Lo que hay tras la puerta me deja fría.
Es una habitación enorme, hay dos mesas, que tienen cientos de tubos de ensayos distintos, hay microscopios por doquier, y lo que me da más miedo es que hay una enorme pizarra llena de garabatos que apenas y logro entender. Todo está hecho un completo desastre.
Es un laboratorio de investigación, muy parecido al de Lía Messino.
Mi cabeza va a mil, todos los datos se amontonan en mi cabeza y tengo que sostenerme para no caer.
No puede ser, como fui tan crédula.
Levanto la mirada, y puedo observar en una esquina una pantalla enorme, conectada a un computador. Me acerco un poco más, y me llevo la sorpresa de que esta encendido, muevo un poco el mouse, y veo como la pantalla detrás de este se ilumina, mostrando una serie de videos simultáneos, de distintas partes del búnker, que no logro reconocer. Pero no hay movimientos, el búnker parece estar vacío, lo que me inquieta mucho.
¿Dónde están las presencias de las que habló Caín?
Miro la computadora ahora, el escritorio está algo vacío solo hay un par de carpetas, ni siquiera hay contraseña que protege los archivos.
Doy clik en la primera carpeta que veo, y está me arroja un montón de archivos, que en la mayoría son videos.
Abro uno, la pantalla se pone negra, el vídeo inicia con la imagen de del laboratorio, solo que está mucho más desordenado que ahora, frente a la cámara hay una persona, tiene una bata de laboratorio, y una máscara anti-gas, que por alguna razón, tiene agujeros que imagino, son para que pueda hablar.
"Bitácora de laboratorio de la doctora Pandora. Día 8, prueba del producto #5"
—¿Producto? ¿Qué producto?—Hablo, para mí misma, No no puede ser, me niego rotundamente a creerle a mi intuición, no quiero—No, por favor no.
"Las últimas pruebas fueron poco fructíferas, pero estoy segura que dentro de poco conseguiré la combinación perfecta. Por ahora, intentaremos con este prototipo"
La mujer levantó una jeringa, está tenía un líquido rosa, tomo la cámara en su mano, y salió del laboratorio, adentrándose en una sala repleta de puertas, de la cuál escapaban toda clase de voces extrañas. Abrió una, revelando a una chica, una de las desaparecidas. Aún tenía los restos de su uniforme, tenía amordazada la boca y sus manos y pies estaban atados, la chica lloraba de manera inconsolable, no puedo expresar el terror que hubo en sus ojos cuando vió entrar a la mujer con la jeringa.
¡Carajo! Mis sospechas fueron ciertas, los desgraciados estaban usando a las chicas como conejillos de indias para probar drogas sintéticas.
Tengo que apretar mi brazo para evitarme a mi misma una rabieta, siento mucha impotencia, porque toda esta mierda estaba sucediendo en mis malditas narices.
"Sujeto de prueba #5 tiene afinidad con las matemáticas, si el producto funciona, será un gran aporte. Ahora vamos a intentarlo"
La mujer se acercó y la chica empezó a moverse como loca, tratando en vano de escapar a su triste destino, a pesar de sus esfuerzos, la enmascarada clavo la aguja en su brazo, y vacío el contenido de la jeringa casi por completo en la pobre niña.
"Veamos como reacciona el sujeto ante está combinación, cabe destacar que hemos hecho pruebas, y los sujetos están limpios de cualquier otra sustancia"
La chica empezó a temblar de repente, la mujer observó todo sin inmutarse, aún cuando la chica parecía estar a punto de desmayarse.
"Está empezando a hacer su efecto"
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CAÍN.
Paranormal~Cuando abras las puertas del infierno, nunca podrás escapar de los demonios~ Ella nunca creyó en ninguna de las historias. Siempre pensó que eran puras leyendas, pero, en el momento decisivo, cuando la fé se estaba escurriendo entre sus dedos, se a...
