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Después de unas cuantas horas , el oso polar llegó al estacionamiento de la oficina y detuvo la camioneta.

Chip, se levantó en cuanto llegaron y tomó a su madre en brazos, podía escuchar fácilmente como pedía auxilio y pataleaba, soltando una leve risa.

–Oye Jimmy, ¿puedes hacerme el favor de llevarla al estudio?– preguntó mientras saltaba a los asientos y al llegar cerca del asiento piloto acercó a la ardilla a la pata de su compañero.

–ummm, claro, pero...que hará usted jefe...–dijo mientras tomaba a la ardilla y abre la puerta del asiento para poder salir de la camioneta.

–Bueno, tengo que hacer otra cosa...– dijo algo serio mientras salía al momento de que el oso abría la puerta y comenzó a correr hacia su oficina.

–Ehhh...está bien– se encogió de hombros lentamente y vió como sus compañeros salían también de la camioneta y comenzó a caminar hacia el estudio de piratería.

Chip, siguió corriendo hasta llegar al edificio donde estaba su oficina y comenzó a escalar las paredes rápidamente y vió de reojo como el oso polar y los demás iban al estudio, sonriendo de lado.

–Genial, ahora solo tengo que traer a ese idiota...– dijo algo bajo y siguió escalando la pared hasta llegar a la ventana donde estaba su habitación, abriéndola lentamente.

Dale, se encontraba acostado y amarrado en la cama mientras tarareaba un poco la canción de los rescatadores y movía sus pies lentamente.

–chip chip chip y dale, rescatadores, chip chip chip y dale....– cantó en voz baja soltando un leve suspiro y comenzó a cerrar sus ojos lentamente pero al escuchar como alguien abría la puerta abrió sus ojos de golpe algo asustado y mira a su alrededor. –¿¡Q-Quién anda ahí?!

Chip, escuchó la pregunta del nariz roja y levantó una ceja algo serio y rodó sus ojos con algo de desagrado. saltando dentro de la habitación, acercándose a la cama donde se encontraba amarrado.

–Es solo el de las pizzas Dale...– dijo algo serio mientras acomodaba su traje y lo sacudía, quitando todo le polvo que había en la tela.

–¿Eh? ¿El de las pizzas? p-pero ni siquiera he ordenado nada. ¿¡Y como sabes mi nombre?!– dijo algo asustado mientras tiembla pero pensó durante unos segundos hasta que reaccionó un poco –Un momento...Tienes la voz de Chip...–

–Ajá, ¿Y?– preguntó el nariz negra estando en el suelo mientras se cruzaba de brazos, esperando a que el nariz roja dijera cualquier respuesta, incluso una respuesta estúpida.

–Ehhh, entonces...Eres ¿Eres un hermano perdido de chip que se dedica a ser repartidor de pizzas?– dijo confundido mientras levantaba una ceja y movió su cola lentamente.– ¿Acaso chip te mandó para que me trajeras pizza?

Chip golpeó su frente con algo de fuerza molesto y bufó con fuerza, saltando hacia la cama para ponerse frente a él totalmente serio.

–Eres un jodido idiota, en serio me sorprende tu nivel de estupidez....– dijo en un tono molesto mientras sacaba la navaja del traje y comenzó a cortar el lazo con el que amarró al nariz roja.

Dale se sorprendió al escuchar el comentario de su amigo y bajó lentamente las orejas pero al sentir como el lazo era cortado rápidamente intentó levantarse pero su cuello fue apretado con la correa que había olvidado que tenía puesta, comenzando a toser y perder aire.

–Awww, miren nada más, ¿Estabas intentando escapar? ¿o acaso tratabas de golpearme como en la noche?– comentó algo sarcástico con una sonrisa en su rostro pero volvió a tener su expresión seria y golpeó con fuerza el rostro del contrario para después tomarlo de la camisa y acercarlo a su rostro, depositando le un pequeño beso en su hocico. –Como si fuera a dejarte golpearme de nuevo~ ahora será mejor que te levantes. Tenemos una visita~ –soltó una leve risa mientras quitaba la cadena de la correa de la base de la cama y la mantenía en su mano.

–¿U-Una visita? ¿De quien?–preguntó mirando abajo soltando leves quejidos por aquel golpe, intentando sobarse pero las esposas en sus manos se lo impedía.

