¡Feliz inicio de semana!
Solo para los que son de corazón fuerte ;)
Multimedia: God Damnit - ILLENIUM FT. Call Me Karisma
—Capítulo 32—
No hay nada que desee más que estar a su lado. Todavía estoy sensible, pero eso es lo que menos importa. Su cuerpo está cubierto de sudor y el mío también. Empuja dentro de mí y con un dedo masajea mi clítoris. Mi desaliñado cabello es la prueba del sexo que jamás he podido tener y eso es todo lo que quiero llevarme a la tumba.
Me tiemblan las piernas cuando un líquido pringoso resbala en mis paredes. Por alguna extraña razón, bombea en mi interior y se da la oscura liberación. Un orgasmo más y me derrumbo en sus brazos.
Tomados de las manos, nos miramos de forma sexy y nos seguimos devorando la boca. El ardor es ameno y placentero. Esta experiencia es única y tentadora. Este es mi lugar favorito, mi refugio. Ahora todo tiene sentido. Roza, nutre y golpea. Incapaz de evitar que nuestros ojos se cierren.
Rhys me clava de una sola estocada.
Tengo la impresión de que es demasiado alto para mí y yo demasiado pequeña. Mi pecho se levanta hacia su aterciopelado rostro y su aliento hormiguea mi piel. Sus manos caen en mis glúteos, los estruja y pego otro grito, mientras me agarro de la parte de atrás de su cuello.
Y cuando nos corremos juntos, me derrumbo sobre sus anchos hombros e inhalo con fuerza. Parece que ninguno era consciente del tiempo que nos llevó hacer esto. Él se viste primero y, agarrándome de la cintura, lo hace posteriormente conmigo. Pasa los paños cortos con la mirada y desliza sus manos en mi piel con un leve apretón.
—Primero va este —La voz dulce de Rhys me habla con un goce matutino.
Lo miro un segundo antes de moverme. Al rato, respiro con total normalidad, porque desde que comenzamos, nada más me oprime.
—Correcto —le aprieto el hombro.
—Soy bueno en esto.
—Lo eres, Rhys Mitchell —me refiero a él con mucha formalidad pero ¿qué será cuando todo vuelve a su estado original? ¿El sueño se acaba? Vuelve el odio, la tristeza y qué mejor que un «aborto de Teletubbie».
—¿En qué piensas?
—Yo en nada —me niego a decirle las cosas que se me vienen a la mente.
—Te conozco mejor que nadie —Puedo sentir sus manos fuertes en mis piernas.
—¿Cómo así? —lo miro vacilante.
Rhys es un gilipollas con el corazón bueno y resistente, pero también puede ser malo y gélido cuando me lo enfrento. Sé de qué lado va.
—Puedo leer tus más oscuros pensamientos —me guiña un ojo cuando me sube los tirantes de mi sujetador.
—¿Eres adivinador?
—Algo así.
—Hum... interesante —me acostumbro al aroma exquisito que trae puesto.
—Me gustaría raptarte por unos días más y tenerte solo para mí, pero ya es hora de irnos —sugiere.
—Lo sé.
—¿Mucho mejor? —Me da su chaqueta para mantenerme cálida.
—Sí.
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Rhys Mitchell: El sabor del pecado [ I ] +21 ✅
RomanceEsta de aquí soy yo, Blake Campbell, hija única de uno de los abogados más cotizados de Australia o al menos lo era hasta ese entonces... Ese de ahí es Rhys Mitchell, a quien apenas acabo de conocer en mi fiesta de cumpleaños, pues resulta que es m...