Aquella pequeña ventaja, fue tiempo suficiente como para que el brujo del engaño interviniera.
—¡Rynna!
A pesar de haber evitado que el demonio la alcanzara, encerrándolo en una especie de burbuja de brillante cristal azul.
—Rynna. Mi flor, despierta.
—¡Rynna! —Raksha se apresura en llegar junto a su hermana menor —. Vamos linda, despierta.
—¡Rynna! —Remena y Ryuka corren hacia ella.
—Hermanita, despierta por favor —dice Raksha afligida —¡Rynna!
—Que cosa más interesante —murmura el brujo —. Esta es solamente una parte de un mismo demonio. ¿Dónde está tu origen?
—¡Stolas! ¡Deja a un lado a ese demonio, y ayúdanos aquí! —reclama Raksha.
Stolas se pone de pie para acercarse a la burbuja. Hay algo en aquella sombra que no deja de fascinar al brujo mientras las demás intentan despertar a su hermana.
—Raksha —dice Remena —¿Qué...?
—Saquémosla de aquí.
—Pero Stolas...
—Él parece tener otros intereses.
Por su parte, Stolas no deja de asombrarse por lo que tiene frente a él. Aquella sombra parece estar desesperada por salir de su prisión, y no deja de mirar a la chica que permanece inconsciente a pocos metros de él.
—La bruja es mía... ¡No la toquen!
—¿Porqué la quieres? —pregunta el brujo —Ella no tiene nada que te sirva.
—Pero a ti sí —Stolas nota un ligero cambio en los ojos de la sombra.
Un breve y ligero cambio de rojo a amarillo en los ojos de la sombra lo deja algo confundido, hasta que una risa y un movimiento palpitante en la tierra que parece estarse acercando llama la atenciónde todos.
—¡¿Qué está pasando?! —Remena se pone de pie —. Tenemos que salir de aquí.
—Raksha... —la voz de Rynna llama la atención de las brujas.
—¡Rynna!
—¡Raksha, tenemos que salir de este lugar!
—Ya está aquí —murmura Stolas.
—Ya llegué —todos guardan silencio al ver a semejante demonio —. La bruja es mía.
—Borkoff —dice Stolas —, el demonio de demonios.
—¿Ese es... el demonio? —pregunta Rynna, intentando ponerse de pie.
—¡Rynna!
—Es muy hermoso —dice asombrada de ver a semejante criatura entre los árboles.
—No te acerques a él —dice la bruja mayor.
—Pero...
—Apartence —gruñe el demonio.
—¿Crees que no puedo colocarte un bozal? —ríe Stolas.
Ante el desafío del brujo, el demonio comienza a gruñir mientras varias sombras parecen desprenderse de él, cayendo a su lado en forma de feroces lobos negros y de ojos rojos.
—¿Qué es todo esto?
—¿Qué acaso no lo ves, Raksha? —comenta el brujo, sin dejar de sonreír —. Es un demonio compuesto. Todas estas sombras son un solo demonio.
—¿Raksha? —dice Ryuka al notar que las sombras los tienen rodeados.
—Protejan a Rynna.
Aquellas palabras molestaron a la bruja menor. Toda su vida había sido igual, la protegida y nunca la que protegía. Pero está por acabarse.
Este es el momento para demostrarle a su hermana de que estaba equivocada, y de que siempre la había subestimado.
—Siempre haces lo mismo —Raksha voltea a ver a Rynna —. Siempre piensas que no soy capaz de hacer nada.
—Eso no es...
—He estado fuera de casa por días junto a un demonio y sigo aquí.
—Rynna, ya es...
—¿Suficiente? —los gruñidos se empiezan a oír con más claridad —. Sé controlar mi magia, Raksha. Sé lo que hacen los demonios. La única que no confía en mí para nada eres tú. Remena confió en mí para salir. Y Stolas confía en mí para todo. ¿Por qué tú no?
—Yo...
—¿Por qué tú no? —Raksha guarda silencio —. No esta vez hermana. Por una vez en tu vida, confía en mí.
Mientras Rynna comienza a caminar hacia el demonio, Raksha toma una decisión apresurada.
—Perdóname, Rynna. Pero no puedo hacerlo —murmura Rynna —. No me arriesgaré a perderte
—¡Raksha, no! —exclama Ryka.
—¡Déjala, Raksha! —exclama Remena.
—¡Cuidado! —un destello azulado proveniente de Stolas, hace que todos se ceguen por unos minutos.
—¡Rynna! —el llamado de Raksha es lo último que la mencionada oye antes de volver a desmayarse.
ESTÁS LEYENDO
El bosque de los demonios (4): Érase Una Vez
FantasyYa conociste la historia del bosque plagado de demonios en el que un día apareció una pequeña que cambió a la criatura más tenebrosa de la humanidad hasta el punto de convertirla en su familia. Pero... ¿Cuál es el principio de aquella historia? Éra...