El Valor De Un Sentimiento

Confesión de un vagabundo enamorado

Media noche y las estrellas explotan mis ideas, la sonrisa de la luna cultiva en mi pecho una energía sublime que embellece mis reflexiones sobre ella.

Me hechiza su mirada y me seduce su dialecto. Encanta mis sentidos con cada uno de sus suspiros. Cede ante mis sentimientos y me hace sentir una cosquilla en la mente.

Posiblemente mis deseos sean escuchados por los dioses del Olimpo y los ángeles me hagan perder la paciencia con este hormigueo que me haces sentir en mis brazos, erizando los vellos de estos mismos.

Vuelas mi mente mujer, ¿Qué debo hacer para que tus delicadas manos me rocen el rostro?.

Luna amiga mía, hoy en esta velada de romance te pido una señal del destino para entender un poco sus pensares sobre mi persona.

Cordura necesitaré para estar pacífico y sereno si es un no, pero amiga Luna, si es un sí. Sostenme fuerte del desmayo que provocaría tal respuesta positiva para mis oídos.

Es sublime en todos los sentidos respecto a lo que es en ella cautivador. Es hermosa como una flor bella, es divertida y elocuente en sus comentarios, es sensata e inteligente. Tiene un talento enorme con bastantes cosas, siempre se la pasa con la cabeza en las nubes la muy torpe, pero así es encantadora, hasta esa torpeza suya me tiene latiendo fuerte el corazón.

Luna, dime ahora, ¿Qué sucedería si mis sentimientos son correspondidos?, ¿Seré lo suficiente para ella?.

Anotaré cada vez que sonría, quiero saber cuándo sonríe y el porqué, detesto últimamente verla triste, quisiera ser quien le otorgue un poco de confianza a abrirse, por mucho que le duela hablar sobre todo aguantando el llanto y la ira.

Luna, cada que te mire ella, hazle ver qué no está sola, y que su chispa encantadora con la que la conocí es lo más increíble que llegue a ver en una hermosa persona.

Pero claro, solo soy un vagabundo enamorado.
Y ella, una bella dama lastimada.

Kenya, Who AmCe