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— ¡Todos a las madrigueras! ¡Árboles vayan hacer guardia! ¡Hadas apaguen todas las luces! ¡Escóndanse todos! — Sapnap ordenó a todas las criaturas que se escondieran, agarró a Karl y llevándoselo consigo.

— Dream, tu ve con ellos — ordenó el Híbrido.

— Pero Quackity...— replicó Dream.

— Nada de "peros"...anda a cuidar a los chicos ¿si?

Dream inseguro de la decisión del híbrido, se fue con los demás, con un mal presentimiento acerca de lo que podría pasar.

Quackity, al ver que todos ya estaban escondidos y "a salvo", abrió sus casi doradas alas y emprendió vuelo hacia las afueras del bosque.

Los árboles guardianes hacían que flores crecieran en sus ramas, siendo un aviso de que no habían encontrado una pista del intruso.

Quackity volaba a una rapidez que jamás se le había visto, pasaba por las grandes montañas, por las cascadas, por los pequeños cultivos, sin en cambio no encontró a nadie.

Al haber hecho 5 vueltas de vigilancia por todo el bosque, decidió que era mejor no exponerse aquella noche, le encargó a los guardianes que siguieran vigilando, aquella oscura y sola noche, Quackity no dormiría.

El manto oscuro que tapaba al bosque se estaba yendo delicadamente para darle paso a la llegada del cálido calor del sol. Los animales mágicos no habían salido de sus madrigueras, pues preferían estar a salvo que estar expuestos a un posible "humano".

El híbrido, mandó a descansar a los guardias, quedándose él a cambio. Quackity paseaba a pie por todo el bosque, haciendo que sus alas se arrastraran por la fértil tierra, dejando a su paso pequeñas flores y rara vez ramas con espinas.

Su tranquilidad se vio interrumpida al escuchar el crujir de una rama, poniéndose alerta, se dirigió lo más rápido al lugar donde había provenido aquel sonido, se escondió tras los troncos y arbustos, esperando a ver al provocante que irrumpió en su bosque.

— Wow...— fue la única palabra que salió de la boca del híbrido al ver quien había tenido la osadía de escabullirse por el "tenebroso" bosque.

Una cabellera blanca se hacía resaltar entre la flora, sudadera blanca y pantalones negros.

Quackity creyó que era otro híbrido el que estaba viendo, ya que la persona que observaba tenía unas orejas de oso y una "máscara" al parecer.

Aunque su emoción estuviese al borde, prefería no confiar demasiado, ojalá Quackity hubiese quedado con aquella preferencia por toda su vida.

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Gracias por leer este fic inspirado en Maléfica, haré un pequeño maratón, espero que lo disfruten <3

Betrayal of the heart -Luckity- Donde viven las historias. Descúbrelo ahora