Flores de cristal

Capítulo 6

Llegamos a la cabaña, y nada más entrar noté como Víctor miraba a Helena sin respeto alguno, iba a ser una noche complicada.
Helena se aferró a mi y tal como hablamos no levantaba la mirada, salvo cuando Dobre se acercó a ella...

Dobre- Helena es un honor tenerte aquí compartiendo con nosotros esta cena.

Él extendió su mano cortés y educada mente

Helena me miró antes de aceptar su mano, como haría una buena sumisa, yo acepté con un leve gesto de mi cabeza y ella tomó la mano de Dobre, él me miró, sonrió de lado y diciendo "Buen trabajo con ella Pine , buen trabajo" besó su mano con ternura.

Dobre- Eres exquisita Helena, me gustaría que me eligieses si algún día Pine decide ofrecerte.

Ella volvió a mirarme... yo vovi a asentir con la cabeza, ella le miró y sonrió dulcemente

Helena - Gracias Señor, así será, si mi amo decide ofrecerme, aceptaré amablemente.

Comenzamos a cenar y Víctor no paraba de beber y consumir coca , estaba bastante colocado, mandó a llamar a cuatro prostitutas, todos empezaron a drogarse, sus dos sumisos, las chicas y él.

Víctor– Las personas que no se drogan no son de fiar, cuando todos nos estamos  drogando.

Dijo depositando una raya de tusi delante de Helena, al ver esto, elevé el tono de mi voz y dije:

Pine– Helena no se va a drogar hoy.

Creo que era lo que Víctor estaba esperando, para pelearse conmigo, de repente cogió la cabeza de Helena y la empurró encima de la raya, de una patada tiré mi silla hacia atrás y agarré del cuello de la chaqueta a Víctor, pero antes de que me diese cuenta Dobre le asestó un puñetazo en la cara derribándolo al suelo , mientras Víctor reaccionaba y asimilaba lo que acababa de pasar, Dobre habló:

Dobre– Ahora mismo, Helena no solo es inaccesible para ti porque pertenece a Pine , si no que yo la he solicitado, no la volverás a tocar Víctor, no se te olvide, Helena esta bajo mi protección directa ahora, la fiesta ha terminado aquí para ti, te agradezco que te vayas.
Víctor – ¿Estas hablando en serio?
Dobre – Totalmente Víctor, largate de mi casa de una puta vez.
Víctor– Te vas a arrepentir Pine y tu pedazo de zorra que vas de mosquita muerta, te estaré vigilando de cerca , no te creas que estarás acompañada en todo momento.
Pine– ¿Estas amenazando a Helena maldito bastardo?

Y diciendo esto le cogi de las solapas con fuerza y le empotré contra  la pared separandolo de Helena, no soportaba que estuviese cerca de ella, no la volvería a tocar en mi presencia.

Dobre– Jonathan , Víctor ya se va...
VICTOR ESTAS COLOCADO LARGATE!!

Al fin , Víctor salió de la cabaña con sus sumisos y maldiciendo, Dobre llamó a sus cuatro acompañantes de siempre.

*************

Estaba aterrorizada, temía a Víctor y a la vez me daban ganas de matarle, me sentía realmente aliviada de que se hubiese ido de una puta vez , no podía dejar de pensar en todo lo que había pasado esa noche, la extraña propuesta de Dobre , no sabia muy bien como tomármelo, pero desde luego no me sentía protegida por él, por más que él dijese que estaba bajo su protección, note la mano de Jonathan en mi espalda, respiré aliviada, ¿como conseguía ese hombre calmarme solo con su tacto?,  me giré y le sonreí, me encontré en su mirada azul y en su sonrisa, tenía un pequeño corte en la mejilla,  seguro ocasionado por todo el incidente, metí un hielo en la servilleta y me levanté para ponérselo en la mejilla, con su mano cubrió la mía, mientras decía "mi dulce Helena no dejaré que te hagan daño" .
Dobre salió de la otra estancia, esa cabaña por dentro era mucho más grande de lo que parecía por fuera.
Sonriente Dobre se dirigió a nosotros, sigamos con esta estupenda noche, mis chicas van a venir... cuando ellas llegaron comprobé que eran las cuatro preciosas chicas que salieron de la limusina, ahí comprendí que todas ellas pertenecían a Dobre, que eran poderosas porque, ellas si disponían de su verdadera protección, es probable que hasta estuviesen al tanto y formasen parte de algunos de sus asuntos o de muchos, al entrar en la sala, dos de ellas me sonrieron al llegar Nia y Alisa  , las otras dos me ignoraron por completo, sus nombres eran Sayuri y Gabriela.
Nada más llegar las chicas se acomodaron alrededor de Dobre, hablaban de Víctor y lo mucho que últimamente se desfasaba y llamaba la atención , al parecer Dobre no estaba contento con él, vi claramente que las intenciones de Pine eran ganarse la confianza de Dobre, para así , poder descubrir sus negocios de mierda y al fin poder pasar la información al gobierno británico,  pensé que quizá mientras Pine se ganaba la confianza de Dobre yo podría ganarme la confianza de alguna de las chicas y sacar algo de información por mi cuenta.

Helena – Me gustaría ir al baño
Dobre – Grabriela, puedes acompañar a Helena por favor, no queremos que entre en alguna habitación por error.
Grabriela – Claro! Helena amore, ven conmigo

Noté por su acento que quizá podría ser italiana o tener raíces italianas, creo que por ahí podría acercarme a ella con una conversación sencilla.

Helena– Grazie , ¿Eres italiana?
Grabriela– Mi madre lo era, mi padre es americano nos fuimos a EE.UU cuando yo era niña , mi madre nunca dejó de hablarme en italiano.
Helena – Es un idioma precioso,  yo soy italiana,  de un pueblecito de la Toscana 
Gabriela– El servicio es aquí, pasaré contigo, te espero aquí al salir, volveremos juntas.

Estaba claro que era difícil quedarse a solas en esa cabaña, algo ocultaban sin duda .
Mientras hacíamos nuestras necesidades y nos refrescábamos Grabriela se puso una raya y me dijo si quería, yo negué con la cabeza...

Gabriela – Oh vamos! No será por Pine, no engañais a nadie, no eres su sumisa, él no tiene carácter de dominante , es demasiado estirado y caballero británico, parece que tiene un palo metido por el culo todo el día ¡por dios!, es más, una italiana como tú, lo más probable, es que sea la dominante de la pareja, habréis engañado a Dobre pero no a Víctor.

Mierda, estaba claro que ella estaba ahí metida para informar a Víctor de todo y probablemente Dobre la había mandado a acompañarme porque lo sabia y quería averiguar más cosas no sólo de mi si no de la relación que había entre Jonathan y yo ...

Helena – Gabriela, Jonathan y yo tenemos una conexión difícil de explicar y más difícil aún si cabe de entender, la lealtad es nuenstro pilar madre, el y yo somos uno.
Las prácticas que realizamos en nuestro dormitorio, si bien no son de tu incumbencia, te las voy a aclarar , Jonathan es más dominante de lo que crees y a mi me gusta que así sea, es capaz de mojar mis bragas  solo con su mirada acusadora cuando me ve comiendo algo sin su permiso, o simplemente cuando quiere llevarme al potro a darme unos buenos azotes, si, tiene  un maldito refinado culo británico, pero es también un puto vicioso al que le gusta tirar del pelo mientras se la estas chupando totalmete inmovilizada y  con cara de súplica.