LMB [VMin]

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¿Cómo cinco meses pudieron pasar tan rápido? Pareciera que fuera ayer cuando Taehyung soñaba en las noches con sujetar la mano de Jimin y decirle que era el más guapo de todo el universo y del mundo mundial.

Taehyung tenía listo su regalo, estuvo toda la noche preparándolo. Además de que también ya se acercaba el cumpleaños de su Chinchulín y debía prepararle algo más especial o algo más significativo, sabía que si le compraba algo caro Jimin lo iba a rechazar por lo que debía prepararle algo.

—Ya wey deja de dar vueltas y ya vete por tu vato —dijo Hoseok.

—Jimin me invitó a su casa porque dijo que mi regalo está en su casa —dijo Taehyung algo nervioso.

—¿Van a coger? —preguntó Yoongi asomándose por la entrada de su cuarto.

—No creo —dijo Taehyung—. Seguro me hizo un pastel —Taehyung levantó un pastelito rojo en forma de corazón que tenía escrito "J y T 4eber"—. Ojalá y no porque nos vamos a empachar con tanto pastel.

—Ya vete antes de que sea tarde.

Taehyung asintió y tomó sus cosas. Se llevó el carro del Chun Kun y fue por Jimin a su escuela.

—Felices cinco meses —dijo sonriente mientras manejaba—. Hola mi príncipe, debí decírtelo hace rato por mensaje, pero quise decirlo en persona. ¡Felices cinco meses!

Le gustó cómo sonaba, así que estaba listo.

Vio a Jimin salir, estaba listo para hacer un escándalo con el claxon pero había alguien con Jimin y le dio un abrazo.

Taehyung se sorprendió de que esa persona fuera Máximo. Se bajó del carro dispuesto a pedir una explicación.

Al bajar se quedó en la puerta pensando y sintió miedo, otra vez, ese tonto miedo que sentía al principio cuando se sentía insuficiente.

Jimin... SU Jimin no lo cambiaría, a menos que su padre lo haya convencido porque al parecer sólo fue a hacer el ridículo en el restaurante.

Volvió a subir al auto y se tapó el rostro recargando su frente en el volante.

—¿Pedimos un Uber? —pudo escuchar la voz de Máximo.

—No, Taehyung me dijo que pasaría por mí —¿Taehyung? ¿No mi "amorcito"? Taehyung estaba siendo atacado por esas emociones que detestaba. Estaba teniendo celos.

Y fue ahí cuando decidió tocar el claxon. Jimin lo miró y corrió hasta el carro sin despedirse de Máximo.

—Bebé, hola —Jimin le dio un beso en la mejilla—. ¿Y esta caja?

Taehyung no se atrevía a mirarlo, sentía que si lo hacía iba a encontrar algo como una mancha de labial, pero... ¡Máximo no usa labial!

Bien, lo miró y se dio cuenta que estaba a pocos centímetros de su cara.

—Felices cinco meses —lo besó, Taehyung suspiró y le devolvió el beso en una pelea de lenguas. Jimin amaba esos besos cuando Taehyung quería el control.

Jimin no le mentiría, no lo engañaría qué tontería se había creado en la cabeza. Su Jimin no era así, su Jimin lo amaba.

—Te amo —dijo Taehyung y sostuvo su rostro con ambas manos, Jimin sonrió acunando su rostro—, te preparé un regalito.

Jimin abrió sus ojos, adoraba los regalos de Taehyung.

Le entregó un rollo de hojas. Jimin lo miró con curiosidad y cuando lo abrió un poco pudo leer.

"x donde deveria de enpesar??
T amo + q a los mismisimos tamales de puerko en salsa berde..."

Jimin sonrió, lo iba a leer después en su cuarto, estaba seguro que después de leerlo lo iba a amar más de lo que ya hacía. Si es que eso era posible.