DAEMONLas alas de Caraxes parecían brillar entre las nubes, sus escamas negras, rojas y naranjas daban la impresión de que iba cubierto de lava o carbón avivado. Dragón y jinete compartían una gran exaltación revoloteando y dando surcos en el cielo, el corazón de Daemon latía rápido acompañado de una linda sensación que no abandonó su cuerpo en todo el trayecto hasta King's Landing.
A medida que avanzaban, descendieron considerablemente haciendo sombra sobre las calles de la ciudad y que la plebe los observara con curiosidad, no era noticia que el príncipe y lord Corlys habían salido vencedores en los Peldaños de Piedra. Desde abajo, algunos se aventuraron a vitorearlo por ello.A pesar del típico silbido de la brisa y las gran aleteadas de Caraxes, Daemon pudo distinguir el bullicio que provenía de las justas. Realmente no le sorprendería si su hermano organizara un torneo en honor a la victoria en los Peldaños de Piedra, el rey siempre buscaba una mínima excusa para organizar éstos, eran su entretenimiento favorito.
Pronto, Caraxes emitió su sonido característico y el silencio pareció reinar rápidamente, la brisa ocasionada por las aleteadas del Anfíptero de Sangre hizo que más de uno se cayera de culo. Y si eso no era suficiente, dio tres vueltas sobre ellos, llegando a taparlos en arena y tierra.
Aterrizaron con majestuosidad, interrumpiendo el próximo encuentro, aunque de lo contrario no tendría problema en aplastarlos tranquilamente. El dragón rugió como de costumbre y su jinete finalmente se bajó, le regaló unas leves caricias con su mano libre mientras su vista no se despegaba de su hermano.Caraxes volvió a emprender vuelo sin problema alguno, y así, Daemon caminó hasta posicionarse ante el palco donde Viserys se hallaba sentado tomando una copa de vino junto con los miembros de la corte. El rey se incorporó sorprendido y se acercó para verle mejor.
Daemon iba ceñido con una corona hecha de huesos y en una mano llevaba el martillo de Crabfeeder, lo observó unos segundos y terminó señalándolo con el objeto, para después tirarlo sin importancia hacia la arena.—Añádela al Trono —insinuó con voz alta y firme.
Viserys decidió bajar acompañado de sus Guardias, sir Harrold fue el primero en acercarse y recoger el martillo, luego el rey se posicionó frente a su hermano y desenfundó su espada dejándola apoyada casi enterrada delante de sus pies. Ocasionando exclamaciones por lo bajo al mostrarse tan serio.
—Usas una corona, ¿te haces llamar Rey? —indagó con rostro serio.
Daemon notó como arriba en el palco, Otto Hightower se posicionó y los observó con el mentón en alto, de repente le entraron ganas de lanzar un cuchillo, sin embargo se aguantó y llamó a la calma.
—Una vez derrotamos a la Triarquía me nombraron Rey del Mar Angosto —confesó simplemente—, pero sé que solo hay un Rey, Su Majestad —recordó apacible.
Y a continuación, apoyó una rodilla al suelo ante su hermano, se quitó la corona y se la tendió para sorpresa de todos los ojos curiosos.
—Mi corona y los Peldaños de Piedra son suyos.
Una pequeña sonrisa tiró de los labios de Viserys, quien se acercó más hacia su hermano y acogió la corona entre sus manos, para terminar dándosela a sir Harrold. Todos observaban la situación y esperaban expectantes para ver cómo se desarrollaba el encuentro entre ambos luego de la última disputa y después de tantos años.
La multitud estalló en aplausos y vítores cuando los hermanos terminaron abrazándose con afecto.
—El Reino está en deuda contigo, hermano —se sinceró el rey—. Siempre tendrás un lugar en mi corte, ven.
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DESIRES ━━Daemon & Rhaenyra
Fanfic⊱ Daemon comienza a verla de manera distinta poco a poco, Rhaenyra reconoce que le tiene un poco más que estima, y ambos, terminan envueltos en las llamas del deseo y el peligro de lo prohibido. ⊰