No soy un manga cortada

Patriarca de Yiling

Estaba decidido, el clan Jin-Jiang iría a Qishan a mostrar su nuevo dominio sobre las otras sectas, además de contar entre sus filas a tres de los cultivadores más prominentes de la generación actual también estaban los seniors liderados por la Araña Violeta y su poderoso ZiDian, la cereza del pastel: dar a conocer al nuevo integrante que representaba la fusión misma entre la peonia y el loto.

Partieron en caballos y carruajes a Ciudad Sin Noche. Llegando tres días después, Qishan Wen estaba repleto de gente, distintos sectas grandes y pequeñas, carruajes y abanderados con diferentes distintivos y colores, hombres y mujeres, ancianos, adultos, jóvenes y niños. El calor en este lugar era casi insoportable, además el ambiente se sentía pesado, siempre era así cuando un Wen estaba cerca.

Los Jin-Jiang arribaron haciendo alarde de su riqueza y su elegancia usando costosos vestuarios purpuras y amarillos, los miembros de las sectas menos prominentes quedaban asombrados ante tanto lujo y derroche de recursos. Wei Wuxian, Jiang Cheng y Jin ZiXuan lideraban el séquito. Jin ZiXuan usaba una ostentosa tunica amarillo brillante y los lotos pesadas túnicas púrpuras. Wei Wuxian no dejaba de rascarse, el calor bajo la tunica le picaba.

—Wei Wuxian ¡Deja de hacer eso! Has soportado cosas peores—

—Nunca me acostumbre al calor—

—¡Basta! Quédate quieto—

—¿Quien escogió estás ropas tan gruesas para este clima?—

—Muqìn, ya no la hagas enojar, te está viendo—

Al instante Wei Wuxian bajó las manos y volteó a ver a Yu ZiYuan, quien lo veía como si lo retara a quejarse de frente. Los vellos de su nuca se erizaron y sonrió nervioso, se acomodó la tunica y siguió cabalgando tan gallardo como pudo. Yu ZiYuan sonrió complacida y cabalgó detrás con una expresión altiva.

La secta Lan había sido la primera en arribar sin pena ni gloria, carruajes sencillos, caballos blancos, todos sus integrantes vestidos de manera impecable, limpias y aliazadas vestiduras celestes, a su paso parecía que escoltaban a un cadáver por sus expresiones serias y su falta de adornos y bien ese cadáver podía ser Lan Wangji que cabalgaba detrás de su padre y su hermano con su aura depresiva, a estás alturas ya nadie preguntaba, era su semblante habitual.

Un eunuco anunció la llegada de sus sectas.

—Arribando Secta Lan de Gusu, líder QingHengJun, sus hijos Lan Huan y Lan Wangji—

Varias sectas después de ellos

—Arribando secta Jin de Lanling, líder Jin Guanshan y su hijo Jin ZiXuan—

Inmediatamente

—Arribando Secta Jiang de Yunmeng, líder Jiang FengMian y su hijo Jiang WanYin—

Los Lan ya habían bajado de su montura, y mientras daban de beber a sus caballos Lan Xichen levantó la mirada y vió graves problemas acercándose.

—¡Oh no!— Lan Xichen miró a Lan Wangji preocupado quien aún no se había dado cuenta de la situación

Lan Wangji se desconcertó ante la reacción de su hermano, frunció el seño y giró a ver lo que su hermano observaba...

Su corazón se detuvo, por su mente pasó un flashback de todos los momentos en los que estuvo con Wei Wuxian desde la primera vez que lo vió entrando a CloudRecess a los quince años hasta el día que lo vió por última vez en Lanling. Sus ojos se mojaron mientras su cerebro hacia corto circuito. Era Wei Wuxian, su amado Wei Ying, pero más apuesto, más atlético, piel bronceada, sonrisa mas brillante pero ahora con un toque de autoconfianza que lo hacía lucir más sensual, su mirada plateada aún era inocente pero además ahora poseía cierto poder en ella y su aura entera irradiaba fuerza, confianza y un innegable erotismo, o al menos Lan Wangji podía sentir esto último.