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Capítulo 45

Capítulo 45

JungKook fotografió más de lo que debería, pero menos de lo que le hubiera gustado. La playa estaba preciosa, sin bañistas, con los surferos disfrutando de las últimas grandes olas del día antes de que la marea cambiara.

SaeRin había estado de morros todo el rato, sin ganas de dirigirle la palabra a JungKook más de lo estrictamente necesario. Por su culpa estaba trabajando en sus días de vacaciones en lugar de estar en casa con su familia.

—¿Por qué te pones así? Has sido tú quien les ha mentido diciendo que estás aquí para trabajar —se había quejado ya JungKook, mientras hacía una nueva foto. Después de pulsar clic, miró a SaeRin—. Eso te pasa por mentir. ¿Ves como eres mentirosa compulsiva?

—¿Preferías que les hubiera dicho que eres mi novio-jefe-marido-prometido?

—¿De qué te sirve ocultar la verdad? —preguntó con honesta curiosidad. Levantó la cámara y apuntó a SaeRin. Miró por el objetivo y agregó—: Sonríe.

—Una verdad como la de mi divorcio y mi relación contigo requiere de un momento y una situación adecuada, no va de soltarlo nada más vernos. —JungKook frunció los labios cuando vio la fotografía que había hecho. SaeRin salía con el ceño fruncido, los brazos cruzados y la boca abierta por haber estado quejándose. No era material de fondo de pantalla para su ordenador, ni tampoco para una foto enmarcada en el mueble del recibidor de su casa. Intentaría otra vez—. Además...

—Sonríe —interrumpió. Esperó unos segundos para que SaeRin obedeciera, pero ella solo apretaba la mandíbula mosqueada. JungKook se rindió y suspiró otra vez—. ¿Además...?

—Además, quiero que mi padre esté presente cuando lo cuente todo.

—Tu padre es un antiguo —se le escapó a JungKook.

A SaeRin le cambió el rostro a un gesto molesto de inmediato.

—¿A qué te refieres con eso?

JungKook revisaba las fotos que había hecho mientras respondía a la pregunta.

—A que no aceptará tu divorcio, mucho menos que estés conmigo. Tu padre me odia por motivos débilmente justificados. Me la tiene jurada desde que rechacé en la boda ese brindis con él después de decirle como mil veces que era abstemio y luego está lo de que sobreexploto y... Me estoy desviando —admitió, agitando la cabeza—. Lo primero que hará será ponerse en contacto con tu ex para que tratéis de arreglar vuestras diferencias. Sobre todo cuando adora a ese dentista. Y lo sabes bien. Ahora, sonríe.

SaeRin se descruzó de brazos con cierta suspicacia, aunque no podía negar que JungKook tenía razón. Su padre quería mucho a DongWoo, era casi como su hijo. Era un chico amable, carismático y que siempre se presentaba con regalos para su esposa y para su hijo. Además era dentista con una clínica propia. Era todo un triunfador. Se habían ido incluso a pescar juntos, y cuando su padre dejaba que alguien de fuera de su tripulación se montará a bordo del Viajero del este, significaba que había pasado el control y era válido para estar en la familia.

—Si trata de ponerse en contacto con DongWoo, yo misma lo detendré.

JungKook levantó la mirada de la cámara de fotos y soltó una carcajada carente de humor. La nube de vaho salió por los orificios de su nariz y ascendió al cielo. Hacía un frío del demonio.