(Te agradecería que leyeras con detenimiento, finalmente, si te gustó, vota y comenta ;) ) Solo para los que son de corazón fuerte.
Multimedia: Reality - Lost Frequencies feat. Janieck Devy
—Capítulo 1—
Melbourne, Australia
23 de Marzo del 2017
¿No les pasa que alguien llega a tu vida para cambiarlo todo de repente? Exactamente, eso es lo que acaba de sucederme. No he sido la misma desde entonces...
Esto no puede estar pasando, me refiero a que no es un gran día.
Antes de soplar las velas, elevo la mirada al frente y mi cerebro se desconecta por un instante. Mi visión se nubla por las increíbles imágenes que se presentan y el aire está cargado de tensión. Lo más probable es que después de esto nada va a estar bien. Significa que mi vida a partir de este momento se verá reflejada en él de un modo inverosímil.
Entre las paredes hay un color que no encaja, el de sus ojos y las inscripciones que están trazadas en la abertura del cuello de su oscura camiseta. Tiene una mata de pelo increíblemente negro y lo mantiene agarrado en una coleta. Parece como si odiara al mundo entero, su expresión es vacía y neutra que carece de simpatía. Pero eso no es todo lo que les quiero contar. Mi pesadilla acaba de hacerse realidad y siento como si me faltara aire en los pulmones.
«Papá no puede estar hablando en serio».
Estoy casi al borde de las lágrimas. ¿Qué clase de broma era esto? Tal vez esperó este día para soltar la gran bomba del momento. El odio que siento por él se maximiza en mis entrañas.
Casi me doy cabezazos contra la pared cuando Rhys Mitchell me concede una sonrisa insolente. Mis amigas están tan maravilladas con el susodicho que acaba de llegar a nuestras vidas con esa chaqueta de cuero marrón y esos blue jean.
—Blake, nena. Lamento mucho que esto esté pasando —Sienna, mi nana, intenta tranquilizarme pero no lo consigue.
—No me pidas eso, por favor.
Mi rostro se descompone y, como lo predije, papá siempre estuvo ocultándome las cosas.
Permanezco en completo silencio mientras observo a ese extraño chico que dice ser mi medio hermano y, de algún modo, me urge gritar como una maníaca.
—Hija... —Papá sostiene mi mano, pero yo la retiro de inmediato.
—No tenemos nada de qué hablar.
Giro, evitando a la persona que tanto amé. Recorro hasta la pileta y los tacones me escuecen los pies. Decido quitármelos. Algunos mechones de cabello rosa caen sobre mi frente y no sé cómo he podido soportarlo.
¿Cómo algo así podía cambiar mi vida por completo?
Doy un trago a mi bebida por mi décimo octavo cumpleaños. Es un Bloody Mary. ¡Ostras! Mi garganta está tan caliente que me raspa hasta la cavidad bucal.
Reality de Lost frequencies sigue sonando estrepitosamente y, a decir verdad, esta ha sido la peor fiesta de cumpleaños que he tenido.
Los nervios se alojan en mi interior y no puedo evitar ver como todos aquí comienzan a especular, el vaso me tiembla en la mano y, cuando el objeto se me cae, el cristal se hace añicos. Sin embargo, me llevo la peor parte toda vez que Duque, nuestro perro, el engreído de la familia, me empuja a la piscina con tanta fuerza, quien persigue al gato de la vecina de atrás. Es inútil impulsarme. Puedo sentir como me falta la respiración, mis manos palmotean y mi vestido se eleva por la revestida presión del agua. Lo único que escucho son risas y noto que un salvavidas cae a la piscina para sacarme. Cuando lo hace empiezo a toser y nana me envuelve con una toalla de algodón por encima de los hombros.
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Rhys Mitchell: El sabor del pecado [ I ] +21 ✅
RomanceEsta de aquí soy yo, Blake Campbell, hija única de uno de los abogados más cotizados de Australia o al menos lo era hasta ese entonces... Ese de ahí es Rhys Mitchell, a quien apenas acabo de conocer en mi fiesta de cumpleaños, pues resulta que es m...