Estos años mi carrera ha ido en ascenso. Tras esforzarme caso, tras caso y ganar reconocimiento en mi área laboral, logré tener una buena cartera de clientes y así abrir mi propio bufete de abogados. Sebastián se vino un tiempo después y por fin, algo que planeamos tanto, como lo es trabajar juntos y vivir en la misma ciudad, se cumplió.
Alquilé toda una planta en un edificio céntrico. No es mi lugar soñado, pero sirve por ahora. Aún hay metas por cumplir y soy ambicioso. Pero de momento estoy conforme, tengo todo lo que siempre quise, una novia que me adora tanto como yo a ella, mi mejor amigo cerca y un bufete que crece cada día más.
Alex sigue trabajando donde yo lo hacía, ahora las únicas veces que nos vemos son en alguna que otra reunión, cuando coincidimos. Y sí, aun vamos a las reuniones, aunque con el pasar de los años, estas han evolucionado y joder, para mejor.
—¿Qué haces aquí? —pregunto con una sonrisa en cuanto Alyssa aparece en mi oficina—. Se supone que iría por ti para almorzar.
Como siempre que la veo, está hermosa. Contonea sus caderas de forma provocativa mientras se acerca a mi escritorio. Se sienta en el borde y sujeta con fuerza mi corbata.
—Quiero algo antes de ir a comer—susurra contra mi boca—. Y tú vas a dármelo—sonríe.
—Todo lo que quieras, bebé—respondo embobado.
Satisfecha con mi respuesta, camina hacia el baño y sin cerrar la puerta comienza a desvestirse. La ropa cae lentamente, dejándome admirar esa hermosa piel morena; sus ojos, con un brillo travieso, permanecen fijos en los míos y la forma en que lame sus labios cuando desabrocho mi pantalón, justo antes de ponerme de pie para seguirla, hace que quiera ponerla de rodillas ahora mismo.
Cierro la puerta del baño en cuanto entro. No me molesto en desvestirme antes de tomar las piernas de Alyssa y subirla en el lavamanos. Suelta un chillido por el frío, sus pezones se endurecen, tomo uno entre mis dedos y aprieto con fuerza, ella gime.
—No te saltarás el almuerzo, así que seremos rápidos—advierto.
Ella baja dos dedos a su sexo untándolos con su humedad, luego los lleva a mi boca y lamo con ganas.
—Mojada y lista para ti, amor—susurra en un tono seductor, endureciéndome aún más.
—Abre esas piernas, bebé.
Ella obedece, ansiosa. Soy yo el que se arrodilla y devora su sexo como un jodido hambriento. No importa cuantas veces esté con ella, cuantas veces la pruebe, jamás me canso. Sus manos se enredan en mi cabello y apoya su cabeza en el espejo.
—¡Dios, Mark! —gime.
Suelto un gruñido contra su sexo y me separo lo suficiente para palmear justo en el centro, haciendo que ella tiemble. Lamo y succiono todo lo que ella tiene para darme mientras sus pies se clavan en mi espalda. Aumento el ritmo, saboreo este suave coño al que soy adicto y cuando se tensa, sé que está por correrse; después de tantos años juntos, conozco muy bien su cuerpo. Así que me pongo en pie y la observo, su respiración sigue agitada, sus ojos brillan y lame sus labios antes de tirar de mi corbata y probar su sabor en mi boca.
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Quiero que tú quieras [Elbdo #2] COMPLETA
RomanceAlyssa Campbell es una chica alegre y soñadora, algunos incluso dicen que fantasiosa. Todo lo que ella quiere es encontrar a su gran amor, una boda perfecta, formar una linda familia y ser feliz. ¿No es mucho, cierto? Por otro lado, tenemos a Mark...