–Será una sorpresa querido~ ahora camina!– ordenó mientras jalaba la correa con fuerza y vió como el nariz roja se caía de la cama y trataba de levantarse. –He dicho...¡Camina!– gritó con fuerza frunciendo el ceño mientras volvía a jalar la correa y vio como el nariz roja se levantaba débilmente y comenzaba a caminar hacia el nariz negra, obedeciendo su orden. –Que buen chico~ ahora..te voy a vendar los ojos, pues no creo que se estropee la sorpresa.~

–¿E-Eh? ¿Me vas a tapar los ojos?– preguntó algo asustado y tragó saliva temblando, pues estaba pensando en que podría ser aquella sorpresa. En parte sabía que no podía ser buena.

–Si, lo que oíste, idiota...–respondió en un tono algo molesto y sacó de su cajón una bufanda color negra y sonríe de lado, acercándose al nariz roja para vendarle los ojos con dicha prenda. –Listo~ ahora vamos– ordenó mientras caminaba hacia la salida del cuarto y jaló la correa con algo de fuerza.

Dale sintió como la correa era jalada y comenzó a caminar detrás del nariz negra, como si fuese un perrito siendo sacado a pasear.

–Vaya, aprendes rápido~– soltó una leve risa mientras seguía caminando y jalando la correa con más fuerza, dirigiéndose a la salida de la oficina pero se sorprendió al sentir como se detenía de golpe. –¡Ahg! ¡Ahora que! –gritó con algo de fuerza y volteó a ver cómo el nariz roja estaba en el suelo sorprendiendose. –¿Dale?

–S-Solo...déjame aquí...No escaparé pero...quiero estar solo...–comentó algo triste mientras bajaba sus orejas y comenzaba a llorar en silencio.

–¿Solo? Pero que hay de la sorpre– fue interrumpido al escuchar los sollozos del contrario, tragando saliva.

–¡Y-Ya no importa! ¡Solo déjame aquí!–gritó entre llantos mientras se sentaba lentamente en el suelo y mordió su hocico con algo de fuerza.

Chip se sorprendió al escuchar al contrario romper en llanto y bajó lentamente sus orejas, acercándose a él con lentitud.

–Dale...– dijo en un tono suave y comenzó a acariciar la mejilla del contrario con lentitud pero se sorprendió al ver cómo este retrocedía de las caricias.

–¿Q-Que?– preguntó algo triste aún con las orejas abajo pero sintió como el contrario le quitó la bufanda de sus ojos y volteó a verlo de reojo, notando cómo retrocedía y estiraba sus brazos.

–Ven acá Dale, deja de llorar ¿quieres?– dijo con una sonrisa en su rostro mientras estiraba sus brazos hacia el nariz roja.

Dale se levantó lentamente del suelo con algo de dificultad y una sonrisa algo amplia apareció en su rostro lleno de lágrimas en sus ojos.

–¡Chippy!~ –gritó con algo de fuerza llorando y corrió hacia él para intentar abrazarlo, ocultando su rostro en el pecho de este.

–Ya, ya, ¿Ya pasó si?– dijo en un tono algo suave mientras correspondía el abrazo con algo de fuerza y dió leves palmadas en su espalda.

–C-Chippy....–susurró de nuevo bajando sus orejas y se acorrucó en el pecho del mencionado.

Chip, al verlo de esa manera sonrió con malicia y siguió con aquellas palmadas, subiendo su mano lentamente hasta llegar a su hombro y apretarlo con algo de fuerza.

–¿Sabes algo Dale?– dijo en un tono algo calmado mientras lo tomaba su otro hombro y lo mueve un poco para que el contrario lo viera a los ojos.

–¿Ummm? ¿Q-Que pasa Chippy?– preguntó algo confundido mientras ladeaba la cabeza y movió su colita con algo de lentitud.

Chip, se acercó lentamente al nariz roja y puso su rostro a uno de los oídos de este, riendo algo fuerte y apretó con más fuerza los hombros del contrario.

–Eres un ingenuo~– susurró algo bajo con una sonrisa en su rostro y al notar como este temblaba soltó una risa algo fuerte y malévola, empujándolo con fuerza. –¡Eres un tonto! ¿¡Creíste que había vuelto el chip de antes, verdad?! ¡Pues no!

El nariz roja cayó al suelo al ser empujado y bajó la mirada algo triste y decepcionado, mordiendo su hocico con algo de fuerza.

–¡Debiste haber visto tu cara! Era tan patética...– dijo entre risas mientras tomaba la correa y volvió a jalarlo con fuerza para levantarlo y se acercó para ponerle la bufanda en sus ojos nuevamente.– Ahora vámonos, que la sorpresa nos está esperando...– dijo calmandose un poco y tomó una actitud seria, comenzando a caminar con el contrario, guiándolo hacia el estudio de piratería.

DarksideDonde viven las historias. Descúbrelo ahora