Treinta y uno

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Maratón 3/3




Seis de la mañana y se encontraban los tres despiertos, acostados en la cama acurrucados entre ellos, renuentes a levantarse y continuar con su rutina de mañana. SeokJin quedó de pasar por el híbrido en aproximadamente cuarenta minutos. TaeHyung y JungKook estuvieron felices al escuchar el deseo del menor de llevar una vida normal, el mayor de los tres se encargaría junto al profesor de buscar información para conseguir los papeles necesarios para poder hacer cualquier cosa —acta de nacimiento, por ejemplo— y de la validación de estudios por exámen. Por lo pronto, el primer paso era dejarlo ir con NamJoon a ver lo que era un día de clases para un profesor de primaria. El primero en darse ánimos para levantarse —a pesar de ser quien tiene una hora de sobra— fue TaeHyung. Entró al baño y la mandíbula se le cayó al suelo al verse al espejo.

— Mierda —soltó a su reflejo, perplejo al ver las marcas en su cuello y clavículas. Habían mordidas y chupetones decorando su piel canela, alzó la camisa y su torso se encontraba igual—. Carajo —su camisa del uniforme no lograría cubrir la mordida reluciente en su cuello.

— ¿Qué pasó? —JungKook entró al baño al escucharlo maldecir, para cuando su mirada enfocó tuvo la misma reacción al ver su piel. Regresó a la habitación y vió al pequeño JiMin dormitando con su carita inocente que no pudo creer que esa cosita haya hecho tal cosa. Rompió en carcajadas al ver que su novio todavía no lo procesaba, aún toqueteando su piel.

— No te rías, JungKook —gruñó preocupado por cómo lo ocultaría para no ser expuesto en su trabajo— ¿Todavía tienes maquillaje?

— Creo que sí, pero los tonos de piel son diferentes —respondió mientras salía a buscar entre sus cosas.

JiMin se levantó confundido por el escándalo por parte de sus mayores, necesitaba una explicación. Entró al baño y la imagen del mayor revisando su piel con chupetones lo puso a temblar.— ¿Yo hice eso? —preguntó preocupado. Apenas sus ojos se encontraron con los ajenos empezó a llorar, se aferró al mayor y se disculpó sin descanso.

— Eh, MiMi, no llores —dijo alarmado por su reacción.

— No sé cómo lo hice, lo siento. No va a volver a pasar, TeTe —prometió aún con la cara hundida en su pecho. Explicó que él odiaba cuando su piel quedaba llena de marcas, de lo mucho que le daba asco y que no era su intención haberlo hecho.

— No me molesta ni me da asco, gatito. Sólo me preocupan las que están a la vista por mi trabajo —consoló sincero. Abrazó el cuerpecito con cariño para reafirmar sus palabras, meciendolo levemente para calmarlo.

JungKook apareció con una bolsa de plástico cuyo contenido vació en el lavamanos, revolvió las cosas y fue separando el corrector, la base y una paleta de sombras de tonos nude. Siseó una maldición y fue a buscar las brochas que tenía abandonadas en algún cajón, revolvió las cosas hasta encontrar la bolsa. Entró al baño y le avisó a JiMin que se le haría tarde  y debía ir a vestirse para no demorar a SeokJin. Con todo el pesar del mundo, el híbrido dejó de abrazar al contrario y regresó al cuarto para vestirse, aún preocupado por TaeHyung.

Buscó ropa cómoda en los cajones. De mala gana se puso los pantalones y una camisa de manga larga que se ceñía a su piel, se colocó un nuevo par de calcetines y fue de vuelta al baño, esta vez con el pretexto de peinarse. Desenredaba sus hebras rubias mirando con atención lo concentrado que estaba JungKook intentando maquillar correctamente. Golpearon la puerta y supo que era su profesor cuando en seguida sonó la llave entrando por el cerrojo.

— ¿Por qué no te has vestido? —regañó a Jeon por seguir en pijama, le quedaba cada vez menos tiempo para que YuGyeom lo recogiera para ir a la escuela—. Rayos, JungKook. No hacías algo así desde hace años —jadeó sorprendido al ver el cuello ajeno lleno de corrector verde. El nombrado negó con la cabeza y señaló al híbrido con una risita. Casi se le cae la mandíbula, incapaz de pensar en el rubio haciendo algo así. JiMin recurrió a esconderse por vergüenza—. Oh, cielos. Bueno, vete a cambiar y yo termino esto.

Our hybrid ||VKookMin||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora