18. No puedo ni quiero aceptarlo

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El festival Woodstick termino ya tarde, la cabaña del misterio era el lugar que se encontraba más cerca así que los gemelos fueron los primeros en llegar a su hogar, para dejar a Di tenian que desviarse un poco del camino hacia la casa de Thompson así que Dipper invito al rubio a pasar la noche, para que los demás pudieran ir directo al hogar de su otro amigo a descansar. Cuando llegaron aun estaban las luces prendidas.
-Ya llegamos- Anuncio el castaño, sin recibir respuesta mientras se asomaba a la sala donde aun estaba la luz encendida, encontrándose con una no muy grata sorpresa, la rubia estaba durmiendo en el sillón, este la ignoro y se encamino a su habitación seguido del rubio.
-Creo que dormiré en el piso a menos que quieras compartir tu cama- Dijo el rubio algo nervioso esperando la respuesta del castaño
-Es lo que iba a proponerte, ya que la cabaña no tiene muchas habitaciones, pero si te incomoda puedo dormir en el piso y dejarte la cama- Respondió el castaño nervioso
-Solo era una broma, disculpa si te incomodo
-No es nada de eso, solo que no quiero causar algún malentendido entre nosotros, ya sabes, por lo que te dije en el festival hace un rato.

Ya sin nada más que decir, ambos se acostaron en la cama viendo en direcciones opuestas, sus espaldas quedaron juntas e intentaron dormir cosa que ninguno de los 2 logro.
-Hey, Dipp sigues despierto
-Si, ¿Tampoco puedes dormir?
-No, siento que estamos incomodándonos sin razón alguna ¿Quieres hablar?
-No, bueno... No lo sé, ¿Tu quieres?
-Quiero muchas cosas en estos momentos, pero hablar no es mala idea- Dijo el rubio riendo sabiendo que habia conseguido un sonrojo por parte del castaño a causa de sus palabras, después de unos momentos la cama se movió un poco, Dipper se levanto aceptando la propuesta de platicar con el rubio.
-Jugamos ronda de preguntas entonces, cada quien va a responder una pregunta por turnos, ¿Quieres iniciar?- Preguntó el castaño a su compañero
-De acuerdo, ¿Cuál es tu nombre? Ya que creo que Dipper no parece un nombre real
-Mason, mi nombre es Mason, toda mi vida me han dicho Dipper por mi marca de nacimiento, bien, me toca. ¿A que te dedicabas en donde vivías anteriormente?
-Pues los negocios siempre han sido parte de mi vida, con mi familia hacíamos tratos con personas poderosas que pudieran retribuir lo que les ofreciéramos, siempre que nosotros ganáramos más de lo que ofrecimos, esa es una de las razones por las que pensé que me odiarías, ya que mencionaste algo así de un ser despreciable- Al decir esto el rubio sintió que le presionaban el pecho, el castaño se sorprendió y también se sintió mal por haber dicho esas cosas sin conocer al rubio. -Bueno continuo el rubio, ahora yo quiero ver esa marca de nacimiento
-Preferiría no mostrártela, pero tu ya me hablaste sobre algo que al parecer te incomoda así que creo que esta bien- Dicho esto se levanto el flequillo y dejo ver la constelación de la osa mayor, o The Big Dipper en inglés.
-Bueno, ¿Dejaste algo o a alguien en Noruega por quien regresarías?
-No, todo lo que ahora quiero esta aquí.- El castaño se sonrojo con esto último ya que el rubio lo miro de una manera muy seductora, por suerte para él, estaba oscuro. Así continuaron hasta que el sueño los venció y terminaron durmiendo abrazados como la primera vez que el rubio se quedo en casa de este, por la mañana al salir los primeros rayos del Sol, Dipper despertó por unos toquidos en su puerta, descubriendo que de nuevo estaba abrazado al rubio, pero esta vez no lo lanzo solo se removió tratando de soltarse del fuerte agarre de este, después de unos segundo de forcejeo despertó a su compañero de cama y pudo levantarse, se dirigió a la puerta y al abrirla pudo ver a la rubia molesta por la tardanza en abrir la puerta.
-Dipper, estuve intentando comunicarme contigo todo el día y cuando vine no estabas, debiste despertarme cuando llegaste para poder hablar, no me porte de una buena manera contigo y lo siento, reanudemos esa cita pendiente que debimos tener ayer así que alístate y te espero abajo
-Lo siento, tengo planes para hoy, y más que disculpa parecería que estas elevando más tu ego, no acepto disculpas de esa manera, lo siento pero no.
-¿Pero qué? No sabes que difícil fue dejar mi cómoda cama para venir a esta cabaña y esperarte, no sé en que momento me quede dormida en sucio e incomodo sillón, solo para que sigas molesto conmigo, no tienes idea de lo desagradable que fue hacer todo eso, cuando bien pudimos tener una cita y la mejor noche de tu vida.
-¡Pacifica! Nadie te obligo a venir más que tu misma, tu sed por tener el control y obtener cualquier cosa que quieres te orillo a venir cuando no te respondí, eso solo demuestra el control que quieres obtener sobre mi, pero no lo permitiré, me gusta salir con mis amigos, estar con mi hermana y mi familia, no estaré a tu lado a cada momento y tampoco voy a interrumpir mis actividades para discutir contigo mientras reclamas el hecho de no pasar tiempo contigo
-Todo esto es por ese maldito teñido, ¿Verdad?
-Espera ¿Qué? ¿A caso no escuchaste todo lo que acabo de decir?
-¿Estuviste con él ayer si o no?
-Pacifica, no hagas esto, de seguro Mabel y mis tíos siguen durmiendo, no quiero molestarlos con una pelea insignificante
-¡Oh! Ahora mis sentimientos por ti son insignificantes.

Antes de que la pelea continuara se escucho una voz ronca dentro del cuarto del chico, y segundos después alguien lo abrazaba por detrás.
-Vuelve a la cama, aun tengo sueño después de que no me dejaras dormir, sigo cansado, vamos a dormir- El rubio se habia levantado y habia montado toda una escena frente a la Noroeste
-Así que por esa razón no pudiste responderme, estabas muy ocupado con este extraño espécimen
-Espera Di, no saques de contexto lo que paso ayer, solo estuvimos hablando hasta la madrugada
-Pero, con respecto a tu pregunta, él si estuvo con este raro espécimen ayer, fuimos al festival con Wendy y los demás, y es verdad, estuvimos hablando hasta el amanecer
-En lugar de estar hablando con tu nuevo amiguito, tu y yo pudimos habernos divertido mucho, pero ya haz perdido tu oportunidad conmigo Pines, y cuando él se aburra de ti, vendrás a buscarme y será muy tarde, a menos que me demuestres que puedes valer la pena.- Esto ultimo lo dijo mirándolo de arriba a abajo mientras se acercaba a su rostro, estaba a punto de rozar sus labios con los del castaño, cuando Di, los interrumpió, jalando al castaño hacia atrás y volteándolo para que lo mirara, lo tomo de los hombros y comenzó a sacudir al castaño.
-Dipper, ya que no me dejaste seguir durmiendo vamos a desayunar, tengo mucha hambre, además debo ir a abrir mi librería, vamos- Dijo alargando la ultima palabra de manera dramática, mientras le daba una sonrisa de victoria a la rubia
-Esta bien teñido, vamos a desayunar y luego a Celticland- El rubio frunció el ceño, después de que su amigo lo hubiese llamado como aquella molesta chica.

Dipper se despidió de Pacifica, mientras regresaba a su cuarto con Di para alistarse e ir a desayunar. Al salir del cuarto ya no vio a la Noroeste y se fueron a desayunar con Linda Susan. AL terminar de desayunar el rubio lo invito a correr y acompañarlo a su rutina de ejercicio, a lo que el castaño acepto, ya que desde que inicio el verano no se habia ejercitado ningún día y se habia sobre alimentado, lo cual lo hizo sentir un poco culpable, después de haberse prometido que no lo haría, así estuvieron toda la mañana hasta que el reloj marco que era hora de abrir el negocio.














Una vez más junto a ti (BillxDipper)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora