Muchos años atrás, casa Loud
La vida en su hogar siempre había sido caótica, incluso desde antes que siquiera se detuviese a pensar en que realmente lo era, Luna sabía que su familia era un buen ejemplo de lo que significaba el caos.
Con cada miembro de su familia teniendo sus particularidades y personalidades únicas, dando situaciones que muchas veces ni siquiera era capaz de predecir, un buen ejemplo era su hermana directamente menor la cual parecía que se desafiaba a si misma cada año para enloquecer más el primero de abril o su hermanito quien podía convertir algo tan simple como ir a comprar víveres en toda una aventura, algo que realmente amaba de este.
Tocando una suave melodía con sus dedos, una que no se terminaba de adaptar a su usual estilo de música, esta simplemente se había dejado llevar por una extraña nostalgia, una que ni siquiera se explicaba, usando tonos menores mientras extendía los tiempos entre rasgados de las cuerdas, viviendo el momento de calma, aquel oasis en el caos habitual de su hogar.
- ...this feeling is borrow, a waste, a shame...
Su rasposa voz se notaba relajada, casi como si quisiese cantarle a un bebe, manteniendo sus ojos cerrados sin pensar demasiado las cosas, dejándose llevar, cantando hasta que se sintió conforme y decidió erguirse de su cama, dejando su guitarra a un lado con la intención de bajar de la litera, notando en ese momento que no se encontraba sola en la habitación, pues Lincoln yacía sentado en el pequeño sofá de espuma que tenía en una esquina del cuarto.
- Oh, Lincoln, no te sentí entrar.
- No es nada, además solo me quede a escuchar tu canción, era muy linda.
- ¿Tú crees? Solo fueron algunos versos al azar, ni siquiera tenían mi pasión puesta en ellos.
- Si eso era algo dicho al aire, cuando realmente le pongas corazón no habrá quien se resista a tu música.
- Oh boy, eres un encanto.
Lincoln solo le sonrió risueño, algo que Luna realmente amaba de su hermanito, siempre siendo capaz de poner una sonrisa en su rostro pese a que todo se estuviese saliendo de control, razón por la que no se resistió y se dirigió hasta este para pellizcar aquellas mejillas espolvoreadas en pecas, algo que provoco un pequeño rubor en el niño.
- (Avergonzado) O..Oye, no soy un bebe.
- Eres mi pequeño hermanito, siempre serás un bebe para mí, no importa si tienes 11 o 30 años.
- ¿Ni siquiera cuando sea mayor? ¡Por favor!
- Jeje, eres muy tierno.
El peliblanco lucho contra la mano juguetona de Luna la cual estaba revolviendo su cabello, un inútil esfuerzo por no parecer más pequeño que su hermana, quien notaba los esfuerzos de este por separarse de ella.
- Oye, tampoco tienes que ser tan agresivo conmigo.
- No soy un bebito.
- Bueno, - Saco su mano de la cabeza del pequeño – Si tú lo dices.
Luna entendía ese sentimiento, su padre se lo hacía sentir a diario aun cuando era una adolescente hecha y derecha, por lo que simplemente iba a respetar eso pese a que sentía deseos de seguir molestando a su hermanito, aunque como venganza final termino diciéndolo con un tono herido, riendo entre dientes imaginando cual podría ser la reacción de Lincoln o ver que podía terminar haciendo si realmente creía que se sentía lastimada.
Pero, para su sorpresa, lo único que escucho fue una voz triste.
- Luna, ¿Tú realmente confías en mí?
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Otra historia más
FanfictionEs simplemente otra historia más. Sucesos de alguien simple en un mundo lleno de maravillas y gente talentosa, buscando su lugar en el mundo. Sucesos que no siempre llevan a lo que uno desea... ni como uno lo desea.