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Esta atardeciendo, los cazadores se encuentran descansando ya desde hace rato, hoy tengo un mal presentimiento, así que los dejé descansar desde la hora de comida, estoy sentada en el techo de la recidencia viendo el atardecer.

Unos pasos se aprocciman a mi, volteo tranquila y veo que se trata de Kiojuro.

- Ya volví - es lo que dice con su típico tono y sonrisa.

- Vienvenido a casa - le respondo con una pequeña sonrisa, el se sienta a un lado mío.

- ¿Que ocurre? - Dice preocupado, yo por mi parte lo veo desconsertada - desde hace unos días has estado pensativa, no prestas mucha atencion a lo que te rodea.

- Desde hace unos días e tenido un mal presentimiento y Himejima me dijo algo que me preocupa - le respondo sincera, no tengo por qué guardarle secretos.

- ¿Que te dijo?

- Mencionó que algo grande se aproccima - apartó mi mirada de él y veo el horisonte, ya está anoche siendo - lo e estado pensando y creo que tiene algo que ver con Muzan y las lunas superiores pero no lo sé con seguridad, cuatro de las lunas ya están muertas y no creo que se repongan tan fácil de esto, pero también hay que tener en cuanta que aún quedan las primeras tres sin contar a mis hermanos.

- Tienes razón, pero - toma mi mano y su mirada se enternece tratando de darme seguridad - pase lo que pase quiero estar a tu lado, quiero protegerte y ayudarte en todo lo que te propongas sin importar que, así que - se acomoda para arrodillarse frente a mi, esto me exalta, creo saber a que va todo esto, puedo sentir mi corazón latir a mil por minuto, saca algo del bolsillo de su pantalon- ¿Te casaría con migo? - su cara esta roja y esta sudando levemente mientras que en sus manos hay una cajita abierta  mostrándome un anillo con un diseño hermoso.

- Kiojuro... - No se que desir, no se que hacer veo que el se empieza a desanimar así que hago lo de siempre, lo abrazo por el cuello ocultando mi roja cara en su cuello - Por supuesto que quiero casarme con tigo.

Kiojuro con mi respuesta se emociona, me abraza de la sintura, se para y me da unas vueltas, luego me baja y toma mis manos entre las suyas.

- __, me haces el hombre más feliz del mundo - me dice contento, me pone el anillo y me ve contento, hiba a decir algo más cuando varios cuervos llegan gritando.

-¡Llamado de emergencia! ¡Llamado de emergencia! - Gritan los curvos, Kiojuro y yo nos vemos a la cara por un segundo y a sentimos, corremos por nuestras armas - ¡Ataque en la dependencia Uboyashiki! - esto me deja conjelada la sangre pero rápido corro hacia la recidencia de mi padre adoptivo, Kiojuro me sigue por detras.

" No,no, no, no, no por favor, mantente asalvo, por favor, Uboyashiki" es lo que pienso con desesperación mientras corro.

Ya estamos serca de la recidencia, veo que Sanemi ya está por llegar también cuando...

Toda la recidencia explota, al ver todo la recidencia en llamas pasan freste de mi los recuerdos que hice junto a las personas que habitan aquí, mis padres adoptivos, las cuatro niñas y el niño que me consideran su hermana, huelo el aire, huele a carne y sangre quemada, no lo pude evitar, el impacto de la imajen me hizo vomitar lo que ya hace unas horas había comido, agradezco no haver cenado.

Kiojuro me recoje el pelo, no alcanzó a reponerme cuando siento una presencia abrumadora, Muzan, me recompongo y salgo corriendo a los esconbros de la mancion, veo como Himejima le destroza la cabeza a Muzan mientras que este tiene atrapada a Tamayo. Muzan regenera su cabeza, parece que sólo el sol podrá matarlo.

Lo mataré, sin duda tiene que morir esta noche, sin importar que tiene que ser así.

El saca como unas ramas de rosal e intenta atacar a Himejima pero corto estas antes que algo pase, todos los pilares y Tanjiro por fin llegaron, estamos todos reunidos y listos para atacar cuando, Muzan sonríe maliciosamente y debajo de nosotros aparecen puertas, esquivo donde hiba a caer pero termine callendo en otra.

A tu lado. Rengoku x tnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora