Capítulo 6

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_Eres increíble Song Mingi_ Dijo sarcástico Yunho del otro lado del teléfono.

Mingi había pasado ya media hora apoyado en el capó del auto sosteniendo el móvil con una mano y un cigarrillo nuevo en la otra. No paraba de fumar, este era ya el quinto cigarro que desaparecía en sus labios en tan solo segundos debido al estrés que sentía y que solo podía "calmarlo" sintiendo ese humo en su boca.

_Renunciaré en cuanto llegue_ Reprochó enseguida.

_Y la escusa será..._

_Solo renunciaré y ya_

Hubo un silencio de parte de ambos, al igual que Mingi su amigo se preocupaba y temia que algo le pasara.

_Bien, al parecer el gran y perfecto Song Mingi no soportó mucho más_ Dijo el mayor molestándolo un poco.

_Tss, en cuanto te diga quiero que borres todo, ¿Bien?_

Yunho aceptó y colgó al instante dejando a Mingi con su teléfono en mano y en completo silencio.

Se dió la vuelta mirando el auto y de la rabia pateó una de sus ruedas gruñendo molesto y maldiciendo a Park Seonghwa dentro suyo.

_Maldito hijo de put-

_Con ese temperamento te sacarán de aquí, hay cámaras_ Se escuchó una voz interrumpiendo el insulto del joven.

Miró hacia atrás de mala gana y se encontró nuevamente con Seonghwa quien venía solo está vez y su expresión era sería, más de lo común.

_Sabes, hablé con ella_ Hizo una pausa eligiendo sus siguientes palabras. _Yo no diré nada, haz tu trabajo y luego... necesitaré de tu ayuda_ Dijo extendiendo su mano hacia Mingi.

_¿Cuál es tu relación con ella?_ Preguntó Mingi sin siquiera esperar a que respondiera pero la curiosidad habló por él.

_Solo sé que si ella se beneficia con su muerte, pues yo también tendré beneficios_ Sonrió levemente luego de lo dicho.

Mingi no confiaba en aquel tipo, la expresión en su rostro al enterarse y la de ahora eran completamente diferentes. No podía entender que lo hizo cambiar así, que palabras escuchó de esa mujer para ahora decir que él saldría beneficiado.

_¿Cómo sé que tú no dirás nada?_

_Si yo digo algo... Tú mismo puedes matarme_ Luego de decir eso Seonghwa le dió la espalda y se fue de aquel lugar.

_Nos vemos en la próxima reunión Kim Hongjoong_ Se le escuchó a lo lejos decir amablemente.

El mayor acababa de llegar y con su suerte no había escuchado toda la conversación.

•••

De manera inesperada, Mingi continúo con la mentira ya que al momento de tener a Hongjoong frente suyo no pudo renunciar como lo había previsto.
Si lo de Seonghwa era cierto y no decía nada pues su trabajo resultaría como en un principio. Pero una cosa iba a cambiar, él no renunciaría a ser su chófer pero si al ser la especie rara de secretario que Hongjoong quería.

_Ya conoces el camino de la próxima reunión_ Se escuchó al mayor decir desde su lugar.

_Señor, quería decirle algo respecto a las reuniones_

_Bien, dímelo_

_Sólo podré llevarlo, es mucho para mí tener que asistir a reuniones y anotar cosas aburridas_ Mencionó Mingi mirando a Kim por el retrovisor esperando su respuesta.

_Es una lástima, me gustaba tener alguien como tú para que me acompañara pero está bien_

_Gracias señor_

_Si, y no me digas señor cuando estemos solo los dos, dime Hongjoong y ya, me siento de cincuenta años cuando me dices así_

Mingi asintió riendo por el último comentario del mayor.

_Está bien, Hongjoong_ Dijo encontrándose con la mirada del otro a través del retrovisor.

Luego de la pequeña conversación que ambos tuvieron, Mingi mantuvo su trabajo de solo conducir y llevar a su jefe a todas partes. Ahora nadie podía verlo, mucho menos si se quedaba dentro del auto con vidrios polarizados que apenas dejaban ver lo que pasaba dentro de este. Estaba mejor así, solo se quedaría allí escuchando música y fumando cigarrillos ayudándole a pasar el rato. Al menos hasta que Hongjoong le prohibiera hacerlo por el aroma a tabaco que dejaba impregnado en el auto.

Ya era media noche, estaba en su última reunión la cual acababa de terminar por fin. Hongjoong se encontraba exhausto de tanto viajar y fingir para los demás, no veía la hora de estar en su preciada cama envuelto en mantas para poder dormir cómodamente. Además había bebido un poco así que estaba aún más somnoliento.
Apenas podía caminar dos pasos sin marearse así que decidió llamar a Mingi antes de que cayera por ahí y estuviera tirado en el frío piso ensuciando su ropa.

_Estoy en la puerta, ven por favor_ Dijo casi murmurando y cortó la llamada.

Del otro lado Mingi salía del auto caminando tranquilamente hasta la puerta del edificio, no podía ir conduciendo ya que el tráfico estaba pesado al salir mucha gente del mismo lugar. Tampoco quedaba muy lejos así que era mejor ir a buscarlo caminando mientras el lugar se desocupaba de tantos vehículos.

_¿Vienes caminando?_ Fue lo primero que dijo al ver a Mingi acercarse.

_Como puede ver la entrada está repleta de autos, desde el estacionamiento saldremos tranquilamente_

_Tendrías que cargarme hasta allí entonces, apenas puedo moverme sin sentir mareos_ Dijo Hongjoong bromeando y llevó su brazo alrededor del cuello de Mingi para poder caminar a su lado.

_Si está en estas condiciones será mejor que mañana se tome el día libre_

_Va a matarme cuando llegue a casa_

_¿Su esposa?_

_No, ella ni siquiera está en el país_ Mencionó en un suspiro.

_Oh, entonces no tiene de que preocuparse_ Dijo Mingi haciendo reír al mayor.

Ya habían llegado al auto, Hongjoong se subió de copiloto dejando a Mingi confundido, su excusa fue que desde ahí podía sentir mejor la calefacción del auto ya que le hacía mucho frío. Claramente no pudo quejarse, era el dueño y podía hacer lo que quisiera así que solo se quedó en silencio y comenzó a conducir hasta la casa de su jefe, por fin su último destino del día.

_Ten esto_ Escuchó Mingi y al mirar a su costado Hongjoong extendía su mano hacia él entregándole unas llaves.

_¿Señor?_

_Hongjoong!! ¿Necesitas que te lo deletree?_ Dijo molesto.

Mingi solo tomó las llaves y continúo con lo suyo, pudo imaginar que llaves eran así que supo de qué se trataba. Volteó a ver a Hongjoong una vez más y este ya estaba dormido, sus ojos cerrados y su cabeza apoyada contra la ventanilla del auto. Lo despertaría cuando llegaran, le entregaría sus llaves y él por fin podría largarse a su propia casa para dormir.

_Pff, ¿Ahora cree que soy su niñera?_ Murmuró Mingi observándolo mientras esperaba a que el semáforo estuviera en verde nuevamente.

Ya estaba cansado, sería su última tarea de la noche y con suerte al día siguiente no trabajaría o eso esperaba él.

Asesino Perfecto •Minjoong• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora