EL AMANTE ━━ [En curso] 《34》

Capítulo 25

—Se ha ido —murmuro con pesar mirando a Shachi detenerse frente a mí.

Luce y respira realmente agitado. Se agacha y reposa las manos en sus rodillas para recuperar algo de aliento.

Nos encontramos en la sala de espera del aeropuerto rodeados por la gente que va y viene.

Hace un gesto de lamento sin pronunciar palabra. Mira hacia todos lados como si creyera que todavía puede encontrarla. Voltea a la sección donde se llama a los pasajeros para abordar el siguiente vuelo y arruga los labios a la vez que sus cejas se abaten en medio de su frente.

Hice todo lo que pude para entretener a Bella, pero por desgracia, ni el tiempo en que hablamos sobre Jhanahy o acerca de su situación sentimental con Shachi fue suficiente como para hacer que él llegara antes de que ella abordara, y bueno, tampoco pude convencerla de quedarse.

No me fue difícil hacer que me dijera todo con respecto a Shachi pese a que ya había escuchado mucho de ello cuando estuve oculto en el departamento de Jhanahy hace algunas tres horas, pero quería tratar las cosas con ella cara a cara para así estudiar meticulosamente todas sus gesticulaciones y no perderme de ningún detalle.

Ya sé que quizá me estoy pasando de desconfiado pero debo proteger a mi amigo después de todo. Además, todavía resiento un poco a Bella por lo sucedido con Jhanahy aquella vez, aunque tengo que admitir que con lo escuchado en casa de ésta, estoy menos molesto, sumando que si mi bruja ya la ha perdonado, a lo mejor es bueno que yo también haga un esfuerzo por imitar su nobleza y bondad.

La verdad es que he descubierto que todo lo que sea importante para Jhanahy, de alguna manera también lo es para mí.

Cuando salí del departamento de Jhanahy me apresuré a decirle a Shachi que si Bella lo rechazó fue porque se había enamorado de él, y vaya que éste ni siquiera supo qué decir al respecto, tan solo me pidió que la entretuviera, y me dijo que vendría tan rápido como le fuese posible desde Vía Pietro, Turin, de regreso a Milano, ya que había ido a reunirse con sus compañeros de banda.

Condujo un poco más de dos horas para detener a la loca mujer que insistió en que no era buena para él, y que no tenía caso decirle cómo se sentía con respecto a su persona.

—¡Maldición! —se queja llevándose ambas manos a la cabeza o mejor dicho, hacia ambos lados de la gorra blanca que usa.

—Lo siento, amigo —le digo colocando una mano sobre su hombro—. No pude convencerla.

«Shachi es demasiado bueno para mí». Resuena en mi cabeza.

Y pensar que estuve a punto de espetarle que en eso estábamos muy de acuerdo, y solamente porque quería actuar y sonar como todo un odioso para disimular que ya sabía sobre esto puesto que escuché su conversación con Jhanahy, pero su sonrisa quebrada y sus ojos enrojecidos fueron cosas que me detuvieron.

Dijo que gustaba de Shachi, y mucho, pero que ésa era exactamente la razón por la cual no podía estar con él.

Agregó que hizo todo mal desde el principio y dejó caer el peso del énfasis en el hecho de que Shachi era una figura pública, y que a él no le haría nada bien si se supiera que ella es la protagonista de los vídeos y de las fotografías privadas que recién se habían esparcido en internet.

Intenté convencerla de que a Shachi no le importaba nada de eso, pero entonces contrapuso que sospechaba de que la propuesta de éste estaba relacionada con compasión y simpatía, y que no quería comprobar que tenía razón porque no podría soportarlo.

Me confesó también que pese a sus sentimientos para con él, no estaba lista emocionalmente para nada, y que tenía que trabajar primero en ciertos aspectos de sí misma que debía mejorar antes de poder decirle «te quiero» a otra persona.