El ultimo lugar seguro | The Walking Dead

31- Rodeados

31- Rodeados

Esto era ridículo, era lo único que Heath podía pensar mientras los ojos chocolates escaneaban a los niños que caminaban por la calle, obviamente ellos debían ser los hijos de Mavis, de alguna forma eran idénticos a ella a pesar de las diferencias; el niño tenía los ojos marrones cargados de brillos, la niña sostenía unos rizos chocolates y un rostro pecoso. Inhala profundo una vez más antes de aproximarse, deteniendo el caminar de las criaturas.

-Ustedes deben ser Balder y Yori ¿verdad? Los hijos de Mavis –indaga con un poco de duda, los hermanos se ven entre sí

-¿Tú quién eres? –Balder da un paso hacia adelante, la niña escondiéndose parcialmente detrás suyo

-Soy Heath, un amigo de su madre, nos conocimos hace unas semanas y trabajamos juntos en el exterior. – Heath intenta explicar lo mejor posible, la mirada de los dos se ve cargada de dudas- Me pidió que les dejara un par de mensajes

-¿Qué dijo mamá? ¿Cuándo volverá? –La niña se aferra al brazo de su hermano, con preocupación

-Pronto, no te asustes. Tu mamá está afuera para buscar a Glenn y a Daryl

-¿A papá?

-...Sí, a su padre. – Heath suponía que hablaba con Daryl, hacía poco que había regresado pero suponía que había algo entre ellos- Regresará pronto, a salvo, dijo que hasta entonces tenía que tener un ojo sobre ustedes para cuidarlos y creo que sería más fácil si nos conociéramos un poco ¿Qué dicen? También me pidió que cuidara de los demás, pero por lo que veo Carl y Judith ya tienen de regreso a su papá y Maggie esta con James.

-¿Cómo huérfanos? –claramente a la niña de rizos no le agradaba aquella idea

-¡Yori! –le regaña Balder, claramente ofendido ante la suposición de que algo pueda pasarle a sus padres

-No, no, nada como huérfanos. Los huérfanos no tienen madre ni padre, ustedes tienen a ambos solo que ellos están del otro lado de la muralla, alejando a los caminantes para que nuestra ciudad no sea un cementerio, para que podamos seguir viviendo. –Les intenta consolar- Seré más como... ¿un amigo? ¿Les parece bien? –Yori asiente, mas Balder no llega a responder nada coherente- Bien, mi trabajo ahora es acomodar los suministros junto con Olivia para que todos tengamos un poco de comida ¿quieren ayudarme?

-Yo estaré afuera con Carl y Judith ¿puedo? –la pregunta estaba de más, claramente dudaba sobre lo que estaba sucediendo pero aun así comprendía que era autónomo de sus decisiones

-Sí, pero mantente a la vista y a la noche regresas a casa, sal con armas. –El niño asiente por un momento ante las indicaciones del mayor -¿Yori?

-Yo quiero ayudarte ¿Qué se supone que haremos? ¿Dividir comida para que todos tengamos un poco, como en los juegos? –la mano de la niña se enreda entre las suya, una sonrisa escapa de los labios de Heath mientras asiente, explicando en susurros vagos lo que sucedía y lo que deberían hacer

- Heath. Solo será por un tiempo ¿verdad? –Cuestiona Balder con los ojos entrecerrados- Mis padres volverán.

-Te lo prometo, solo por un tiempo, tu mamá dijo no más de veinticuatro horas.

Tiempo, se dice que sana todas las heridas pero nunca mencionan como destruyen lo bueno del mundo, como convierte la belleza en cenizas.

-Oye ¿estás bien? –Carl acelera el paso para aproximarse a Ron, nota como el niño rueda los ojos

-¿Y por qué no habría de estarlo?

-¿Viste a Enid? –indaga, cambiando de tema

-No desde la última vez, cuando estaba contigo.

-Creo que Salió antes de que la horda viniera y está atrapada –la vista de los dos se dirige hacia el montón de muros