Vanessa es una joven que nunca salió de su zona de confort. Aquella que la rodea de sus seres queridos, con los cuales paso la mayor parte de su vida. Aquella que es una tranquila zona, por más que tiene que afrontar dificultades económicas.
Desde p...
Los que viajamos para el siguiente concurso somos Olivia, Lía, Irene, Mía, Sumy, Ciro, Noah, Uriel, Tiziano, Eithan, Zai'd y yo.
El cascanueces.
Me encontraba super emocionada. Aún teníamos varios días para practicar una vez más, ya que nos encontrábamos medios oxidados debido a que dedicamos las últimas semanas al otro concurso.
-En veinte minutos es el vuelo- soltó Olivia al regresar a nuestro grupo.
Tomó asiento, soltando un pesado suspiro.
-¿Vieron?, les dije que aún era temprano- repitió Mía.
-Buenooo... veinte minutos se pasan volando- dijo Eithan, despreocupadamente.
El día de hoy estaba realmente agradable, no hacía tanto frío, ni tanto calor. Un par de semanas, e iniciaba la primavera. Así que opté por un vestido de falda larga, y mangas largas, de un tono azul con pequeños lunares blancos. ¡Me encanta!. Me coloqué un cinturón de color marrón y zapatillas, obvio. Tenía una chaqueta por si tendría frío, pero hasta ahora todo estaba tolerable.
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Observe a mis alrededores, notando que no había demasiada circulación de persona. El aeropuerto, se encontraba super tranquilo. Mejor, odio cuando es un caos. Como lo fue esa vez que tomamos el avión para llegar hasta aquí.
-Iré a comprarme algo para comer, ¿Alguien quiere venir?- preguntó, Ciro.
-Yo- se puso de pié Lía.
-Yo también- levantó la mano Tiziano -Dejamos el equipaje aquí- nos observó, aguardando nuestra aceptación.
Obvio que no teníamos problemas.
Los tres se alejaron. Me encontraba sentada al lado de las chicas, crucé mis piernas y moví mi pié, impacientemente. Fijé mi atención en mis manos, soy de esas personas que les es difícil tener las uñas largas. Mordi mi labio inferior, inconcientemente. Levanté la mirada, encontrandome con Zai'd de pié en frente de mi. Una de sus manos sostenía su maleta, mientras que la otra sostenía el celular. Vestía unos jeans azules desgastados, y una remera mangas largas de color negra. Su cabello se encontraba suelto, sin una colita. El mismo, casi tocaba sus hombros, y tenía ondas. Una bincha, tiraba su cabello hacía atrás. Como la usan la mayoría de los tenistas. Su nuez de Adán le daba este toque masculino, fuerte. Como la remera se encontraba aremangada, pude notar las venas que sobresaltaban de sus brazos, fuertes. De sus manos.
Dios....
Zai'd, sin lugar a dudas es un hombre guapísimo. Apuesto que ha tenido miles de chicas que mueren por ese adonis. Por aquellos ojos verdes. Por.. Creo que presintio que alguien lo observaba, que yo lo estaba observando, porque despegó su atención de la pantalla de su celular, centrandola en mi persona. Un guiño de ojo fue más que suficiente para teñir mis mejillas. No fue vergüenza. Fue todo lo contrario.
