Darkside

#16

-C-chipper...¿Que está pasando aquí? Acaso...¿vinieron tu y dale a rescatarme?- dijo Monty con una sonrisa en su rostro pero al notar a sweet Pete y sus trabajadores se sorprendió y tragó saliva asustado.

-¿Rescatarte? Pffff! -aguantó la risa al oírlo y sacudió su traje lentamente para después chasquear y estirar su mano.

Bob, sabía lo que significaba aquel chasquido por lo que caminó a una caja fuerte y comenzó a abrirlo lentamente, sacando de ahí una rebanada de queso oloroso.

Monty vió aquel pedazo de queso y lo olfateo sonriendo ampliamente.

-¡Queso!~- dijo mientras sus ojos comenzaban a formarse espirales y sus bigotes eran jalados por el aroma, comenzando a flotar.

La madre del nariz negra se sorprendió al ver el pedazo de queso y después ver al ratón y levantó una ceja confundida, volteando a ver nuevamente a su hijo.

–Básicamente me dedico a esto madre...desde el queso oloroso hasta la piratería de películas– soltó una leve risa mientras daba la orden al oso polar para que abriera la jaula y al ver cómo este obedecía la orden fue hacia la máquina, para dejar el queso dentro. Viendo como el ratón comenzaba a flotar hacia la máquina.

–¿Q-Queso oloroso? ¿P-pirateria?– dijo la ardilla mayor algo confundida y ladeó un poco la cabeza.

–S-Se refiere...a que el está metido en lo ilegal, desde el Q-Queso oloroso h-hasta la piratería...S-señora– dijo el nariz roja algo leve mientras seguía en el suelo, recargando su cabeza contra este lentamente.

–¿E-Eh? ¿Ilegal? ¿E-es enserio?– dijo la mayor con lágrimas en sus ojos y volteó a ver a al nariz negra decepcionada, bajando la mirada y a la vez sus orejas al suelo.

Chip notó la expresión de su madre y frunció el ceño molesto y al ver que el ratón ya estaba dentro de la máquina pulsó un botón, el cual cerraba las puertas del gran aparato y volteó a ver al peli naranja.

–Pete, ¿puedes hacerme el favor?– preguntó con una pequeña sonrisa en su rostro y vio como el mencionado iba a la computadora a cambiar el diseño de Monty, poniéndole un cuerpo y orejas de dumbo y retirando su bigote.

Dale también pudo notar la expresión de la madre del nariz negra y lentamente bajó su mirada algo triste.

–L-Lo lamento señora...E-Es mi culpa que...C-Chip haya empezado a hacer todas estas cosas..– dijo en un tono algo desanimado mientras miraba de reojo al nariz negra con el peli naranja y soltó un pequeño suspiro. –Creo q-que también merezco su odio....

–No...Dale...No te culpes, n-nada de e-esto lo es..– contestó mientras negaba con su cabeza y volteó a ver a su hijo a punto de llorar y bajó su mirada lentamente– Sé que mi pequeño Chip aún está dentro de ese...Monstruo.

Chip logró escuchar toda la conversación de ambas ardillas y al oír las palabras de su madre se sorprendió de golpe y pequeñas lágrimas salieron de sus ojos, apretando su mano con fuerza hasta formar un puño pero rápidamente limpió aquellas lagrimas y volteó a verlos a ambos con una sonrisa en su rostro.

–Pero que...Conmovedora plática están teniendo los dos~– comentó entre dientes manteniendo aquella sonrisa en su rostro pero con una expresión totalmente molesta, caminando hacia el botón que haría activar la máquina y soltó una pequeña risa. –hablando mierdas de mí ¡a mis propias espaldas!– gritó con algo de fuerza y comenzó a acercar su mano a aquel botón para activar aquella máquina pero se detuvo al oír gritar al nariz roja y volteó a verlo lentamente.

–¡No! ¡Espera! ¡No le hagas nada a Monty! N-Ni siquiera estabamos hablando mal de ti...– dijo el nariz roja con algo de tristeza y comenzó a temblar asustado, tragando saliva lentamente.

–¿oh, enserio? ¿No estaban hablando mal de mi? ¡¿Acaso me quieres ver la cara de imbécil, Dale?! ¡Si yo mismo estoy escuchando todo lo que me están diciendo! Sobre ser un monstruo...–respondió con molestia mientras volvía a levantar su pie para apretar el botón.

–¡E-Espera cariño!– gritó algo fuerte la mayor y bajó sus orejas mirando a su hijo con lágrimas en sus ojos.– E-escucha... h-haré lo que tú me pidas, s-solo deja todo esto de las cosas ilegales, este no eres tú mi niño...y-yo lo sé, sé que en el fondo aún está mi pequeño que quería ser actor...–dijo entre lágrimas mientras cerraba sus ojos para evitar ser vista llorar.

Ambas ardillas se sorprendieron al escuchar las palabras de la mayor, el nariz roja negó rápidamente y trató de levantarse y quitar las cuerdas en sus manos.

–¡N-No diga eso señora! Él va a aceptar su trato de que no le hará nada pero si hace lo que él pide no va a cumplir su parte del trato..Y-Yo lo sé...–

–¡Tú cállate Idiota!– gritó molesto viendo al nariz roja y después volteó a ver a su madre lentamente, levantando una ceja.– entonces...dices que harás lo que ¡Sea! con tal de salvarlo a él, y posiblemente...a él? –dijo señalando con una de sus manos a Monty y con la otra señaló a dale con una mueca de asco.

–S-Si.... L-Lo que sea...–

–Ummm....– se quedó pensando unos segundos pero se le ocurrió algo y una sonrisa maliciosa apareció en su rostro, bajando lentamente de la máquina para acercarse a dale lentamente. –¿Sabes algo madre?...

–(mierda...esto no va a terminar nada bien...)– pensó el nariz roja viendo como el contrario se acercaba y como su madre solo ladeaba la cabeza confundida, posiblemente para esperar la respuesta de su hijo.

– Yo siempre... ¡Siempre!, Me he esforzado por esto– dijo el nariz negra tomando al nariz roja de la camisa y lo levantó del suelo con toda y silla para volver a sentarlo, soltando una risa algo fuerte. – ¡Y mira hasta donde estoy ahora!, –gritó con una sonrisa amplia en su rostro mientras que empezaba a señalar todo el estudio y a sus ayudantes.– ¡he logrado destacar y llegar hasta la cima de esto! – caminó alrededor de la silla donde estaba amarrada su madre pero se detuvo detrás de la silla y tomó el respaldo de este lentamente.

–¿Y A-A que quieres llegar c-con todo esto que me estás diciendo?...– preguntó la mayor confundida pero en un tono triste pero se sorprendió al sentir como la silla era girada y al ver a su hijo de cerca su sorpresa se volvió más grande, al punto de asustarse y temblar un poco.

–Es muy fácil madre~– dijo con una leve sonrisa mientras miraba la expresión asustada de su madre, haciendo que aquella sonrisa se volviera más amplia y maliciosa, poniendo de nuevo sus manos en cada lado del respaldo de la silla y se acercó al rostro de la mayor lentamente hasta estar lo suficientemente cerca, frunciendo el ceño cambiando su actitud a una seria. –Quiero que me digas que estás orgulloso de mi, madre~– dijo en voz baja sin expresión alguna en su rostro mientras juntaba su frente con la de su madre.

–¿Q-Que? ¿Orgullosa?– preguntó la mayor tragando saliva asustada y bajó sus orejas al verlo juntar su frente con la de ella y comenzó a temblar más.