Con el gélido atuendo gris de capa blanca y diamantes plateados, Min Juwon parecía un Líder amortajado, sentado en su ostentoso trono sombrío, con su sucesor varado firme a su derecha, compartiendo una expresión similar con su padre.
-Líder Jeon Hyunsuk, es un honor recibir su solemne presencia en los predios de mi dominio.
-Ser cortes no va con tu personalidad, Min -asevero Hyunsuk, firme en los pies de las escalinatas que conducían al trono de Juwon, con su general y sus subordinados más leales secundando su postura-. Dejémonos de hipocresías y hablemos con palabras claras.
Juwon se reclino sobre su trono y enlazo sus manos sobre su regazo. La inexpresión en sus ojos de un color gris oscuro, simulando carecer de vida.
-Bien -asintió-. Entonces te escucho.
Hyunsuk se giro hacia su general y le hizo una pequeña venia. Su subordinado acorto la poca distancia que los separaba y le entrego la caja de madera que sus manos custodiaban. Un fuerte sonido seco se escucho entre el tenso silencio y los presentes soltaron exhalaciones de estupor y asco, al contemplar el contenido que el objeto resguardaba.
Jeon Hyunsuk había dejado caer la caja de madera con fuerza, provocando su inmediato destrozo por el impacto y la cabeza de Min Nayeon salir rodando por el piso de mármol.
-Traigo la cabeza de mi esposa a los brazos de su amante -increpo el Líder del Clan Norte.
Juwon mantuvo su mirada impasible, no afectándole las palabras de Jeon y mucho menos observar la expresión de terror congelada en la cabeza de Nayeon.
-Padre... -escuchó el susurro de su hijo menor a su derecha. Juwon levanto su diestra sin virar la mirada, callando las palabras de su sucesor con ese simple gesto.
-¿Eso es todo?, creí que tu visita tenia un propósito mayor y de relevante importancia -minimizo Juwon, disfrutando observar un atisbo de desconcierto en la disimulada mirada inescrutable de Hyunsuk.
-Jugaste tu juego Min Juwon y fallaste -dijo el alfa Jeon con voz segura, presidiendo una sonrisa de triunfo-. Mi heredero no llevara la sangre de tu Clan y tu no podrás hacerte del poder de mi territorio. Nayeon esta muerta y nuestro trato queda anulado por infidelidad. Mi orgullo fue manchado y fue mi deber defenderlo, quedando absuelto de todo juicio por las leyes de tu gobierno. No puedes condenarme Min y todos los presentes son testigos de ello al confirmar tu mismo tu injuria.
-Tienes toda la razón, no puedo condenarte. -Hyunsuk extendio más su sonrisa al escuchar las palabras de Juwon-. Pero...-pronunció Juwon, inclinándose hacia delante y sosteniéndole la mirada-, siempre debes recordar que este es mi Clan y mi palabra es ley dentro de mi territorio. No importa si eres culpable o inocente, si yo quiero que mueras, simplemente te mueres. Por más Líder que seas, aquí no eres nadie.
Hyunsuk titubeo su sonrisa y la confianza de su actitud, pero se obligo a mantener su semblante seguro. Sabia que caminaba sobre hielo frágil en tierras extranjeras, un paso en falso y se hundiría.
-Deja de dar vueltas y mejor expresa lo que verdaderamente te trajo a mi encuentro -continuo Juwon, cansado de escuchar las palabrerías de un cobarde.
-Mi tesoro. Lo quiero de vuelta -demando con determinación Hyunsuk.
-Lo haría, si supiera a que tesoro te refieres.
Jeon Hyunsuk apretó los labios, conteniendo los impulsos de lanzarse sobre el arrogante alfa que lo observaba con desdén. Deseaba tanto destrozar esos oscuros ojos grises y arrancar su cabeza de tajo.
-¡No trates de engañarme! -vocifero, no importándole perder la cordura frente a su enemigo. El deseo de recuperar a Seokjin siendo más fuerte que su raciocinio-. ¡La existencia del Índigo. Se que lo sabes! ¡La maldita perra de Nayeon debió ponerte al corriente!
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INDIGO (Namjin) /COMPLETA/EDITANDO
Fiksi PenggemarHay quienes afirman que nuevos seres Indigo serán concebidos dentro de la nueva generación de cambiaformas. Se ha sostenido que los cachorros Índigos nacerán con una característica particular, su aura de color azul. Una energía que su cuerpo emanara...