CAPÍTULO 29

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SEUNGKWAN

Dos semanas trabajando en dos empleos, me agotaron por completo, lo cual, en su mayor parte, fue algo bueno. Cuando llegué a casa de apilar productos y libros todo el día, estaba demasiado agotado para pensar en el amor, un corazón roto o en la forma pequeña de mi hermano en una cama de hospital.

Con mi hermano enfermo y mi madre a su lado en el hospital, a menudo volvía a una casa vacía. Al menos eso significaba que no tenía que poner cara de felicidad a nadie. Podría ponerme mi pijama, cepillarme los dientes, acostarme, levantarme temprano a la mañana siguiente y volver al trabajo. “Enjuague y repita”. Incluso había perdido algo de peso, yay por mí.

Pero tan cansado como estaba estos días, dormir no siempre era fácil.

Algunas noches, cuando me encontraba pensando demasiado, recogía mi tablet para ver a mis amigos en BestReads. Dos o tres de ellos me preguntaron si estaba enfermo o algo así porque hace tiempo que no publicaba ninguna actualización, pero les dije que todo estaba bien.

Increíblemente fácil de hacer en Internet cuando las personas no podían ver tu cara.

Cuando terminaba de leer las publicaciones de mis amigos y agregar una cantidad de libros a mi siempre-creciente-lista-para-leer, a veces hacía clic en el perfil de “FlamingGenius”. Simplemente no podía resistirme. Pero nunca había algo nuevo allí. Había dejado de publicar sus reseñas, o tal vez ya no estaba leyendo, no podía decir cuál de las dos opciones. No es que debería haberme importado. Yo tampoco estaba leyendo mucho, y no había intentado escribir en semanas. ¿Cuál era el punto? Solo me deprimía cuando mi mente proporcionaba imágenes de Hansol para cada chico caliente en mi libro.

Una noche busqué en Google cuánto tiempo me tomaba superar el desamor.

Las experiencias parecían variar.

Y tampoco pude obtener resultados útiles cuando busqué sexo y respiración-de-fuego. Descubrí que a algunos dragones les gustaba hacer eso entre ellos, pero ninguno de ellos decían perder el control sobre ello.

Parecía que Google no sabía todo, después de todo.

Abandonando las búsquedas en Internet, recogí uno de los libros que Hansol me había dado. La novela romántica llamada “Los sueños de un dragón” que él había afirmado era su favorita. Todavía era reacio a leer, pero estaba demasiado curioso como para ayudarme a mí mismo. Nuestro amor por la lectura nos había conectado a mí y a Han, e iba a valorar los libros que él me había dado, incluso si eran lo único que tenía de él para guardar.

El libro fue escrito desde el punto de vista de un dragón, que era raro en el género. Inmediatamente me gustó este personaje. Como muchos héroes de novelas románticas, vivió en territorio humano y luchó con el odio que algunos humanos aún albergaban en secreto para con su especie.

En el exterior, se mostraba tan fuerte y temerario, pero por dentro realmente necesitaba ser amado y apreciado. Estaba feliz por él cuando encontró a un dulce omega que se hizo cargo de él, y no me sorprendió cuando dicho omega inmediatamente quedó embarazado la primera vez que los dos tuvieron relaciones sexuales sin protección. Eso siempre sucedía en las novelas. Solo en las novelas, me dije.

Pero algo que el omega en el libro dijo me llegó.

"Eso significa que estamos predestinados. Siempre funciona la primera vez cuando se está predestinado”

El autor lo había inventado, ¿verdad?

Si no, estaba jodido.

EDDSS - VERKWANWhere stories live. Discover now