Capitulo 42.

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No puedo evitar pensar en todo lo que ha pasado estos últimos días, todo el problema con Kael y su hermana, mi pasado y el hecho de que al parecer mi familia me odiaba y no lo sabía.


Dorian está tomando té frente a mí, el viaje en avión solo ha logrado que piense cada vez más en mi situación.

—Dorian ¿Por qué no me dijiste que Kael siempre estuvo detrás de mí?

Me responde sin dejar de leer su periódico.

—Kael era un pedófilo que trato de secuestrarte frente a mis ojos ¿Cómo esperabas que te dejará a merced de eso hombre siendo tan joven?

—Asi que fuiste tu el que convenció a mi padre para que no me dejara ir con él.

Dorian abre los ojos, sorprendido.

—Pense que él te lo había dicho. Vino con nosotros cuando cumpliste los 17, dijo que le parecía una edad prudente para empezar el traslado, le dijo a tu padre que él "se la quitaría de encima" y jamas volvería a saber de tí. Obviamente, no lo permití.

—¿Por qué? ¿Por qué sí permitiste que mi padre me siguiera tratando como escoria?

Dorian parece ponerse nervioso.

—Tu padre tenía un carácter difícil...

—Mi padre me odiaba ¡me intento matar! Y tú no dejaste que la única persona que podría salvarme lo hiciera y quiero saber porque.

—Era un asesino a sangre fría que era 10 años mayor que tu, Ada, por eso lo hice—Responde, su nerviosismo se ha convertido en rabia—Porque ví a tu madre sufrir en un matrimonio con una bestia y no permitiría que tú sufrieras el mismo destino.

—¿Y preferiste que viviera en una casa en la que podría morir en cualquier momento? ¿Debería darte un premio acaso?

—¡Si has sobrevivido fue gracias a mí!  ¡No fue por Kael o por Caín! ¡Sobreviviste 10 malditos años gracias a mí, porque convencí a tu padre de que tú existencia no era una simple maldición y que para algo habías nacido! ¡Te mantuve con vida todo este tiempo! ¿¡Y así es como me pagas!?


No tengo palabras, siento una enorme presión en el pecho que me dificulta respirar. Dorian también respira de forma agitada, su cabello se ha desordenado y su camisa se ha desabrochado, él me observa por un segundo y su semblante se relaja, respira hondo y se vuelve a acomodar en el asiento.

Hay silencio en la cabina por mucho tiempo. Yo no sé que pensar ni siquiera puedo dormir el resto de lo que queda de viaje. Tyron también se mantuvo en silencio.


El viaje en auto a la mansión fue igual de silencioso, Dorian y yo no volvimos a intercambiar palabra. Ni siquiera cuando llegamos a la mansión. Él se bajó y sin mediar palabra se perdió tras la puerta.

Yo camino con calma hacia la entrada,  los hombres que entran y salen se han detenido en los sitios en que estaban, mostrando respeto hacia mí. La mansión parece vacia por dentro, pero poco tiempo después aparecen Dilan y Robert, para darme la bienvenida.


—¿Cómo estuvo su viaje a Rusia, señora?—Pregunta Robert con sarcasmo, yo le pasó por un lado a ambos, no tengo ganas de discutir con nadie— Debió ser peor de lo que imagine para dejar a Ada Stallone sin ganas de hablar.

—Deja a Ada, Robert —Escucho a Tyron detrás de mí, yo los dejo atrás y me limito a subir las escaleras con rumbo a mi despacho.



Las paredes cubiertas de cuadros se me hacen conocidas. Pero ahora no se que parte de mis recuerdos es real y cuál es mentira. Hace tiempo mi psicólogo dijo que las personas que sufren traumas graves  pueden llegar a bloquear recuerdos para protegerse así mismos. Pero nunca pensé que la mente podría llegar a crear una vida falsa con tal de mantener en pie su mentira de una vida feliz.

CAÍN. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora