—¡Llegamos!
Jungkook le anunció en voz alta a su novio, después de estacionarse en la calle frente al hogar de su querido primo, su pareja y su hijo. Ayudó a Taehyung a salir de su Mercedes, tomándolo de la mano, y llevándole hasta la puerta de la moderna casa. El castaño felizmente se dejó hacer, y con solo una mirada de Jeon, supo lo que este quería que haga.
Dándole el gusto, tocó el timbre que avisaría su llegada a la familia Kim.
Los segundos pasaron, y no había respuesta, lo que extrañó en demasía al azabache.
¿Acaso no estaban en casa?
Eso sería muy raro considerando la forma en la que su primo se comportaba cuando su marido estaba libre del trabajo.
Bajo la mirada intrigada del doncel, el joven de piel nívea esta vez fue quien presionó el botón que creo un característico sonido en el interior de la vivienda.
Pero el resultado fue el mismo, nada de nada.
—Jungkookie, tal vez no están aquí—el mayor evidenció, con una pequeña mueca. Le ilusionaba ver a la pareja y a su lindo hijo, pero si no se encontraban presentes de nada servía—. Quizá tuvieron algo de improviso, creo que hubiera sido mejor si antes les llamabas para asegurarte de que podían recibirnos.
—Tienes razón, Tae. Tal parece que me precipité demasiado.
—Es una lástima que se dañara la sorpresa, pero lo mejor será que nos vayamos, les llamamos y ahí confirmamos si este fin de semana estarán libres, considerando que debes volver al trabajo.
—Me parece una buena idea...
Sin embargo, antes de que el doncel pudiera acabar la oración, un chillido de emoción llamó la atención del par de enamorados. Apenas dándole tiempo al menor a agacharse, y tomar en brazos al pequeño niño que venía corriendo hacia él, completamente entusiasmado cómo para darle un abrazo muy efusivo.
—¡Tío Kookie, volviste!
—Hola Binnie—Jungkook saludó, plantando un beso en la frente del menor que rio lleno de emoción al ver a una de sus personas favoritas en el mundo, después de sus queridos padres, obvio—. Volví, como te lo prometí.
—Sí, lo hiciste—confirmó, y acto seguido el menor por fin fue consciente de que su tío iba acompañado de alguien más.
De primer momento no le había dado importancia, pero cuando sus grandes ojos se cruzaron con los más claros, pudo sentirse en total confianza de pedir ser recibido en brazos por el joven que le dedicaba una mirada llena de cariño y fascinación. Aunque cierto detalle era diferente a como lo recordaba, poco le importó al dejarse llevar por el ansiado encuentro.
—¡Y también trajiste al tío TaeTae!
—Así es, pequeño. Yo también tenía que cumplir mi promesa contigo. Nos divertiremos mucho.
El doncel encantado tomó al infante entre sus brazos, dándole un cálido abrazo que fue correspondido a la misma intensidad. A la par que dos siluetas se iban acercando a paso lento. Jungkook había estado con los orbes perdidos en la bonita escena de su doncel y su sobrino, que al sentir que estaba siendo observado, levantó su rostro encontrándose con Seokjin y Namjoon.
—Jin, Namjoon hyung—con alegría les dio la bienvenida, siendo correspondido con un fuerte abrazo por parte de los mayores—. ¿Dónde estaban? Un minuto más y ya no nos encontraban.
—Es una larga, pero feliz historia—contó Seokjin con ojos brillantes por las lágrimas que derramó con anterioridad, recibiendo un beso en la mejilla por parte de su marido, quien luego de envolver a Jungkook con sus brazos, se adueñó de la cintura del mayor, abrazándolo con fuerza—. Pero ya habrá tiempo para eso. Estoy feliz de verlos.

ESTÁS LEYENDO
Lullaby in the lake; JJK & KTH
Diversos*ૢ. Su corazón estaba decidido a no volver a enamorarse, pero el destino tenía otros planes.*ૢ La noche había caído cuando Jungkook escuchó un precioso canto proveniente de un lago en medio de la espesura del bosque... Este era tan fascinante que fu...