una locura || Carlos sainz

Capítulo 32 : Nuestro momento

Carlos Sainz.

Las Vegas, una de las ciudades turísticas más famosas por su activa vida nocturna, casinos abiertos las 24 horas, opciones de entretenimiento, calles extensas, hoteles temáticos, fuentes sincronizadas con la música, réplicas de pirámides egipcias, el canal de Venecia y la torre Eiffel de París. Las Vegas es la ciudad más grande de Nevada.

El año pasado fue la primera vez que corrimos aquí, y este año es el segundo. Del año pasado guardo buenos recuerdos, fue un buen fin de semana, de hecho peleé por la victoria pero no hubo suerte y acabé consiguiendo un segundo puesto, que no está nada mal. Y más en un circuito donde jamás habíamos corrido.

Entramos en la recta final pero final, falta tan sólo una carrera sin contar esta. Esta temporada se me está pasando muy rápido y en menos de lo que me he dado cuenta ya estamos llegando al final.

Me siento en una banqueta esperando a que mi compañero y amigo Charles se digne a salir del baño, que él pobre tarda media vida en peinarse el pelo.

- Charles - lo llamo.

- Chilly, deja de dar por culo - murmura y yo rio.

- Tardas mucho - me quejo.

- Como sigas insistiendo más voy a tardar.

Ruedo los ojos y cojo el móvil de mi bolsillo trasero del pantalón, abro el chat de Chiara y veo de nuevo la última foto que me mando esta mañana, ella con un chándal que la hace ver genial.

- Un cubo para las babas de Carlos urgentemente.

- Que gracioso - digo levantandome y le doy una colleja cuando paso por su lado.

Chiara no ha podido venir este fin de semana, le hacia mucha ilusión venir de nuevo a las Vegas, pero no ha podido ser, tenía que hacer las prácticas en el hospital. Todo le va muy bien, ella está muy contenta y se le ve muy cómoda y yo no puedo estar más feliz y orgulloso de ella. Dentro de tres meses acaba las prácticas y ya le dirán el hospital donde trabajará de médica.

Me tumbo en la camilla unos segundos y cierro los ojos, me pongo los auriculares y pongo la Playlist que siempre escucho cuando estoy de buen humor, son canciones que me gustan mucho a mi y también a Chiara. Empieza a sonar "Otra Vez" de Aitana y sonrío al ver como la imagen de Chiara en el concierto de la cantante catalana aparece en mi cabeza. Hace un año fuimos al concierto en el Wizink Center de Madrid al concierto de la ex- triunfita, y esta canción aún no estaba en ningún sitio publicada, la canción empezó a hacerse viral en tik tok y la gente que iba a ir a los conciertos de Aitana empezó a aprendersela rápidamente, ese fue el caso de Chiara que en el concierto lo dio todo cantandola y ahora de vez en cuando la va cantando por casa.

- Carlos Sainz Vázquez de Castro.

- ¿Qué quieres Charles Marc Hervé Perceval Leclerc?

- Por dios, no me llames así que pareces mi madre cuando me regaña - dice rodando los ojos.

- Tú mismo has empezado - digo alzando los hombros.

- Tema aparte, nos tenemos que ir preparando.

- Es cierto, ya no me recordaba ni que tenía una carrera que correr.

- A saber en que andamos pensando Carlitos.

- En las ganas que tengo de darle placer a mi novia.

- no quiero saber eso guarro -  Charles me mira mal. - Me vais a dejar traumas entre los dos, si es que sois tal para cual.

- Charles, Carlos, a prepararse ya - nos grita Binotto desde fuera.

- tu suegro Carlitos - ríe Charles dándome un golpe en el codo.

- Cállate ya, loro.

- ¿Loro?

- Si loro, porque no callas ni un solo segundo.

Me pongo el mono y dejo la parte de arriba amarrada a mi cintura. Salgo del hospitality y veo a mis padres y a mis hermanas, así que me acerco a ellos. Estas últimas carreras están acompañandome en casi todas ellas.

- Carlos, ponte ahí que te vamos a echar una foto y se la enviamos a Chiara - me dice mi madre.

- Mamá no soy un niño pequeño.

- venga ya hijo que a Chiara le hará ilusión antes de que te vea por la televisión.

Me dan las últimas indicaciones antes de salir a la pista, repasamos las extrategias y me desean mucha suerte. Y que no cometa ni un mínimo error, que la clasificación está muy ajustada y aunque vaya primero en el mundial no me garantiza nada todavía.

Damos la vuelta de formación para colocarnos en los lugares correspondientes de parrilla, vuelvo a salir desde la pole position, ayer me marqué un vuelton sacándole casi medio segundo al segundo, que no es ni más ni menos que mi mate Charles.

Vuelta de calentamiento y todos los que estaban a nuestro alrededor desaparecen. Miro el semáforo fijamente y suelto un suspiro.

Voy a ganar y lo voy a hacer por Chiara.

Los semáforos se apagan y salgo tirando muy fuerte, por los retrovisores veo como Charles y Max están muy pegados a mi, y que Russell y Norris vienen peleando entre ellos por ganar posición. El coche se me va un poco pero consigo mantenerlo, por ese pequeño susto me pasan Charles y seguido Max.

Carlos hay que ir a por todo me digo a mi mismo. Aquí nadie me va a regalar nada.

Me acerco a ellos vuelta tras vuelta y me llaman para entrar a box a cambiar neumáticos.

- Carlos bien - me dicen por radio.

Sobre la vuelta sesenta sacan un safety car, el coche de Lewis se ha ido hasta la grava. Aprovecho para volver a entrar a cambiar ruedas y ya aguantar lo que queda de carrera, que son unas quince vueltas.

- Carlos, Max viene apretando.

Si Max aprieta, más voy a apretar yo. Esta victoria me la voy a llevar yo y nadie más.

Me enseña la parte delantera de su coche, está tan pegado a mi que si alguno de los dos cometemos un error los dos quedaríamos fuera de carrera.

Intenta adelantarme pero le cierro la puerta, en la recta me adelanta.

- Last lap.

- oído.

Esta es nuestra oportunidad Carlos.

Faltan pocos metros para llegar al final de la carrera, en la misma recta le adelanto y apretó. La bandera a cuadros cae, y si me he llevado la victoria.

Subo a lo más alto del podio y miro a mi familia, a mi equipo, veo a Matías y a su lado esta Chiara ¿Cómo que está aquí?

- mi ganador - indica mirándome.

- ¿Cómo qué estás aquí?

- Pensabas qué me iba a perder la penúltima carrera.

Me acerco a ella y la alzó en brazos mientras le como la boca bien a gusto.

- Está siendo tú momento.

- Nuestro momento - le corrijo con una sonrisa.