Dependiendo del contexto, 10 centímetros podía ser nada o podía ser todo.
Por ejemplo en el caso de un miembro masculino, podía pasar de ser un pene a dar "pena".
En esos momentos, Park JiMin sentía tanto dolor que jamás pensó en las consecuencias d...
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— ¡No! — Se negó.
— ¡Per—
— ¡Estás completamente loco! — Volvió a interrumpirle.
—Baek—
—De hecho, creo que tenemos que ir corriendo a un hospital porque ese golpe que te diste en la cabeza debe estar causándote alucinaciones. —Aseveró.
— ¡¿Qué?! —HoSeok se tocó la frente como sí con eso pudiera auto comprobar su estado. Feliz con su diagnóstico de que no se le había salido ningún tornillo, volvió a mirar hacía el mayor. — ¡Vamos! — Pidió. — ¡Ayúdame a quedarme unos días más!
— ¿Para ganar qué? — Cuestionó— Respuestas que ni tu sabes si quieres oírlas, además ni hablemos de los costos de tal operación. —Byun comenzó a dar vueltas alrededor del menor, pensando en el sinfín de trágicas consecuencias que la presencia de HoSeok traería no solo a su amigo, sino a todo el grupo. Sin contar que quedaría tachado de traidor por simplemente estar en el momento y lugar equivocado.
— ¡Sólo te pido que me des una oportunidad!
En ese preciso momento, BaekHyung no supo descifrar que tuvo más peso, sí la mirada de cachorro mojado debajo de la lluvia o la clara necesidad de respuestas que se vislumbraba en su aura.
El mayor suspiró, rezando a todos los dioses el no arrepentirse luego de lo que estaba a punto de hacer, y que por sobre todas las cosas, que JiMin le perdonara sí Troya ardía.
Porque definitivamente, algunas cabezas iban a rodar, con o sin su ayuda, pero esperaba que la suya pudiera quedarse el mayor tiempo posible sobre sus hombros.
— ¡De acuerdo! — Se resignó.
— ¡Eres el mejor, hyung! — Hobi saltó a los brazos de su nuevo amigo para estrecharlo en un cálido abrazo.
—Sólo espero que sepas lo haces, Jung. — Espetó mientras se dejaba revolver sus cabellos. — Pero tienes que saber que sí voy a meterme en esto, haremos las cosas a mi modo.
— ¿A qué te refieres?
—A que no puedes seguir viviendo como Tarzan. — La distancia del menor, le permitió cruzarse de brazos. — ¡Cristo, HoSeok! — Se quejó. — ¡¿Hace cuánto que no te bañas?!
—Ehh…— Comenzó a revivir los eventos anteriores en su mente, pensando en que realmente sus intentos por tener contacto con el agua y jabón, habían sido bastante frustrantes.
Por su parte, Baek al notar que el menor se quedaba pensando sin responder rápidamente, dio un paso hacía el costado para poder alejarse, mientras se tapaba disimuladamente la nariz.
—Me retracto de mi pregunta. — Se excusó. —Hay cosas que es mejor no saberlas. — HoSeok se encogió de hombros al escucharlo. — Te irás a quedar en mi cabaña. —Anunció. — Estoy sólo y hay espacio de sobra para los dos. — La mirada del Jung se iluminó al escuchar aquello. — El único requerimiento es que te bañes antes de entrar.— Añadió por lo bajo.
