CAPÍTULO 24

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SEUNGKWAN
A la mañana siguiente, me desperté con el sonido de una maleta cerrándose.

Parpadeé y abrí los ojos ante los débiles rayos de luz que se filtraban a través de las cortinas frente a la ventana. Por un momento, mirando alrededor de la habitación desconocida, no sabía dónde estaba, entonces mis ojos se posaron en Hansol y recordé. Anoche. Tuvimos... Oh Dios. De hecho lo habíamos hecho. Traté de detener el rubor que subía por mis mejillas.

Hansol estaba de espaldas a mí, frente a su maleta, ya vestido. ¿Estaba… saliendo? Recordé que él regresaría a Las Vegas hoy y que yo también regresaría con mi familia, pero no hasta la noche. Eché un vistazo a la ventana. Debía ser temprano en la mañana aún. ¿Tenía que irse tan temprano?

– Buenos días – Le dije, tratando de llamar su atención.

Él se volvió hacia mí con una suave sonrisa.

– Estás despierto. ¿Te sientes bien?

¿Qué quiso decir? Por supuesto, yo estaba... Oh. Cuando me senté, noté cierto dolor en mi... trasero. No era tan malo, sin embargo. Había oído a menudo que a los omegas les resultaba más fácil que a los chicos normales. Quizás eso era verdad.

– Estoy bien.

– Es bueno escucharlo. Estoy bastante seguro de que mi cuñado me mataría si no te llevo a casa ileso.

– ¿Joshua? – Me reí – Estaría más molesto si no hubiéramos... ya sabes.

– Si, supongo. Le gusta entrometerse tanto como mi padre. Una adición perfecta a la familia, de verdad. Seok eligió bien.

– No estoy seguro de cuánto de eso fue elección – Me encontré a mí mismo diciendo.

– ¿Qué quieres decir?

Llevé la manta hasta mi barbilla. La habitación no estaba fría, pero de repente me sentí muy desnudo.

– Bueno, ellos están... predestinados, ¿verdad? No estabas allí para verlo, pero estaban locos el uno por el otro desde el principio – Y aunque estaba un poco celoso, me encantaba ver cómo se desarrollaba su historia de amor. El pobre omega rechazado quién no creía que volvería a encontrar el amor y el arrogante y rico dragón que se volvió suave por él. Era una de mis historias favoritas de la vida real. Me había dado la esperanza de que las cosas buenas le sucedían a los desafortunados omegas. Y sí, me encantó todo el concepto de compañeros predestinados. Tal vez un poco más de lo que quería que Hansol supiera en este momento.

– Eso es todo – Dijo Hansol – Pero hasta donde yo sé, mis padres están predestinados también, y no lo hicieron funcionar. Entonces no es una garantía – Se sentó en la cama conmigo y su voz se volvió suave cuando dijo – La vida no está hecha de cuentos de hadas, ¿sabes?

– Por supuesto que lo sé. Después de que tus padres se divorciaron, ¿volvieron a salir con alguien más? Porque me di cuenta de que los dos eran solteros.
Hansol pensó por un minuto.

– Para ser sincero, no estoy seguro de mi madre – Se estremeció – Hay algunas cosas en las que no quiero pensar.

– Lo suficientemente justo. ¿Qué hay de tu papá?

Él se encogió de hombros.

– Se encontró con otras mujeres de vez en cuando, pero nunca trajo a nadie a casa, así que... nada serio, supongo.

Me pregunto eso.

– Tal vez no sea posible conformarse con menos una vez que hayas conocido a tu alma gemela, incluso después de que termines con ella.

EDDSS - VERKWANWhere stories live. Discover now