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La época de finales había pasado y finalmente los estudiantes de la U.A tenían sus merecidas vacaciones. Muchos se habían ido de viaje con sus familiares, y otros decidieron trabajar para ahorrar algo de dinero.
Por otro lado, teníamos al pelirrojo el cual no sabía que hacer en sus vacaciones, consultó si podía visitar a sus padres, pero ellos estaban en un viaje de negocios.
Resignado pensó que pasaría sus vacaciones en su habitación, talvéz jugando videojuegos y pidiendo comida rápida, hasta que un mensaje inesperado llegó a su celular.
— ¿Bakugou? —se extrañó al ver el nombre del cenizo en su bandeja.
" Hey pelos de mierda, ven al parque dentro de una hora, si llegas tarde date por muerto"
Emocionado comenzó a vestirse lo más rápido que podía, finalizó con una campera roja y finalmente tomó sus llaves para salir rumbo al sitio acordado.
"Aún falta 15 minutos", pensó al llegar al parque hasta que a lo lejos visualizó una cabellera ceniza.
— ¡Bakugou! —llamó alzando sus manos para el chico fijara su vista en él.
— ¿Qué haces...?
— Oh, creo que me emocioné por volver a verte —confesó nervioso—, y me adelanté un poco.
— N-No digas esas cosas —murmuró queriendo ocultar un leve sonrojo que aparecía en su rostro.
— Y dime, ¿para que me citaste en este lugar? —preguntó sentándose en un banco al igual que su acompañante.
El cenizo meditó unos segundos antes de hablar—. Mis padres se fueron a visitar a mi abuela y pensé en que te podrías quedar en mi casa, no lo sé, para ver películas o algo por el estilo...
— ¡¿Me estas invitando a tu casa?! —preguntó emocionado.
— ¡No llames la atención de la gente idiota! —regañó—, sólo pensé que estaría bien invitarte...
— Gracias Bakugou, te prometo que la pasaremos muy bien estas vacaciones.
Ambos jóvenes quedaron en verse mañana en la casa del cenizo y era poco decir que el pelirrojo no había dormido en toda la noche, estaba tan emocionado por pasar lo que restaban de las vacaciones junto a su "mejor amigo".
— Llegaré tarde —mencionó al ver la hora en la que se había despertado, con rapidez comenzó a alistar todo lo que necesitaría esos días.
Unos treinta minutos habían pasado y finalmente Kirishima había llegado a la casa del cenizo, tocó dos veces el timbre y la puerta se abrió dejando ver al chico con la misma expresión de siempre.
— Llegas tarde —mencionó con cierto enojo.
— Lo siento, debí poner más de 3 alarmas —se disculpó avergonzado.
El pelirrojo logró instalarse en una habitación de invitados que tenía la casa de Bakugou, y ya era hora del almuerzo.
"¿Pediremos comida rápida?", pensó Kirishima bajando los escalones para dirigirse a la sala encontrando allí al cenizo el cual colocaba algunos platos en la mesa.
— ¡¿Tú cocinaste todo esto?! —preguntó asombrado al ver la variedad de platillos que yacían en la mesa.
— Claro que sí —admitió orgulloso—. Siempre me gustó cocinar y...
— Ya veo, eres tan masculino Bakugou —confesó interrumpiendo al cenizo.
Bakugou se sorprendió un poco por aquel cumplido, además no lo admitiría en voz alta pero que el pelirrojo lo haya elogiado le gustó.
— T-Toma asiento o la comida se enfriará —ordenó nervioso, el pelirrojo solamente sonrió e hizo caso.
Los días pasaban y ambos jóvenes compartían su tiempo mediante películas, comidas echas por el cenizo o salidas inesperadas.
Kirishima se imaginaba si esta era el estilo de vida que llevaría si alguna vez pudiese confesarse a Bakugou y lograra ser su pareja.
— Kirishima, ¿en que demonios piensas? —cuestionó con enojo el cenizo—, te estuve llamando desde hace rato.
— N-No es nada, solo pensaba...
— ¿En? —inquirió nuevamente.
— Como sería la vida en parejas —musitó avergonzado—, q-quiero decir, como pasarías tus días con tu pareja y cosas así...
— ¿Hablas de un estilo de vida en parejas? —preguntó el cenizo, el pelirrojo asintió—, nunca pensé en eso pero creo que yo podría cocinar muchos platillos para mi pareja.
— Y-Ya veo —afirmó inquieto—, la chica que esté contigo será muy afortunada.
— Kirishima, soy... —suspiró antes de confesarse—, soy gay.
Kirishima quedó sorprendido, pues estaba seguro de que Bakugou era hetero, aunque pensándolo bien, él jamás tenía a una chica a su alrededor.
— ¿No dirás nada? —preguntó nervioso, pues el pelirrojo era la primera persona a la que le había contado sobre su orientación sexual.
— Bakugou, yo...
— ¿Te sientes incómodo al saber que tu mejor amigo es gay?
— ¡Jamás!, ¡p-para mi tu seguirás siendo la persona que más amo! —confesó sin pensar, cubriendo su boca con sus manos al darse cuenta de lo que había dicho—. ¡Perdón!, yo...
— Idiota —musitó avergonzado—, pensé que algo cambiaría entre nosotros...
— Nada cambiaría Bakugou, porque seguirás siendo tu mismo, y además tú... tu me gustas.
El cenizo estaba muy conmocionado, pensó que luego de haber confesado su orientación sexual todo iría de mal en peor, pero esto era todo lo contrario.
— Tú también me gustas —confesó el cenizo, evitando la mirada del pelirrojo por la vergüenza.
— Entonces... —tomó las manos del cenizo—, ¿seré el afortunado de probar todos los platillos que sabes cocinar?
— Serás el único que podrá probarlos —sonrió sintiendo una paz en su interior, porque finalmente sería feliz con la persona que le enseñó lo positivo de la vida.
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Esto me salió luego de terminar de ver un stream >< ♡
