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De esa vez, la inminente batalla no parece ser tan fácil como las veces anteriores. Es un presentimiento que tiene Tony. El miedo iracundo a que las cosas salgan mal y vidas se pierdan en el camino.

Los vengadores ya no son los mismos de antes, y por ello, Tony debe trabajar el doble.

"Señor Stark, es la hora de la comida." La IA lo recuerda, pero el héroe apenas la hace caso. Tiene esquemas por revisar y planes que comentar con los demás.

Luego. —Se esfuerza a hablar sin despegar el ojo de los hologramas que tiene en frente.

Demasiadas propuestas, pero ninguna solución válida. Mierda.

Tony siente ansias de tomar un trago. Pero él sabe que si toma uno, luego vendrá otro, y otro...Hasta que él se vea incapaz de mantenerse de pie por si solo.

"No quiero que ella me vea así." Al héroe le viene a la cabeza un recuerdo tuyo. Puede que uno ficticio, pero no menos doloroso. En la imagen mental de Tony, tu le miras con ojos reprochadores. Desilusionados.

Entonces el entorno cambia, y ahora tu estas en el suelo, ensangrentada, en algún lugar de Nueva York mientras el mundo cae a pedazos.

—Eso no pasará.—Tony lo afirma en voz alta quitando la imagen de la cabeza.—Solventaremos el problema y todo acabará bien. —Se despeina con nerviosismo antes de alcanzar el móvil, y comprobar el localizador que tiene instalado en tu teléfono móvil. Para alivio de Tony, el GPS pone que tu estás en el trabajo.

Él tiene ímpetu de acceder a las cámaras de seguridad del bar, pero, finalmente se detiene. No hay que volverse paranoico de repente. Además, Tony no quiere invadir más de lo necesario tu privacidad. No es lo correcto.

—Y de vuelta a lo mío. —suspira metiendo el móvil en el bolsillo del pantalón. Una parte de él desea llamarte, oír tu voz, bromear contigo y comerte a besos. Pero no es el momento, mucho más ahora.

Sobre todo con Thanos.

♣♣♣

—¿Qué te ocurre monada? —El memorable Stan lee te mira con preocupación visible. Eso te hace sonreírle como forma de quitar hierro al tema.

—Nada de nada. ¿Quieres más café? —Le acercas la jarra térmica y Stan Lee asiente con la cabeza. —Bien.

—¿Y qué tal la aventura de tu vida? —Indaga él curioso.

Pero oírlo te da un poco de nostalgia. La única aventura interesante en tu vida ha sido que Iron Man haga parte de ella y...hace semanas que no sabes nada de él. Eso no debería de sorprenderte tanto, pero escuece por dentro.

Además, tu cobardía te impide dar el primer paso y llamarlo, o enviarle un mensaje siquiera.

Te entra el miedo de que de alguna forma eso le estorbará. Que Iron Man se cansará de ti si insistes tanto. Pero por desgracia, tu nunca has sido muy fan de esperar.

—¿Hola? —Stan Lee balancea la mano izquierda en frente de tu rostro para llamarte la atención.

—Perdóname. —Te excusas avergonzada. —Pero respondiendo a tu pregunta, la aventura que es mi vida está siendo de lo más sorprendente. —Sonríes de verdad verdadera. Sin vestigios de falsedad. —Creo...que jamás de lo jamases me olvidaré de todo lo ocurrido este año. —Le guiñas el ojo a Stan Lee. —Lo atesoraré por siempre en mi baúl de los recuerdos. Donde las mejores aventuras deben estar.

—¡Bien dicho!

Por desgracia, en este exacto instante se oye un sonoro estruendo no muy lejos del bar, y en la TV aparece la noticia de que la Tierra está siendo atacada una vez más.

Otro estruendo se oye, y las cristaleras del bar se hacen añicos. En un instante todos se echan a correr.

El miedo te entra en el cuerpo, y un extraño presentimiento te dice que algo irá mal. Muy mal.

—¿¡Que hacemos!?— El cocinero grita.

—¡Vámonos de Aquí! —Josiah añade histérica, pero el encargado nos detiene de irnos todos.

—¡Antes hay que cerrarlo todo! ¡Seguro los vengadores vendrán a salvarnos!

A dura penas estamos de acuerdo con lo que el gerente dice. Muchos de los trabajadores desean irse a casa para comprobar si sus seres queridos están bien, y tantos otros alcanzan el móvil para llamarlos, pero, el gerente, con frialdad, les obliga a guardar los móviles y empezar a limpiar antes bajar las rejas de acero fuera.

"Por favor, que Tony esté bien." Miras de reojo a la televisión en busca de señales de él, pero nada. Deseas llamarlo como loca, pero el encargado no te lo permitirá, así que te contienes mientras limpias los cristales rotos como todos los demás.

El tiempo pasa lento...demasiado lento para ti.

♣♣♣

A Tony le ocurre lo opuesto, el tiempo pasa demasiado rápido para él. En un instante él está revisando los planes que tiene en manos y ahora, se encuentra con Strange y Peter en el espacio, en otro planeta. Hay un grupo de tipos que se hacen llamar los guardianes de la galaxia y es...complicado.

Pero por desgracia, más se complicará. Es inevitable. Además, Strange no le suelta prenda a Tony sobre los posibles futuros de como puede acabar la batalla con Thanos. Síntoma de que no es buena señal.

Y por desgracia, no les queda otra que proteger a las últimas gemas del infinito que les quedan.

Loving Iron Man (Iron Man x Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora