Veneno Alfa: La Montaña Nevada

Capítulo 21: Enemigos aliados.

Ether se estaba volviendo loco en la guarnición. Nunsaib no podía haberse ido con El Cazador, no podía aceptarlo. Lo amaba demasiado como para asumir aquello y sentía un dolor en el pecho que no le dejaba respirar. YuMu le había dicho que volvieran a la guarnición antes de que algún esbirro de Wang Xi los encontrara, ahora mismo tener ventaja en aquel juego peligroso era crucial para salir vivos. Pero Ether solo quería salir y buscar a Nunsaib para hacerle entrar en razón, salir para encontrarse con Wang Xi y matarlo de la más cruel forma posible, quería escupir a los cielos, a los dioses por haberle arrebatado a su hermano y todos aquellos pensamientos le estaban volviendo loco de incertidumbre. 

Sabía que si se dejaba arrastrar por aquellos pensamientos las cosas se pondrían muy difíciles, tenía que pensar como Altair, tenía que pensar como Older y Dorni, no podía actuar como Ether, el príncipe alfa menor de la casa de los omegas azules, el más joven de los príncipes alfas impulsivo y visceral. Ya había llegado el anuncio del rey , al día siguiente a primera hora tenía audiencia con él y debía pensar muy mucho cómo iba a exponer la situación en la que su hermano estaba. Necesitaba más información, necesitaba hablar con YuMu para conocer cómo era el rey, cómo podía hablarle para convencerlo de lo que pasaba, porque su plan inicial de rescatar a Nunsaib e ir con el a ver al rey, se había esfumado.

YuMu llamó a la puerta de la habitación donde estaba Ether y esperó a que le diera paso. Al fin y al cabo, Ether era un príncipe y él sabía respetar las jerarquías aunque Ether fuera un maldito alfa de Eridan. El príncipe abrió él mismo la puerta con ímpetu y no dijo nada, solo clavó su mirada asesina en el esbirro de Wang Xi.

—Tenemos que preparar la audiencia de mañana—espetó YuMu entrando en la habitación.

—¿Qué vamos a hacer? No tenemos a Nunsaib, nuestro plan se ha ido a la mierda.—Ether cerró la puerta tras de sí y se colocó frente a YuMu. Si pudiera lo fulminaría con la mirada.

—No necesariamente. Si no tenemos pruebas de lo que Wang Xi ha hecho, al menos podemos convencer al rey de que el príncipe Nunsaib ha desaparecido y Eridan exige una investigación.

—Que Eridan exige una investigación, claro.—Ether apretó los dientes antes de contestar a voces— ¡ Exijo que mi hermano aparezca ya, eso es lo que exijo! Escucha, alfa, no me fío de ti. Si hubiéramos salido cuando te dije, estaría con mi hermano ahora mismo y no hablando contigo de cosas sin sentido.

—No estoy en su contra, alteza, debe creerme—contestó nervioso YuMu que había bajado la voz para que el príncipe alfa hiciera lo mismo.— Es cierto que no tengo simpatía por su pueblo, pero también es cierto que no me fío de Wang Xi, ha cambiado, o al menos se ha mostrado como es en realidad y yo nunca lo quise ver. Debéis creerme, quiero que esto se solucione porque de lo contrario, se iniciará una guerra y eso no es bueno para Eridan, pero tampoco para nosotros. 

—Y yo creo que todos los Wang lo estáis deseando con ese rey niño a la cabeza. 

—Entiendo vuestro dolor, alteza y por eso mismo me doy cuenta de que no veis toda la realidad que nos está arrollando ahora mismo. El Cazador se ha llevado a vuestro hermano, pero eso no solo afecta a Eridan, afecta a los Wang porque tenemos una alianza con los Liu. Ellos exigirán la cabeza de Wang Xuan por el agravio contra ellos por despreciar el matrimonio. Se alzarán contra nosotros. Y por otro lado, no tengáis ese pensamiento de nuestro rey, es más, temo por él en estos momentos. Siempre se ha posicionado a favor de la concordia entre los pueblos, no creo que eso sea lo que Wang Xi quiere. Si para mi señor el rey es un estorbo, lo aniquilará sin duda. Lo que no sé es cómo es capaz de mostrarse ante él sin que el rey vea sus verdaderas intenciones. Es muy extraño que un ser divino no vea lo que Wang Xi quiere en realidad y eso me tiene más temeroso aún.