Capítulo 32

118 24 4
                                    


Pasaron así los días, Mingi y Hongjoong habían desaparecido para los demás.
Seonghwa intentaba de mil maneras localizarlos pero le era imposible y es que la casa de Mingi estaba oculta de la mejor manera todo gracias a su identidad falsa, además este contaba con la ayuda de Yunho, quien se enteraba de todos los movimientos de Park Seonghwa para luego arruinarlos con un simple click.

Los dos enamorados pasaban los días fríos de invierno en esa casa, ninguno quería salir pues tenían todo lo que necesitaban allí dentro, se tenían el uno al otro y lo demás no importaba.
La excusa perfecta era el frío y cada vez que Hongjoong quería tener su tan ansiada cita con el más joven, un par de besos y toques de parte de Mingi lo hacían cambiar de opinión en segundos quedándose ambos entre las mantas causando un desastre incontables veces.

Fue así hasta que un día Hongjoong decidió salir por su cuenta.

Miró a Mingi dormir profundamente, dejó un beso en sus labios y salió de la cama para prepararse.
Como siempre hizo, su traje, sus zapatos y accesorios lo hacían lucir elegante e intimidante, sin dudas su personalidad cambiaba cuando se trataba de trabajo.
Necesitaba decirle a Mingi que saldría pero no quería despertarlo, sabía muy bien que volvería antes de las 12 y conociendo al más joven este dormiría hasta tarde, pues la noche anterior ninguno de los dos quiso ceder y aunque pasaban las horas a ellos simplemente no les importaba.

Cuando salió de aquella casa se percató de un pequeño detalle  y es que su auto no estaba, había olvidado que el más joven lo había dejado en un estacionamiento lejano y ahora su única forma de llegar a su oficina era en un taxi. Se subió al primer auto que vió, le dió las indicaciones necesarias y así llegó a tiempo al edificio donde trabajaba.

Aunque había desaparecido varios días, Hongjoong sabía que era una fecha importante para su empresa y es que la visita de importantes ejecutivos extranjeros, los cuales decidirían el futuro de su empresa en Corea y el resto del mundo, irían en una reunión con él y demás empresarios.
Apenas dió un paso dentro del lujoso edificio cuando los murmullos comenzaron.
Ver nuevamente al dueño desaparecido de aquella empresa había tomando por sorpresa a los demás empleados, quienes en su ausencia sufrieron los maltratados de Park Seonghwa ya que él mismo se atrevió a tomar las riendas de todo mientras Hongjoong se ausentaba.

_S-señor... Volvió_ Una de las secretarias se acercó, podía verse emocionada al tener a su apuesto jefe frente suyo, pero la realidad era que sentía alivio de que volviera y así el maldito de Park se iría de una vez.

_¿Ellos llegaron?_ Preguntó, Hongjoong tomaba todo normal, no había dimensionado el tiempo que desapareció sin decir nada, sin un aviso, él solo se fue y ahora llegaba como si nada solo porque tenía una importante reunión.

_Ellos ya están en la reunión_

_Bien, dales el aviso de que en unos segundos subiré con ellos_ Dijo y comenzó a caminar.

_Señor Kim..._ Llamó su secretaria y Hongjoong volteó amable esperando a que ella hablara. _La reunión ya inició hace una hora, Park Seonghwa está con ellos_ Dijo haciendo que el mayor abriera los ojos.

Sin decir nada se fue, subió al ascensor y entró a su oficina. No tardó en darse cuenta, Seonghwa se había instalado allí como nuevo dueño y eso no solo lo enfurecía, sino que le asustaba saber que hizo durante su ausencia. Llevó sus manos a su rostro, intentó calmar lo que sentía y suspirando se armó de valor para enfrentarlo no importaba si tenía que ser frente a todos esos hombres importantes.

Se paró detrás de la puerta, acomodó su corbata y aclaró su garganta. Podía escuchar como reían y charlaban, no parecía ser lo suficientemente serio, no parecía una reunión que él mismo daría.
Respiró hondo y con su mano sobre la puerta pensó unos segundos cerrando sus ojos, fue cuando la imagen de Mingi se hizo presente en su mente haciéndolo sonreír y olvidando el temor que tenía.

Fue así que Hongjoong entró a la sala de reuniones, el silencio se hizo presente y habían quienes lo miraban con sonrisas pues era alguien muy querido, otros borraron la felicidad de sus rostros estando completamente serios, no faltaba quien estuviera confundido al ver nuevamente a Kim Hongjoong y en la punta de aquella enorme mesa, Park Seonghwa miraba a Hongjoong con una expresión difícil de descifrar.

