una locura || Carlos sainz

Capítulo 26 : Accidente

- Ojalá estuvieras aquí amor - me dice Carlos a través de la pantalla del móvil, yo pongo un puchero - No me pongas esa cara porque me dan ganas de raptarte y no puedo.

Yo rio y él sonríe.
Quédate toda la vida sonriendo por favor.

- A mi también me gustaría estar ahí acompañándote. Pero dentro de poco estamos juntos.

- Lo principal son los estudios, ya habrá tiempo de verme en los circuitos rubia.

- Lo sé, y además tengo la televisión para verte. Aunque, no es lo mismo.

- Ahora no tengo quien me de besos de buena suerte, ningún abrazo y que me diga antes de prepararme buena suerte y que regrese a ti sano y salvo.

- Te quiero Carlos.

- Y yo rubia, y yo. Bueno te dejo que estudies, después te llamo.

- Buena suerte amor y por favor cuidado.

- Te lo prometo Chiara.

Corto la llamada y suspiro bajando mi mirada hacia los libros de la universidad.

Estoy bastante enamorada, cada vez que pienso en él me sale la típica sonrisa tonta. Quiero estar con él todo el tiempo. Quiero que me bese. Quiero que me abraze. Lo quiero todo con él.

Estas últimas semanas están siendo un caos, muchos exámenes, muchos trabajos, se nota que estoy llegando al final de la carrera universitaria y estamos hasta arriba.

Estoy viendo durante estas semanas las carreras por la televisión, aunque sólo las carreras porque no tengo tiempo para más. Es dormir, comer, estudiar y bañarme, así continuamente. Pero sé que todo esto valdrá la pena.

Cuando acabé la carrera empezaré con las prácticas en el hospital en el que me destinen. No sé donde será, pero espero que esté cerca de casa y así pueda ir en coche, ir y volver. Aunque en estos casos pueden pasar miles de cosas. Lo mismo me mandan a la otra punta del mundo. Aunque espero que no.

El último Gran Premio al que asistí fue Mónaco, y como siempre hay fotos de la fiesta que han salido a la luz. Todo se filtra a la velocidad de un rayo. Es increíble como lo hacen, yo no me lo explico. En menos de lo que nos esperábamos ya estaban las fotos circulando por las redes sociales y ya estábamos en boca de todo el mundo. De lo que más se ha hablado ha sido del lio entre Pierre Gasly y una de mis mejores amigas, Bianca. Al final todo quedó en una noche y ya no más. Bianca se dio cuenta de que Pierre era un poco picaflor.

- Chiara, vente que vamos a comer y la carrera va a empezar - me llama mi madre.

- Voy mamá - acabo de cerrar los libros, los apuntes y los estuches y voy hacia el comedor.

- He preparado lasaña.

- Genial.

Le damos un poco de volumen a la televisión y nuestros ojos se enfocan en la pantalla.

- A ver que sucede hoy, ojalá tengamos suerte - dice mi madre.

- ojalá, esperemos que sigamos así.

Por el momento, todo va genial Carlos sigue primero en el campeonato, y Charles segundo. El coche está funcionado increíble.

Es el Gran Premio de Canadá. En el circuito urbano, Gilles Villenueve. El circuito se llama así por el piloto Gilles Villenueve, que fue quien obtuvo la primera victoria en este trazado. Y fue renombrado cuando murió.
Este es uno de mis circuitos favoritos, y me da mucha pena no poder estar presente.

Vuelta de formación, cada uno a su posición de parrilla. Semáforos en rojos y a por todo. Carlos sale desde la quinta posición pero en la primera curva ya se encuentra en la tercera.

Al cambiar neumáticos sale quinto, justo por delante de Lando. Y enseguida adelanta a Hamilton, que va en cuarta posición. Se va acercando a los demás, y adelanta a Russell.

Díez vueltas quedan, y Carlos va segundo. Por delante va Charles, sacándole un segundo y medio a Carlos, que intenta acercarse a su compañero de equipo.

En un rápido movimiento Carlos se estampa contra un muro de protecciones. Mi madre me mira y me empiezo a morder las uñas al ver que Carlos no ha salido todavía del coche. Por radio se escuchan como le llaman y le preguntan cosas pero Carlos no responde. Inmediatamente, sacan la bandera roja y los marshalls y asistentes del circuito van corriendo hacia el coche, minutos después aparece una ambulancia y dejan de retransmitir las imágenes.

Empiezo a llorar, quiero saber qué pasa, quiero estar ahí.

- Mamá - murmuró abrazandome a ella - No puede pasar nada por favor.

- Tranquila hija, que estará bien.

Las horas van pasando y nadie dice nada de nada. Solo sé que se lo han llevado al hospital y que su primo Caco está con él. Sus padres y sus hermanas han cogido un vuelo directo hacia Montreal. Mi padre tampoco sabe nada, me ha dicho que él también iría al hospital.

- Te están llamando - me dice mi madre.

Me apresuró al ver el móvil para ver si es Caco o algún cercano, pero es Charles.

- Chiara.

- Charles, ¿sabes algo de Carlos?

- Muy poco Chiara, sé que esta en el hospital y que le están haciendo pruebas.

- ¿Nada más?

- Nada más Chiara, si me entero de algo te llamo.

- Charles, dime que estará bien.

- Chiara, seguro que no le pasará nada, Carlos es fuerte.

- Charles, llamame si te enteras de algo más.

- No lo dudes Chia, un beso.

- un beso Charles.

Llevo todo el día llorando, quisiera estar ahí y enterarme de qué esta pasando en realidad. Porque nadie me dice nada, y yo me agobio más. No quiero pensar en algo que no es, pero a mi nadie me deja claro nada. Está en el hospital, es lo normal después de tener un accidente, pero, ¿está consciente, no lo está? ¿Tiene fracturas o no? Tantas cosas hay en mi cabeza ahora mismo. Y yo lo único que quiero es estar allí y verlo a él.