Desde la repentina muerte de Hyeo min, Novia de un Músico poco conocido llamado Kim Hongjoong, el decide escribir una canción sobre ella, que, sin poder anticiparlo le explota la fama de un día para otro. El Sin el afán de lucrar con la canción que...
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Habían pasado al menos un par de meses desde el acontecimiento que había girado la vida de Hongjoong en muchos aspectos. La canción ahora contaba con más de 60 millones de visualizaciones, incluso su canal de música creció al punto de ponerle una verificación y sus demás canciones empezaban a sonar en estaciones de radio, tiendas y super mercados e incluso le nominaban en programas semanales. Era imposible que Hongjoong saliera sin que las personas supieran quien era e incluso decir que se encontraba a un admirador cada que salía era muy poco, literalmente casi cada persona en la calle le reconocía e incluso habían admiradores que lo acosaban por momentos. Está vez no era la excepción.
El se encontraba en su habitación viendo sigilosamente a la ventana que daba con la puerta de la casa a unos fanáticos y ahora más que nada también a unos ejecutivos de empresas, reporteros, etc. Empezaba a sentirse ofuscado de tanta atención. Pero antes de la muerte de Hyeomin el solía imaginarse recibiendo entrevistas sobre su repertorio, encontrándose admiradores en la calle, etc. Era claro que no eran las circunstancias.
Su madre había salido un par de veces a decirle a aquella gente que su hijo no se encontraba para que dejarán ya de acosar su recinto.
Pronto en dos semanas iba a empezar el primer semestre de veterinaria, no podía fingir que aún tenía tanto sentimiento con la música, ya a todas las empresas que le habían escrito correos les había dado una respuesta. "Muchas gracias, pero esta canción era mi retiro de mi sueño músical. Agradezco sus oportunidades".
Sabía que aún así las empresas no se iban a quedar calladas, simplemente empezaba a cansarse de todo lo que conllevaba tener una canción mega viral que aún nadie planeaba olvidar pues al parecer todos se identificaban con alguien que perdieron. Al final tocó demasiados corazones como para que todos supieran que era su último proyecto antes de su retiro.
Solo suspiró cayendo a su cama. Ya había asimilado un poco más la muerte de Hyeomin, su corazón dolía cada vez menos, lo que dolía aún era el tener que alejarse de su sueños, pasiones y anhelos a pesar de no tener presión más que la de el mismo por la culpa que ya era mucho menos pero seguía invadiendolo.
Incluso Mingi había preguntado en varias ocasiones "¿De verdad quieres estudiar eso?" A lo que Hongjoong siempre respondía. "Si, claro, también amo a los animales" pero por primera vez en todo ese tiempo se preguntó a él mismo con sinceridad. " Kim Hongjoong.... ¿Enserio quieres estudiar veterinaria? ¿Luego de que tu carrera musical está tan alta? Es todo lo que soñaste, si Hyeomin estuviera viva tu..." Detuvo su voz interna para reprocharse con su otra voz interna. "Si Hyeomin estuviera viva, si Hyeomin esto, si Hyeomin aquello. Estoy cansado de pensar en ella." Pensó para luego arrepentirse. Claro que la amaba pero ¿Qué ganaba con estudiar lo que Hyeomin quería y no lo que Hongjoong anhelaba? Al final Hyeomin no estaba y el chico debía concentrarse en su vida, porque solo se tenía a él mismo y así sería por toda su vida.
–Mierda ahora que hago – Bufó levantándose frustrado de la vida tomando su computadora.
Entró a la página de inscripciones de la universidad y empezó a desasignarse cursos. Cambió en eso la inscripción de "veterinaria y cirugía" a "Producción musical y audiovisual" asignándose todos aquellos cursos cuyo interés si le llamaba.
