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—Veo veo —dijo el ángel.

—¿Que ves? —Jisoo le siguió el juego algo que le hizo feliz al querubín.

—Una cosa...—comenzó a mirar por todas partes, mientras Jisoo abría la envoltura de su sandwich.

—¿Qué cosa? —hablo con la boca llena y pasaba su lengua por sus labios saboreando el alimento.

—¡Maravillosa y de color! —hizo un puchero —gris.

La morena comenzó a buscar algo, estuvo así unos minutos hasta que encontró un color.

—Color gris, mmm —musitó y Jisoo comenzó a buscar el color pero no veía nada. Así estuvo por casi cinco minutos, la mayor se reía de ella.

—Me doy por vencida —murmuro —no hay nada con ese color.

Le dio un mordisco bastante grande a su sandwich.

—Las nubes son grises —Jisoo volteó a verla con una ceja en alto —mira al cielo.

Apunto con su dedo índice y Jisoo levantó su cabeza para mirar el cielo.

—Ahhh, no me había dado cuenta —dijo y luego estornudo.

—¡Salud! —sonrió de costado y le resulto adorable aquel estornudo que fue silencioso —tienes alergia a las nubes.

Jisoo largo una carcajada.

—¿Cómo voy a tener alergia a las nubes? —negó y meneó la cabeza —eres graciosa.

—Si, eres alérgica —afirmo con firmeza. Jisoo seguía negando eso.

Abrió su botella de agua fresca y cuando iba a beber siente que alguien golpeó su espalda haciendo volcar el líquido sobre su camisa blanca.

—Aquí estás —dijo Lisa.

—¿Acaso sos idiota? —frunció el ceño y con su mano seco su boca —mojaste mí camisa.

—Se secará pronto, no te preocupes —levantó los hombros.

—¿Que quieres? —preguntó de mala gana.

—Solo vine para hablar —la miro —¿Hay algo de malo en eso?

—Esta mintiendo, no le creas —comentó la rubia y Jisoo miro atrás de Lisa y está igual miro.

—¿Qué hay? —pregunto con intriga y volvió la mirada a Jisoo.

—Nada nada —sacudio su cabeza —vi una mosca amarilla cerca,   pero no te preocupes.

La rubia giro sus ojos y largo un golpe haciendo mover el pelo de la nuca a Lisa y está se encogió del susto.

—¿Paso algo? —volvio a hablar Jisoo.

—No nada —se paso la mano en su cabeza acomodando su cabello pero por dentro estaba sintiendo miedo —¿Cómo estás?

Ella miro su sandwich y luego miro el cielo y después a Lisa e hizo una mueca.

—¡Estaba bien, pero tu llegaste! —dijo y otra vez estornudo.

—¡Salud! —hablaron a la vez Lisa y el ángel.

—¿Estás enferma? —preguntó.

—No, soy alérgica a las nubes —comentó y Lisa hizo una mueca al oír eso por primera vez —¿Qué?

—¿Alergia a las nubes? —quedó pensativa —jamás había oído eso. ¿Dónde sacas tantas cosas así?

Preguntó con gracia y Jisoo levantó sus hombros.

Enamorándome de un ángel llamado Cúpido [Chaesoo] FinalizadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora