Después de la muerte de Jin XuanYu, cedieron tomar medidas ante ese asunto, ya de por si Xiao Zhan y Wang Yibo estaban en una larga lista de mercenarios con recompensa, no podían quedarse de brazos cruzados.
—Tenemos un plan, el experimento continua en pie, y esta es la siguiente etapa. Su She se encargará de eso. — Dijo Wen Rouhan a su socio Jin GuanShang,
Cuando Xiao Zhan recibió la llamada de que la persona que cuidaba a su esposo había sido asesinada y se lo habían llevado estalló en furia.
—¡Maldición Yubin! — le gritó.
—No debería de ser rastreado tan fácilmente. — Se justificó segundos antes de que Ji Li respondiera a su llamado.
El Comandante respondió que fue rastreado por una hacker independiente, haciendo más sospechoso el asunto. Ji Li era alguien capaz de rastrear a cualquier persona, y ahora ya estaba furioso por toda la situación.
—¿Creen que meterse con nosotros es un juego? — le dijo al otro lado de la línea. Y a los segundos logró encontrar donde estaba.
Estaba en el último piso de un hospital. No era tan considerado como se escuchaba, estaba en remodelación, con contaminación y sobre todo ruido. Estaba claro que la persona que lo secuestró tenía un plan. Se tomó demasiadas molestias en sobornar a los trabajadores y parecía ser carnada para que Zhan fuera.
—Sea quien sea va a morir esta noche — les dijo dirigiéndose al lugar, ya avanzada la noche había personas transitando en todas las direcciones, el solo llevó la pistola que les dieron el día de la graduación y su inseparable daga.
Logró sentir a su esposo muchísimo antes de entrar al edificio, estaba siendo custodiado por varios mercenarios, esperaba comenzar una masacre intentando que ninguna bala llegase a matar a su hijo.
Sin embargo; incluso en guardia uno de ellos abrió la puerta, no sintió ninguna sed de sangre viniendo de él. Pero si una pistola demasiado accesible, similar a las balas que han estado utilizando para acabar con ellos, y una jeringa que contenía algo que revoloteaba y que no podía saber que era.
—¡Hola Xiao Zhan! Es un gusto conocerte. De veras eres ciego. — Tenía ganas de arrancarle la cabeza. — Entra...
Sintió que nadie tenía el arma entre sus manos, todas descansaban sobre el pecho, no sabía cuáles eran sus intenciones, todo lo que quería era llevarse a Yibo de allí.
Su She tenía confianza por estar rodeado de muchos soldados, en cuanto a Zhan solo quería escuchar lo que tenía que decir antes de matarlos a todos. No tenían el dedo en el gatillo, un segundo era suficiente para matarlos a todos pero temía por la vida de su hijo.
Su She se colocó detrás de la camilla, y tomó del cuello a Yibo pero no intentando ahorcarlo, parecía con delicadeza. Como una caricia.
—Wang Yibo era un hombre bastante guapo, incluso en esta situación no deja de serlo... — cuando continuó acariciando su pecho, a Zhan se le revolvió el estómago, sus manos se convirtieron en puños, ¿Qué era lo que quería realmente? No tenía las intenciones de matarlo ni tampoco el deseo de tocarlo. Lo hacía solo para irritarlo.
Pero la gota que derramó el vaso fue cuando Su She ahora si introdujo sus dedos en la boca de Yibo.
—¡Ya basta! ¡quita tus sucias manos de mi hombre! — le gritó pero en lo que se acercó cada quien tomo su pistola apuntándole, Su She tomó la suya y apuntó a Yibo, Zhan no se detuvo, hasta que Su She apuntó el abdomen de Yibo.
Zhan se detuvo en seco, tanto entrenamiento y se había dejado llevar por la ira, pero temía, realmente no quería perder a su hijo, el único recuerdo del amor de su vida.
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Lista Negra
Hayran KurguXiao Zhan y Wang Yibo llevan 5 años de casados. Yibo suele ser sobreprotector con su esposo porque este es ciego. Sin embargo; en un trágico día alguien le dispara a Yibo en la cabeza dejándolo en un coma profundo, lo que mas le destroza el alma a Z...