_Veo que se divierten sin mi_ Comentó sonriendo falsamente.

Caminó hacia donde se encontraba Seonghwa y dejando su mano sobre el hombro del contrario murmuró un "Quítate de mi lugar", para suerte de Seonghwa solo él lo pudo escuchar y así la humillación de salir de allí era menor. Aún así odiaba cada vez más a Hongjoong y fantaseaba con asesinarlo con sus propias manos más que nunca.

_Bien, ahora sí podemos hablar de negocios reales_ Dijo haciendo énfasis en las últimas dos palabras mientras miraba fijamente a Seonghwa.

Luego de la pequeña escena tensa que se había creado, todo marchó justo como Hongjoong lo había planeado, tenía las acciones que quería, tenía las autorizaciones en todo el mundo, podía crecer aún más como empresa y aunque eso lo tenía demasiado feliz, solo quería volver con Mingi y desaparecer nuevamente.
Los ejecutivos se marcharon por fin, algunos empresarios de empresas vecinas aún discutían asuntos internos y Park Seonghwa se mantenía en su lugar mirando fijo a Hongjoong mientras que con sus dedos golpeaba la mesa haciendo un molesto ruido.
Hongjoong no quería hablar con él, pero debía dejar ciertas cosas en claro así que siguiendo el juego del contrario se mantuvo en su lugar, sonreía cínico causando en Seonghwa molestia y esperó a que todos se fueran por fin.

_Veo que vuelves de tus vacaciones_ Seonghwa fue el primero en hablar, estaban solos por fin, ni siquiera estaban presentes los hombres que Seonghwa siempre llevaba consigo, esta vez eran solo ellos dos. _Sabes, ser el jefe no significa que puedas tomarte vacaciones de manera tan descarada, si no fuera por mi esta empresa estaría en bancarrot-_

_Si no fuera por ti, no estaríamos al borde de venderlo todo, ¿En que demonios piensas?_ Su paciencia era poca, creyó que Seonghwa podía asumir la responsabilidad pero al ver su actitud altanera no era capaz de tratarlo bien.

_Oh viejo amigo, ¿En serio crees que podría ser capaz de venderlo todo?_

_Una vez firme con el extranjero, dejaras de ser accionista de esta empresa, dejaras de ser parte de esta empresa y espero no volver a verte por aquí_ Hongjoong fue directo, no quería escuchar estupideces de parte de Park.

_No puedes hacer eso, sin mi no hubieras sido capaz de estar en esa maldita silla_

_¿Sin ti? ¿Solo porque trajiste un par de dólares crees que ya eres dueño? Eres alguien demasiado iluso Seonghwa_ Rió ante las creencias del contrario.

_Me das asco Kim Hongjoong, esperaba encontrarte muerto pero lamentablemente el que contrataron es un inútil_ Mencionó sin más, el odio que sentía era enorme y podía arruinar todos sus planes solo por la satisfacción de ver a Hongjoong sufrir.

_¿También eres uno de esos? El que da asco eres tu, ahora vete y no intentes tomar mi lugar, te falta mucho para ser como yo_ Comentó sonriendo.

Hongjoong no quería ser duro, pero lo que les diferenciaba el uno del otro eran los intereses. Mientras uno quería un empresa que creciera de forma honesta, el otro pensaba en estafar cuanto millonario se le cruzara solo por beneficio propio, y eso a Hongjoong le causaba rechazo.

_Que crees Hongjoong, casualmente tienes a alguien aún más asqueroso cerca tuyo, pero estoy seguro de que le perdonarías solo porque sabe cogerte bien y todas las noches_ Mencionó y sonrió antes de cerrar la puerta desapareciendo detrás de esta.

Él fue firme, ganó al saber mantener a Seonghwa fuera de asuntos importantes en la empresa, finalmente le dejó las cosas en claro.

Pero ahora sus últimas palabras antes de salir de esa sala rondaban la cabeza de Hongjoong.

Park Seonghwa no obtuvo lo que quería ese día, pero sabía perfectamente lo mucho que arruinaría a Hongjoong esas simples palabras y con la cabeza en alto abandonó el edificio esperando que un simple paso en falso de parte de Hongjoong lo llevaran a él, nuevamente a donde siempre quiso estar y ser el jefe de esa empresa.

Asesino Perfecto •Minjoong• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora