Cicatrices.

XIX

Itachi se removió ansioso a mitad de la noche. La fecha estaba cada vez más cerca y él aun se sentía indeciso y mortificado. Cernió sus brazos con lentitud sobre el cuerpo a su costado. Tenía que ser optimista por una vez en su vida, debía creer que todo saldría bien y que muy pronto dejaría de preocuparse por nimiedades para asumir un rol que exigía nuevas responsabilidades.

-Itachi ¿Estás despierto?

Le desconcertó saber que Naruto se encontraba en iguales condiciones. Pero no lo demostró, porque no quería transmitirle sus dudas y temores vagos. Asi que en cambio, Itachi procedió a besar con parsimonia el costado del suave cuello trigueño.

-Itachi...- asediado por las multiples sensaciones que los labios del moreno le provocaban, Naruto cerró los ojos, pensando en las inseguridades que había experimentado hasta ese momento.

No sabía si la situación saldría bien, asi como tampoco tenía la certeza de que el plan de Pain sería infalible, quiza no lo lograrían y entonces, no tendría más remedio que ceder ante el fatídico destino que había sido dispuesto para él...para ellos.

-Quiero hacerlo- afirmó, dandose vuelta para quedar frente al Uchiha, el cual le dirigía una mirada entre angustiosa y comprensiva, como si supiera de antemano lo que había estado pensando.

-No quiero que te sientas obligado a ello- Itachi suspiró para calmar las renovadas ansias internas. Si estaba excitado, y si quería hacerlo. Pero no si Naruto lo hacía por mera condescendencia, obligación o lástima. Porque a diferencia de el rubio, él si lo amaba. Desde el primer momento que lo vio cruzar el jardín del complejo, eternamente sonriente y acompañado de Sasuke, una chispa se encendió dentro de él.

Contrariado y viendo el sutil resplandor proveniente de la ventana, Naruto emitió un respingo.

-Si me sintiera obligado, no te lo estaría pidiendo.

-¿Seguro?- volvió a dudar Itachi, entrelazando con firmeza sus dedos con los de Naruto.

-Si- Naruto pestañeó incrédulo por lo que oía. A pesar de todo el daño que Itachi le había hecho en el pasado por no haber intercedido en su ayuda, el ultimo mes había estado muy al pendiente de su bienestar y el de Menma.

Incluso Menma demostraba más efusividad cuando Itachi estaba presente. Lo quería. Y por eso Naruto le estaba agradecido.

Ultimamente se había puesto a pensar en qué habría sucedido si se hubiera enamorado primeramente de Itachi. Si lo hubiera conocido a él en vez de a Sasuke. Quizá las cosas serían mejores, o quizá ya no viviría para contarlo. Era dificil dicernir en ello. Sin embargo, de algo Naruto estaba convencido, Itachi Uchiha le quería. Y el se estaba dando una oportunidad para volver a creer en el amor.

-Quiero hacerlo, Itachi. Quiero amarte porque no se si...- pero sus ruegos se vieron interrumpidos por los desesperados labios de Itachi. No quería que lo mencionara siquiera, necesitaba seguir pensando en aquella utopía de que todo saldría bien. Y en el peor de los casos, sería él quien moriría.

Lentamente Naruto correspondió el demandante beso, asiendose al cuello de Itachi y pensando en todo lo que había pasado para protegerlo. En lo mucho que Itachi se arriesgó para ponerlo a salvo, enfrentandose incluso a su propio clan, a su propia familia. Fue él quien lo ayudó, Itachi, no Sasuke.

Tímidamente acarició el torso desnudo, su rostro encendiendose a medida que las atrevidas manos de Itachi bajaban por su abdomen y se posaban en el elástico de los boxers, ansioso por despojarlo de esa unica prenda cuanto antes. Naruto tuvo que apartarse del beso cuando el pudor de su cuerpo se volvió insoportable. Itachi tambien detuvo sus movimientos al preever el rechazo. Pero tal cosa no sucedió, porque Naruto se limitó a alzar las caderas para quitarse por sí mismo la ropa interior.