• Fue un orgullo quebrantado, una elegante mano que le cubrió los ojos a conveniencia, y otra amable que le guió hasta encontrar su camino de vuelta a casa.
✨ Zhongli x OC (Charlotte Ragvindr).
✨ Los personajes utilizados en este libro no me pertene...
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ᴘᴇʀғᴏʀᴀʜɪᴇʟᴏs
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En el momento en que Hu Tao no encontró rastro de su empleada barriendo la entrada de la funeraria, encargó el lugar al asesor y fue rumbo a su habitación para confirmar que todo estaba bien, o en caso contrario, esperaba ver en qué problema se había metido, considerando que el día anterior se quejó de su condena y expresó no estar de acuerdo con el Rey Geo y sus leyes, sin embargo, cuando arribó al lugar, Charlotte estaba tirada en su cama y sudaba mientras trataba de dormir con el clima templado de Liyue.
—Oh, no —susurró la castaña.
—Oh, sí —respondió sorpresivamente, llena de gracia cuando en definitiva no era el mejor momento.
Por lo que, impensable le fue a la más joven dejarla a su suerte; le acomodó la cama, abrió las ventanas, sacudió el polvo y colocó un trapo húmedo en su frente, así, también preparó un poco de comida a sabiendas de que su empleada no podía poner un pie en el suelo por esos momentos.
—¿Cómo te encuentras? —cuestionó después de ayudarle a desayunar.
—Con ganas de ya no vivir —expresó la enferma.
La otra levantó los platos y rio mientras tanto, negando su deseo, el que era evidente, no era serio. Lo que no sabía era que parte de su comentario tenía razón; Charlie cayó repentinamente en cama, pues no era una novedad el verse estresada y cansada en su Mondstadt, y si no mentía, era aún más agotador tener que ser un Caballero de Favonius, en cambio la condena no se comparaba. Quería autoconvencerse de que era el estrés lo que le había cobrado caro, pero ahí estaba, mal y con terribles pensamientos.
—No soy yo, algo me está consumiendo —confesó cuando su cabeza comenzó a dar vueltas una vez más, en consecuencia balbuceando cosas que no hubiese querido decir el voz alta—. Rechazo... Algo me está contaminando...