yo—