CAPÍTULO 66

422 10 0
                                    

Esa misma noche.

—Ahhhhh! Emily...—Se destaca sobre mí y yo me vuelvo loco.

—Gime mi nombre bebé...—Paso una mano sobre su cabello sudado y lo peino hacia atrás.—Gime...—Cabalgo más duro y se muerde los labios.

—¡Emily! ¡Ah! ¡Emily! Ah! Que rico.—La alzo un poco tomando su trasero en mis dos manos y le doy más rápido.

—Debería castigarte.—Muerdo sus labios.

—¡No! ¡No! ¡Emily! No detengas las ganas de correrme... ¡Maldición.—Ella se ríe pervertida y dejó de moverse. Yo agitado, sudado y con las ganas de acabar cerquita.—Emily...—Gruño ronco.

—Está bien. Está bien...—Comienzo a moverme y escucho sus jadeos.

—Yo si te voy a castigar.—La alzo y la puse en posición de perrito. ¡PLASS!.

—¡No! Coño...—Murmuré excitada.—Eres un tramposo.—Me da riquísimo tomando mis caderas y con su otra mano mi cabello.

—Te voy a dar por detrás.—Solté una carcajada burlona.

—¡No! ¡Jacob!.—¡PLASS!. Me da una nalgada.

—Silencio... Aquí mando yo.—La pego de mi pecho.—He sido muy tolerante todo éste tiempo no crees...—Susurro ronco en su orejita y ella se excita moviendo más su hermoso trasero.—Te acercaste mucho al tal Gustavo...—Rechiné mis dientes dándole duro y ella jadea.

—No siento nada por él...—Que castigo tan placentero. Soltó mi cabello para tocar mi cintura y senos. Los dos arrodillados haciéndolo lentamente es hermoso.

—¿Y por mí beba? ¿que sientes por mí?.—Pregunté ronco, si se sigue moviendo así me corro en segundos.

—No te voy a responder...—Reí divertida.

—¿Ah no?.—Bajo su espalda, saqué mi pene y entro en su sexo de una vez.

—¡Ahhhh! Jacob...—Está furioso. ¡¡PLASS!!.—Déjame gemir...—Jadeo excitada y sin aliento.

—Si no respondes... No.—Que lo haga rápido, que estoy cerca. Alzo una de sus piernas y fue la gloria.

—Te amo... Solo te amo a tí mi poema amargado...—Con penetración rápida y profunda y mi pierna alzada Jacob se corrió dentro de mí. ¡Ya no sé cuántas veces lo hemos hecho! ¡Es de madrugada!.

—mmmm....—Murmuré delicioso.—Rico...—Lo saco y le doy golpecitos en sus nalgas.

Emily se voltea agitada y cansada. Jacob se coloca sobre ella para besarla apasionadamente disfrutando cada choque de cada uno. Sus cuerpos desnudos, sudados y agitados se penetran piel con piel en los dulces besos y caricias. Toda la noche haciendo el amor hasta que llegó el sueño.

Los rayos del Sol dan en la pareja dormida y desnuda. Emily yace sobre el pecho de Jacob y él con los brazos sobre su cabeza. Los dos profundamente dormidos. Hasta que unos golpecitos en la puerta despiertan a la dormida Emily.

—Adelante...—Dijo Emily aún con sus ojitos cerrados sin saber quién es.

—Buenos días señor Sorrentino...—La terapeuta entró y su boca se abre por la escena caliente.—Lo siento... Sólo vine a buscar al señor Sorrentino para las terapias.—Se disculpó rápidamente.

Peligrosamente Juntos... "Diamond Heart" Donde viven las historias. Descúbrelo ahora