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—Ni lo sentí cuando se fue —dijo Jungkook.

—Se fue de cola caliente —supuso Hoseok—, ese chamaco, había dicho que nos íbamos a poner a vender en el tianguis. Lo tendré que castigar un mes.

—Ni modo, ahora te llevas al Jungcrack —dijo el Yoongi y Jungkook lo miró molesto, pero no tuvo otra opción que subir las cosas al carro.

Taehyung se despertó estirando todo su cuerpo. Jimin seguía acostado a su lado sin quitarle la mirada de encima, había despertado hace 10 minutos, 10 minutos que utilizó mirando a su novio.

—Buenos días mi Sol —le dijo. Taehyung sonrió y besó su nariz.

—Menosh níash.

Jimin rio suave y se abrazó a su novio.

—Oye bebé. Mi mamá dijo que podíamos ser novios.

Taehyung miró con sorpresa al rubio.

—¿Y qué más dijo mi suegrita?

—Qué podías venir cuando quieras para presentarte como mi novio.

Sintió mucha emoción que hasta las tripas le rugieron. Fue ahí cuando se dio cuenta que no había comido en todo el día anterior.

—¿Y crees que pueda desayunar contigo?

—Sí, bebé.

[...]

Un desayuno muy incómodo, desde que Jimin y Taehyung bajaron a desayunar, su mamá no hizo preguntas al principio y su papá sentía que en cualquier momento se le iba a reventar la vena de la frente.

—¿Viniste temprano? —preguntó la mamá.

—Nombre, ando aquí desde la nochecita, vine a ver a Jimin porque estaba triste.

Jimin le sonrió comiendo sus huevos estrellados y Taehyung le lanzó un beso.

—¿Por qué no avisaste? —preguntó su papá.

—Llegó muy tarde —explicó Jimin—, ahorita iremos al sobreruedas, Tae me llevará a buscar las mejores ofertas en las pacas.

—¿Se irán en uber? —preguntó su mamá.

—Traje mi bici, nos iremos en ella hasta allá

Después de desayunar se fueron al tianguis en el que su hermano estaba vendiendo para pasar a saludar y de paso dejar estacionada la bicicleta, pero en vez de eso se ganó un jalón de orejas por haberse ido sin permiso.

—¡Es que ustedes no entienden!

—¡Eres un menso! ¿Cómo se te ocurre irte en la noche? ¡Te pudo pasar algo!

—Pero estoy bien —dijo Taehyung y abrazó a Jimin del hombro— y los papás de Jimin aceptaron mi matrimonio con él —Jimin estaba apenado por causar molestias con su familia.

—Un mes castigado.

—Ya te dije que no me vas a castigar.

—¿Entonces cómo se supone que vas a entender?

—Oigan —Jungkook se acercó a sus hermanos—, con tantos gritos andan espantando a los clientes.

Hoseok suspiró y calmó su semblante.

—Toma —le devolvió su celular—, pero quiero que te cuides, no andes haciendo desmadre solo, para eso te tienes que llevar a tu hermano.

—Simón.

LMB [VMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora