𝓢𝓲𝓮𝓷𝓭𝓸 𝓟𝓪𝓭𝓻𝓮𝓼 - 𝓣𝓸𝓴𝔂𝓸 𝓡𝓮𝓿𝓮𝓷𝓰𝓮𝓻𝓼

Nuevas Comidas/Juegos

Por fin había llegado, los tan esperados seis meses, lo que significa que lentamente los gemelos deberían hacer su transición de leche materna a comida normal.

En esta etapa ya comenzaban a salirles los primeros dientes de leche, lo cual era una mala noticia para Kakucho; los gemelos sufrían de dolor constante, y como último recurso para aliviar el dolor solían morderle el pecho, lo cual lo dejaba adolorido.
Pero no había tiempo para quejas, la hora del desayuno llegó, los gemelos estaban en sus nuevas sillitas esperando ansiosamente que su progenitor los alze en brazos para desayunar.

— la comida de hoy es especial — Kakucho puso frente a los gemelos dos pequeños platitos con ventosas, las cuales servían para adherir el plato a una superficie plana, así evitaba que tiren la comida al suelo. — papilla de espinacas

Akio y Akira miraban con extrañeza la comida que fue puesta frente a ellos ¿Dónde estaba la leche? ¿Qué era esa cosa verde en el plato? Los gemelos alzaron sus cabecitas hacia sus padres, como si estuvieran esperando una explicación o que fuera una broma de muy mal gusto.

— deben comerlo, no habrá más — explicó Izana al ver las caras de confusión de sus gemelos.

Akio usó sus pequeñas manos para tomar un poco de la papilla; hizo una mueca de extrañeza al sentir la textura tan espesa ¿Qué podría hacer con eso? ¿Para qué servía? Pensaba el bebé al abrir y cerrar su pequeña mano.
Tal vez era una especie de juguete, tenía que ser eso.
Akira sólo miraba a su hermanito atentamente, y en poco tiempo imitó la misma acción de su gemelo; los gemelos se miraron al mismo tiempo, parece que habían tenido una gran idea gracias a este descubrimiento.

— siento que hemos cometido un grave error — dijo Kakucho al tener un mal presentimiento.

— no puede ser tan malo ¿Qué pueden hacer con papilla? — preguntó Izana al no entender las palabras de su pareja.

Y en ese momento, el primero en atacar fue Akio, quien lanzó la papilla de espinacas hacia su hermanito. Akira no se quedó atrás y también lanzó un poco de papilla hacia su hermanito, ambos bebés reían, habían descubierto un nuevo juego, aunque no podía decirse que el descubrir nuevas comidas había funcionado.

— ¡Basta! ¡Akio, Akira! — Izana no podía dejar que sus hijos armen una guerra de comida y ensucien la cocina, así que se acercó a los pequeños y sujetó sus manitas para detenerlos — no se juega con la comida

Pero de nada sirvió, Akio y Akira usaron sus pequeñas manitas libres para unir a su padre al juego de guerra de comida, ahora Izana tenía la cara manchada de papilla verde.

— oh... Izana — Kakucho habló al verlo — tienes...

— sólo pásame una toalla y no señales lo evidente — respondió enojado y dejando a los gemelos divertirse con la comida.

Realmente no sé si consiga terminar a tiempo, pero decidí hacer este escrito para compensar el día anterior que no hice